Marvel Salvat – Cuatro Fantásticos: El Fin
La Primera Familia, aquella que inició la era Marvel de los cómics, no podía estar ausente de cualquier selección que se precie, y es así como los 4F hacen su arribo a la Colección de Novelas Gráficas Marvel de Salvat / El Mercurio. Veamos, por tanto, lo que encontraremos en el tomo de esta semana, titulado Cuatro Fantásticos: El Fin.
CUATRO FANTÁSTICOS: EL FIN
Contenido: Fantastic Four: The End #001-006
Guion: Alan Davis
Arte: Alan Davis
Tintas: Mark Farmer
Color: John Kalisz
A principios de la década pasada, Marvel gestó una serie de miniseries para contar historias crepusculares de algunos de sus héroes más famosos. El proyecto partió con Hulk: The End (2002) de Peter David y Dale Keown, al que siguieron Marvel Universe: The End (2003) de Jim Starlin y Al Milgrom, X-Men: The End (2004) de Chris Claremont y Sean Chen, y The Punisher: The End (2004) de Garth Ennis y Richard Corben. Por supuesto, el grupo que representa la columna vertebral del cosmos marvelita no podía perderse tal ocasión, y es así que en junio de 2007 llegaría a los quioscos el primer número de Fantastic Four: The End.
Cuatro Fantásticos: El Fin es un volumen que contiene los seis números de dicha serie limitada, escrita y dibujada por la leyenda del noveno arte Alan Davis (Excalibur, Avengers), con tintas de Mark Farmer y color de John Kalisz. La relación del artista inglés con los Richards siempre fue cercana, pues de manera regular ha realizado portadas para la serie, e incluso iba a ser el artista permanente del título después de Heroes Reborn, aunque lo abandonó al tercer número. En 2007, Davis recibió el encargo de este proyecto tan especial, una saga que describiría la aventura final de los Cuatro Fantásticos, a lo que no podría negarse.
La serie está ambientada en un futuro cercano, después del incidente conocido como "Mutant Wars", debido a lo cual Reed Richards finalmente decidió desarrollar todo el potencial de la Tierra. Erradicó las enfermedades y extendió las vidas de todos en el planeta exponencialmente. El crimen prácticamente ha desaparecido, y hay héroes en todo el Sistema Solar, que ahora se ha aislado de los Kree, Shi’ar, Skrulls y otros alienígenas belicosos. Por tanto, el Universo Marvel es finalmente una utopía.
Eso no quiere decir que haya sido un avance pacífico. El prólogo muestra que Franklin y Valeria Richards murieron en la batalla final del grupo contra el Doctor Doom. Veinte años después de eso, los sobrevivientes aún no han superado la pérdida, y los 4F no lograron mantenerse juntos. Ben Grimm se retiró a Marte con Alicia Masters y sus hijos. Johnny Storm es ahora un héroe importante, y líder de los Avengers. Sue Storm se ha abocado en una investigación arqueológica, buscando diversos artefactos esotéricos en la Tierra. Reed es un ermitaño en un satélite en que juguetea con sus inventos, obsesionado en continuar con la mejora del planeta.
La intriga principal se desata por la alianza entre los Kree y los Shi’ar, que en su intento de obtener acceso y destruir el Sistema Solar, han recurrido a la ayuda de otros supervillanos clásicos. Los cuatro ex-compañeros de equipo se reúnen poco a poco cuando los Avengers y S.H.I.E.L.D. detectan una señal emitida hacia Marte, casi al mismo tiempo que un grupo de villanos ataca un campo de cuarentena en el límite del sistema. Johnny recluta a Ben para ayudar y pronto ambos se dirigen al asteroide de Reed para rescatarlo del Super Skrull y Annihilus. Mientras, Sue ha encontrado la reliquia que está buscando, y que guarda un secreto que podría crear un nuevo comienzo para los 4F.
Si asumimos como literal el subtítulo de la aventura, El Fin, cualquiera podría imaginar el desenlace. Afortunadamente, el título va más allá, alejándose un poco de lo que de otra manera sería un gran cliché. Por supuesto que hay una enorme batalla final y melodramas propios de una historia crepuscular, pero eso no es lo más importante de cara a Reed y los suyos, y de hecho, el quid definitivo es una agradable sorpresa, a pesar de que tampoco es algo que sea difícil de deducir. Si bien es cierto que el final de esa multitudinaria pelea podría parecer apresurado, todo va en función de la verdadera trama. Davis lo sabe, pues incluso Thor comenta que la resolución de la batalla es “desconcertantemente extraña”. Sin querer destripar demasiado, podemos decir que la narración va en una dirección contraria a la que su nombre indica.
El autor decidió crear un relato que se sostiene por sí mismo, y que no requiere un conocimiento detallado de la continuidad del grupo. Sin embargo, comenta que ese objetivo sólo se logró “en la medida que fuera posible con un grupo que ha tenido una influencia significativa en el Universo Marvel, y que cualquier aventura que finalizara con sus épicas aventuras necesitaría probar el efecto de su presencia y su ausencia". Al respecto, Davis señala que las expectativas promedio de cualquier serie sobre un Fin es que todos mueran. “Pensé que hacer toda la aventura predecible era inútil, por lo que comencé con muerte y penumbra, para luego apuntar en una dirección más optimista. Esto me pareció apropiado porque más allá de sus muchos obstáculos y tragedias, los Cuatro Fantásticos siempre fue un cómic optimista.”
Lamentablemente, la idea no funciona del todo bien. La trama sobre los Kree y Shi’ar demuestra ser, como se señaló anteriormente, solo una complicación innecesaria para la acción principal. Ese argumento secundario dedicado a S.H.I.E.L.D. y los Avengers descifrando el plan de los dos imperios alienígenas no logra encajar en un 100% con la historia principal de los Richards, por lo que básicamente seguimos dos argumentos no completamente concatenados, dando la impresión que a veces la presencia de los Avengers no tiene demasiado aporte. De todas maneras, aunque este handicap baja su puntaje total, la obra sigue siendo una pieza muy recomendable, digna de ocupar un lugar en la estantería de un aficionado al grupo y a Marvel.
No obstante lo anterior, cualquier duda que tengamos en el guion es compensado por el maravilloso arte de Davis, que con Farmer en tintas, es una alegría para la vista. Su trazo es detallado y abundante, lo que permite que todos los personajes tengan momentos destacados y emociones palpables a través de sus rostros y el lenguaje corporal. Más que un ilustrador, Davis es un gran narrador visual, por lo que los protagonistas se sienten dinámicos y vivos. No rompe los límites del medio, pero como todas sus obras, tiene un muy atractivo aspecto visual.
Cuatro Fantásticos: El Fin es, en resumen, una buena obra. Puede tener algunos fallos en el guion, pero el apartado visual es tan impecable que hace que olvidemos el resto. Una historia esperanzadora, que hará las delicias de los fans de los personajes, y que además es recomendable para todo aquel que quiera leer un buen cómic autocontenido. Porque no todas las historias de finales deben ser tristes, a veces es bueno despedirse con una sonrisa. Y porque a veces, el fin también es un nuevo comienzo.
Comparación con otras ediciones
Como en casi todos los casos, para encontrar otras ediciones de esta obra debemos mirar hacia el otro del charco, hacia la editorial Panini Cómics España. En esta oportunidad, sin embargo, la única publicación del titulo fue en un tomo de tapa blanda con solapas de la línea 100% Marvel, pero que a día de hoy está descatalogada. De encontrarse en tiendas chilenas, su precio oscilaría entre CLP$12.000 y 15.000, pues su valor de tapa original es de EUR€12.
- PANINI CÓMICS | 100% Marvel - Los 4 Fantásticos: El Fin