50 Años de Mampato - "¡Piratas a Babor!" y "El Tesoro de Flint"
Estimados Lectores:
Llegamos al final del camino. En este aniversario por los 50 años de la Revista Mampato, hemos acompañado a Mampato, Ogú, Rena, Xsé, Kolofón y demases a distintos lugares y épocas, pero este es el viaje final que realizaremos en Cuarto Mundo con la última historia íntegramente publicada por Themo Lobos. Publicada en la Revista Ogú, esta es la única historia de las que se me asignaron en esta tanda que no había leído en mi niñez, y solo tuve acceso a ella cuando fue publicada en la edición de Editorial Sudamericana con un nuevo coloreado. Así que entremos de lleno, ¡esto es Mampato en una carrera contra piratas por el tesoro del Capitán Flint!
¡PIRATAS A BABOR! / EL TESORO DE FLINT
Publicación original: Revista Ogú #001-006, Álbum Ogú #002
Autor: Themo Lobos
No puedo comenzar esta reseña sin mencionar un punto confuso en la cronología de Mampato. Verán, esta historia es conocida también como "Los Piratas" —publicada con ese subtítulo en la edición de Editoial Sudamericana—. Sin embargo, los que han puesto atención a nuestra retrospectiva, ¡saben que ya existía una historia llamada "Los Piratas" escrita por Óskar Vega, donde Mampato se quedaba atrapado en el pasado luego de que un "gemelo malvado" le robara el cinto espacio-temporal! Son historias muy diferentes a pesar de que, bueno, ambas tienen piratas, pero vale la pena mencionarlo. De hecho, en la Revista Ogú la historia fue bautizada como "Ogú y los piratas" y "El tesoro del Capitán Flint".
De todos modos, siempre me resultó extraño la decisión de hacer otra historia de Mampato sobre un barco, considerando que esto ya había ocurrido en a) "Los Vikingos", b) "Los Piratas" de Óskar, c) "Los Balleneros". Eso sin mencionar que hemos tenido, adicionalmente, ¡dos aventuras bajo el agua, con "El Mundo Submarino" y "En el Fondo del Mar"!. Es un detalle menor, considerando que el díptico "¡Piratas a Babor!" y "El Tesoro de Flint" es una muy buena historia de Themo Lobos, pero no puedo quitarme la sensación de que había otros espacios no explorados por Mampato que pudieron haberse ocupado en lugar de repetir este escenario.
¡¿DÓNDE ESTÁ MI MAMPATO EN EGIPTO?! (No, "La Civilización Enigmática" no cuenta).
En esta aventura de más de 120 páginas, Mampato y Ogú se embarcan en un puerto inglés durante el siglo XVII, sin sospechar de que el barco pronto será secuestrado por un grupo de piratas —pondré en duda que Mampato no lo esperaba, fue precisamente la razón que tuvo para viajar a esta época—. Sin demasiadas opciones —a pesar de que Mampato nunca pierde el cinto en esta aventura y pudieron escapar en cualquier momento—, Mampato decide enrolarse con los piratas, al tiempo que un nuevo misterio comienza a develarse: alguien en la tripulación posee el secreto sobre la ubicación del tesoro del Capitán Flint. Ahora, es una carrera para ver quién logra dar con él primero.
Es interesante para mí leer esta historia por primera vez como adulto, y descubrir que incluso descubriéndola tiene todo el encanto y magia de cualquier otra de las historias de Mampato de antaño. Es cierto que no la nombraría como "una de las mejores", pero sí la pondría bastante arriba en la lista. Sin duda tiene todas las dosis de aventura, humor y tensión que esperaría de este cómic, con giros y vuelcos que mantienen ágil a una historia que no necesariamente necesitaba ser tan larga, pero que no aburre salvo en secciones menores. El elenco de personajes es amplio y divertido, con un loro llamado Loreto destacando especialmente, y con un grupo de villanos que, aunque no son necesariamente los más memorables, sí tienen toda la dosis de humor y maldad que caracteriza a todos los antagonistas de Themo.
Hay un punto que quisiera mencionar y que sé que fue objeto de análisis en otra página: el coloreado. Verán, cuando esta historia fue publicada por Sudamericana vino con un nuevo coloreado, lo que causó alguna polémica por no respetar los colores de la revista original. Esta no es la primera vez que ocurre y en parte estoy de acuerdo que alterar ciertos elementos del original es una falta de respeto para el artista que lo hizo primero. Pero este es el asunto: el coloreado en la publicación original es un desastre. Hay páginas con fondos sin colorear, personajes cuyo cabello cambia de color entre cuadros, ¡incluso hay una página completa donde ninguno de los personaje tiene color! No es algo que simplemente podía dejarse como estaba. Estoy de acuerdo que algunos cambios son extravagantes, particularmente en la elección de coloreado para Panamá, pero en general, creo que el nuevo coloreado fue una decisión correcta para esta aventura en particular.
Lo que me lleva, eso sí, a la extraña decisión tanto en la revista original como en la nueva edición de incluir un personaje llamado Palemous cuyo rasgo es, básicamente, que nadie se dio la molestia de colorear su piel. Sé que el nombre significa "rata pálida", pero este no es un personaje a quien hayan pintado albino: es solo un personaje al que nadie se dio la molestia de pintar, y no se ve para nada bien. Y no me molestaría tanto si no estuviera presente en prácticamente todas las páginas. Es quizás el único personaje en la historia de Mampato que me produce tal desagrado por todos los motivos equivocados.
Dejemos de lado estas quejas menores. Como decía, esta es una aventura muy tradicional de Mampato en todo el buen sentido de la palabra, pero destaca bastante por Mampato mismo brillando en su ingenio para salir de situaciones complicadas —como el final— y al mismo tiempo, por hacer lo correcto. Esta historia fácilmente pudo tratarse de Mampato enrolándose con los piratas y participando en sus actos violentos del grupo al que se une, como en otras historias —"¡Arde Troya!" y "Los Vikingos"— así que considero que está bien que ponga una línea aquí. El final es particularmente bonito, cuando decide dejar el botín del tesoro a los niños desnutridos. Es fácil aplaudir a Ogú y Rena en cada historia que participan, pero Mampato siempre ha sido el motor de estas historias.
Y supongo que también es la hora de decirle adiós, pues como adelanté, esta sería la última aventura, no contando la incompleta "El Tibet" —que tuvo una reedición particular años más tarde— y también es mi última reseña. Ha sido un agrado volver a visitar a mis viejos amigos, Mampato, Ogú, Rena y Xsé, e incluso conocer en el camino a nuevos como Kolofón. Pero como Mampato regresando con su cinto en el tiempo, siempre podemos volver una vez más a tomar estos cómics y recordar lo maravillosos que son, y renacer toda la aventura y emoción que tanto Themo como Oskar trajeron por tantos años a niños y adultos de todas las generaciones.
Atentamente,
Farfaramir