"The X-Files": historias de Navidad paranormal
Los fantasmas se parecen mucho a los familiares. Esperados o no, tienen la costumbre de aparecer durante la época de fiestas. Ya sea que se trate de apariciones metafóricas de elecciones pasadas, o de espíritus muy reales que se alinean para ayudar a arreglar tu vida, el mes de diciembre es un foco de actividad para los espíritus chocarreros. Y como ya no estamos en los ochenta, ¿a quien llamas si es que eres testigo de la manifestación de los fantasmas de la Navidad pasada, presente y futura? Exacto, a los agentes del FBI Fox Mulder y Dana Scully. Ponte tu gorro de Santa Claus, que revisaremos historias de la serie de televisión The X-Files que transcurren en esta época del año.
Durante su emisión original de nueve temporadas, y las dos del revival, la serie The X-Files cuenta con solo tres episodios navideños. El show no fue asiduo en vincular capítulos a ciertas fiestas o celebraciones —muchos se preguntan por qué nunca existió una historia de Halloween, por ejemplo—, pero hay un par de excepciones durante las temporadas 5 y 6, cuando el programa aún se encontraba en el tope de popularidad.
La primera fue una historia de dos partes, anclada en la mitología central del show, que lidiaba con el efecto dominó del secuestro de Scully y el impacto que causó en su cuerpo, su mente y su familia. El otro hacía gala del conocido formato Monstruo de la semana, con un divertido episodio de una casa embrujada. Por tanto, estas historias navideñas son una instantánea de los dos tipos de episodios que presentaba la serie, y de la variedad de casos que Scully y Mulder debían resolver.
"Christmas Carol" (5x06) es un capítulo centrado en Scully —en parte, para acomodar los deberes promocionales fuera de cámara de David Duchovny para la película Playing God—, que transcurre mientras visita a su hermano Bill durante las fiestas. Su cuñada está embarazada y el hogar de su hermano militar se ve exactamente como en el que creció Scully. Las época navideña puede generar muchos sentimientos, y dado lo que ha sufrido en las temporadas anteriores, Dana tiene más equipaje que la mayoría. En este punto de la serie, acaba de enterarse de que, como resultado de su secuestro en la temporada 2, no podrá tener hijos. Esto es algo que no había considerado querer hasta que le dijeron que ya no era posible. Claro, nunca sabes lo que tienes hasta que lo pierdes.
Los miembros de la familia ausentes, como su padre y su hermana, hacen que el hogar parezca inquietante e incómodo, lo que se complica aún más cuando Scully recibe una llamada desde más allá de la tumba. Una voz que suena muy parecida a su hermana muerta, Melissa —Melinda McGraw—, implora a Scully que "vaya con ella". La "ella" en cuestión es una niña de 3 años llamada Emily, que tiene un extraño parecido con Melissa cuando era una pequeña. Tras rastrear el número, se descubre que al mismo tiempo que se realizaba la llamada, la madre de Emily yacía muerta en la bañera, por heridas aparentemente autoinfligidas. Scully llama a Mulder, pero no logra decirle a su compañero lo que sucedió en San Diego, ni tampoco encuentra una explicación. En cambio, tendrá que aguantar a su familia que cree que está transfiriendo el dolor por su infertilidad a esta pequeña niña, además de enfrentar cierta hostilidad de Bill, que está frustrado por la falta de alegría estacional de la agente, culpando de eso a la influencia de un Mulder que ni siquiera está aquí.
En un guiño a la famosa historia de Charles Dickens, Scully ve su pasado, presente y futuro entrelazados a través de sueños de navidades pasadas. En uno, su hermano Bill quiere matar a un conejo que ha encontrado, mientras que otro describe el año en que su madre le regaló a ella y a su hermana un colgante de cruz, cargado de significado. El último, retrata a una Scully llena de dudas acerca de si ir o no a la Academia de Quantico. En esta escena, su hermana ofrece orientación y tranquilidad, combinando los fantasmas de la navidad pasada y el futura. Debido a que Melissa le dio confianza en el pasado, Scully recibe el empujón que necesita para enfrentar la verdad frente a ella.
Dickens escribió ese relato acerca de un hombre que se enfrentó a sí mismo para no morir solo, y Scully debe hacer lo mismo, pero en última instancia, está salvando a esta pequeña niña de un destino horrible. "Christmas Carol" termina la mañana de Navidad con el clan Scully abriendo los regalos. Ella recibe un regalo mucho más significativo que cualquiera de las cajas del árbol, pues los resultados del ADN revelan que Emily no es hija de Melissa: es la hija biológica de Scully .
La segunda parte, "Emily" (5x07), está menos ligada al marco festivo de la historia, incluso si las luces de Navidad que aparecen en ciertas escenas son un recordatorio de esta época del año. Las connotaciones religiosas son algo duras: como Jesús, esta niña fue esencialmente concebida por un milagro, y traída a este mundo solo para morir, y cumplir un propósito. El productor ejecutivo y creador Chris Carter ha tomado algunas decisiones bastante cuestionables con respecto a la maternidad y el cuerpo de Scully, y aunque esto no es tan sorprendente como en la temporada más reciente, intenta dar un sentido más milagroso a la violación del personaje, y al horrible experimento al que fue sometida. Por otra parte, la historia de la mitología se comenzó a complicar bastante, por lo que revisitar estos episodios puede parecer un poco confuso si eres un televidente nuevo, o no recuerdas bien algunos detalles.
De todas maneras, es un gran dueto de capítulos, y una muestra tanto de la solidez y belleza con la que son escritos los episodios mitológicos, como de la gran capacidad actoral de Gillian Anderson.
A pesar de que utiliza el tema de la desesperación, "How the Ghosts Stole Christmas" (6x06), es mucho menos melancólico, incluso si ahonda en la soledad inherente de Mulder y Scully. Los legendarios actores Ed Asner (Maurice) y Lily Tomlin (Lyda) representan a un par de fantasmas que intentan emular a un Grinch, pero más mortíferos, pues son una pareja que hizo un pacto suicida en la Nochebuena de 1917, y desde entonces han intentado llevar a los residentes de esta mansión gótica al mismo destino. El negocio ha estado lento desde que se sabe que la casa está embrujada, pero Mulder está ansioso por picar ese anzuelo, y Scully lo acompañará, a pesar de que cualquier persona normal querría estar en otro lugar. Ella menciona que todavía tiene regalos para envolver, y gruñonamente le dice a su compañero que tiene "mucha alegría festiva para difundir".
Mientras "Christmas Carol" se relacionaba con el secuestro de Scully, su familia y sus miedos innatos, Maurice y Lyda se burlan y ponen a prueba la relación co-dependiente de Scully y Mulder. Antes de que los agentes se separen dentro de la casa, Scully expone las razones científicas por las que las personas están fascinadas, y asustadas, por los fantasmas. "En realidad termina diciendo más sobre los vivos que sobre los muertos", opina, y agrega que la creencia en los espíritus se alimenta de un deseo de inmortalidad. De esta manera, podemos estar con nuestros seres queridos por la eternidad. Incluso traza una línea entre los sentimientos que tenemos sobre los fantasmas y lo que nos lleva a la Navidad: estos poderosos deseos son la esencia de lo que nos hace humanos.
La atmósfera se mueve desde lo inquietante, como la tormenta que arrecia en el exterior —no se puede visitar una casa embrujada sin el clima apropiado—, hasta lo profundamente perturbador. Esta es una casa que aparentemente tiene dos bibliotecas idénticas, paredes de ladrillo donde debería haber puertas, y escaleras que desaparecen. A pesar de la filosofía continua de Mulder y Scully de que se trata de "trucos y engaños baratos", los fantasmas pusieron todos sus años de práctica en estas dos almas solitarias.
Maurice acusa a Mulder de ser narcisista, egoísta y ególatra, mientras que Lydia describe con precisión el placer de Scully de demostrar que Mulder está equivocado. En este punto, todavía solo hay muchas señales tácitas y sentimientos no resueltos entre la pareja, pero los fans teníamos ilusiones por lo que pasaría entre ambos en el plano sentimental. Y sin duda, su confianza ya había pasado por pruebas mucho más intensas y peligrosas.
Más tarde, Mulder está viendo en la televisión la adaptación de Scrooge de 1951, cuando Scully pasa por su lugar. Intercambian regalos—lamentablemente, no vemos lo que se dieron el uno al otro—, y aunque los fantasmas alumbraron algunas verdades, lo que se vio como debilidades también son las razones por las que estos dos son compañeros perfectos. A pesar de sus defectos, y manipulaciones ocasionales, no hay nadie con quien preferirían pasar esta tiempo, más que el uno con el otro.
Como decíamos, en última instancia estas dos historias navideñas representan los dos estilos narrativos de The X-Files. Ninguno es un contendiente en el Top 3 en su categoría, pero hay algo que ganan al estar ambientados en esta festividad. Por lo menos, tener a Ed Asner y Lily Tomlin como espíritus traviesos, y asesinos, debería ser suficiente para agregarlos en tu lista de reproducción de fin de año.
Bonus Tracks
Como sin duda sabrás a estas alturas, las aventuras de Scully y Mulder no solo se han limitado a la pantalla. También han protagonizado varias series de cómics, y en ellas también encontramos historias ambientadas en vísperas de navidad. Hagamos un repaso rápido de ellas.
- The X-Files #1 (1995 - Topps Comics). La extraña muerte de un N.N. en una iglesia, llevará a Mulder y Scully a investigar el misterio de la Profecía de Fátima, que ha sido robada desde el vaticano y aparentemente está en manos de un grupo terrorista en el corazón de New York. La verdad es que en la historia la época de navidad solo sirve como ambientación, pues para la trama tiene poco y nada de importancia. Stefan Petrucha en guiones y Charlie Adlard en dibujos comenzaban así la primera colección de cómics de The X-Files, y que a la postre, sería una de los mejores. Y por cierto, todo cierra con una frase antología de Mulder: "Todos leyeron la Profecía de Fátima, y lo único que yo conseguí fue esta polera roñosa".
- The X-Files X-Mas Special 2014 (IDW Publishing). Enmarcado en la época de la serie The X-Files: Season 10 de Joe Harris —antes que apareciera una verdadera temporada 10 en televisión—, no es más que un especial adecuado para matar el tiempo entre entregas de la serie central. Su argumento gira alrededor de una fiesta de navidad organizada por Skinner, al estilo de esas convivencias de amigo secreto. Mulder busca a última hora un regalo para Scully, y en su periplo, podría tener un encuentro cercano del tercer tipo con Santa Claus. Además, el número contiene una historia de complemento protagonizada por los agentes Ellison y Ohio, protagonistas de la miniserie The X-Files: Zero Year.
- The X-Files X-Mas Special 2015 (IDW Publishing). Correspondiente a la serie The X-Files Season 11, también de Joe Harris —otra vez, antes que existiera una verdadera Temporada 11 en televisión—. Rompiendo la tradición de contar historias independientes, este año Harris usó el especial como parte integral de su Season 11, en parte para capear la falta de espacio debido a la reducción drástica de los números que tenía planificados para dicha serie. Justo a tiempo para la temporada navideña, los Lone Gunmen sufren la inminente llegada de algunos visitantes indeseados, que sin embargo traen como presentes datos acerca de los planes de Gibson Praise y el paradero de Mulder, tramas sobre las que versaba la colección central.
- The X-Files X-Mas Special 2016 (IDW Publishing). Enmarcado en la serie regular titulada simplemente The X-Files, otra vez de Harris, estas páginas contienen una curiosa y paródica historia autoconclusiva. Cuando una gala navideña escolar toma un giro extraterrestre, Mulder debe lidiar con fantasmas del pasado, peligros presentes y encuentros cercanos del futuro. Junto a Scully, y una multitud de visitantes inesperados, redescubrirán el espíritu de la temporada, si es que pueden sobrevivir la noche. Tenemos entre manos un número muy liviano, que no incide en los hechos narrados en la serie principal, pero que funciona como un agradable acompañamiento. Era inevitable que tarde o temprano viéramos a Mulder y Scully inmersos en A Christmas Carol, el clásico entre clásicos de Charles Dickens, y como Harris hizo un gran trabajo consolidando el universo de nuestros agentes con historias originales y una mitología propia, no se antoja fuera de lugar tomar prestados estos elementos. Insertar a Mulder en los terrenos de los famosos fantasmas de la navidades es muy plausible, pues es un personaje con un recorrido tan tortuoso que parece perfecto para repasar el viaje de su vida e imbuirle un nuevo sentido al enfrentarlo al pasado, presente y futuro.
Como vemos, contamos con un buen puñado de historias si es que queremos a The X-Files como acompañante de un buen pan de pascua. Las aventuras de Mulder y Scully han demostrado ser bastante versátiles, y por ello las tenemos en varios formatos y estilos. De seguro, mas de alguno será el complemento perfecto para aquellos momentos de descanso luego de la cena familiar.