MR - "Saga" #055: El Retorno del Rey
Aviso de Spoilers: La reseña que sigue a continuación trata los sucesos más recientes de la serie revisada, por lo que puede desvelar detalles argumentales importantes para quienes no estén al día. |
Durante la década pasada Image Comics estableció su lugar como compañía líder en traer cómics de autor a la vida. Los cimientos establecidos en los 2000 dieron pie a que muchos creadores quisieran publicar aquí sus obras. Sin lugar a dudas la más importante comenzó el 2012 y lleva el nombre de Saga. Esta historia de amor imposible entre 2 razas en guerra consiguió hacerse con los más prestigiosos premios de la industria en múltiples ocasiones, y alcanzó ventas bastante impresionantes, coronándose como el rey del del panorama indie.
25 de julio de 2018. Un día que para muchos marcó un antes y un después, en aquella época donde no veíamos el fin del mundo tan cerca. Ese día se publicó el capítulo #54 de Saga, que no solo fue impactante por su contenido, si no que además incluía en sus palabras de cierre una carta de despedida. En esta se anunciaba estábamos en el punto medio de la historia, y que el descanso hasta el siguiente capítulo duraría "al menos el próximo año" (refiriéndose al 2019).
Pasarían unos 1280 días (3 años y 6 meses) para tener la continuación de esta historia en nuestras manos. Días en donde hemos vivido revueltas sociales, alzamientos del fascismo, y una pandemia de 2 años que aun no acaba. Y la pregunta viene de cajón: ¿Pueden Fiona Staples, Brian K. Vaughan y Fonografiks continuar el éxito que los mantuvo en lo más alto del mundo del cómic en la década pasada? Vamos a averiguarlo.
SAGA #055
Editorial: Image Comics
Publicación: 26/01/2022
Guion: Brian K. Vaughan
Arte: Fiona Staples
Rotulado: Fonografiks
Reseña: Rodrigo Méndez
9,5 / 10
"Así es como una idea sobrevive." Comenzamos la segunda parte de esta obra estableciendo lazos con la frase que comenzó todo "Así es como una idea se hace realidad" en el #1. Hazel tiene ya unos 10 años, y la encontramos escapando por las calles de un mercado, aparentemente después de robarse algo. Esto podría estar sucediendo a la vuelta de la esquina, pero no pasa mucho hasta que aparecen las tropas aladas de Landfall y se nos recuerda del conflicto de proporciones galácticas que se encuentra al centro de la obra. Aunque la guerra sigue, el tiempo pasa. El bebe ya ha crecido y abrió sus alas, literalmente.
Pronto nos ponemos al día con casi la mitad de nuestro elenco sobreviviente. Varemos a Alana vendiendo leche para bebes de forma poco convencional con su nuevo socio, el koala con brazo prostético Bombazine, a Squire yendo a terapia por los traumas causados tras el episodio anterior, y a The Will camino a Wreath para cobrar una recompensa que nos tuvo a todos llorando hace 3 años. El capitulo hace muy buen trabajo en recordarnos rápidamente en que quedó cada personaje cuando lo dejamos de ver, y además apuntar hacia donde se dirigirán ahora sus historias. Hay ausencias importantes, aunque supongo pronto veremos más de favoritos del público como Ghüs.
Repasemos el arte. Una mezcla entre los 10 años de experiencia retratando estos personajes y el tiempo extra que tuvo por el descanso hacen que sus lápices digitales de Staples se vean mejor que nunca. Hagan el ejercicio de contrastar el #1 y el #55 para notar la nitidez del trazo. Las texturas han aumentado en detalle, al igual que los fondos. El coloreado varía mucho dependiendo del entorno, generando claras diferencias si nos encontramos en la nave árbol, con esa iluminación tan hogareña y orgánica, o en una noche en Wreath. Los diseños de personajes nuevos son tan creativos como siempre, especialmente de mi agrado fueron los policías de fuego.
Es un episodio emotivo, donde empezamos a ver como los sucesos traumáticos del #54 afectan a los niños protagonistas. Es duro ver que no hay esperanzas para el retorno de ambos padres, más aun ver a la ex esposa de uno teniendo sexo frente al cráneo de uno de los personajes más queridos por todos. Pero Saga siempre ha sido un mundo donde los momentos tiernos vienen rodeados de tragedia. Podemos estar tranquilos que eso no ha cambiado en este descanso.
Fue toda una experiencia volver a leer Saga. Siento que es una obra que funciona en múltiples niveles, y siempre ha destacado por abordar problemáticas del mundo real como la adicción o el aborto con altura de miras. En este mundo pandémico lleno de incertidumbres, me alegra tener la certeza que Saga sigue siendo lo que siempre fue: El rey del cómic indie del último tiempo.