MR DC 178 - El retorno de Sueño
Aviso de Spoilers: Las reseñas que siguen a continuación tratan los sucesos más recientes de las series revisadas, por lo que pueden desvelar detalles argumentales importantes para quienes no estén al día. |
Nueva entrada en MicroReseñas DC y hoy tenemos algo especial. Porque la gente lo pidió, Sandman y sus personajes vuelven con nuevas historias preparadas por su creador Neil Gaiman. Pero no descuidamos el resto de colecciones de la editorial, así que tenemos un jugoso miércoles lleno de contenido. Pasen y compruébenlo.
DETECTIVE COMICS #986
Publicación: 08/08/2018
Guion: Bryan Edward Hill
Arte: Phil Briones
Tintas: Phil Briones
Color: Adriano Lucas
Reseña: Aarón
6,0 / 10
A pesar de que Bryan Hill fue anunciado con bombo y platillo, Detective Comics no es mas que una serie que sigue siendo simple preparación para un futuro equipo de Outsiders. Jefferson sigue intentando mantener a raya al equipo sin ser muy eficiente y con cada quién haciendo lo que quiere.
Batman parece fuera de si, no tan preparado como suele estarlo y aún siendo vencido por algunas sorpresas, por el mismo villano genérico al que probablemente pudieron haber derrotado hace un par de números pero que sigue suelto para seguir introduciendo personajes para el equipo.
El problema más grande es que esta serie sufre de lo genérico de la misma. El arte es bastante agradable y en general el ritmo y los diálogos no son tan malos, pero todo se siente tan repetido y tan regular que es casi imposible destacar algo de la misma.
SUPERMAN #002
Publicación: 08/08/2018
Guion: Brian Michael Bendis
Arte: Ivan Reis
Tintas: Oclair Albert, Joe Prado
Color: Alex Sinclair
Reseña: Oscar Cayul
7.5 / 10
Parte el cómic con un viaje al pasado a una guerra Tamaraan-Thanagar, se siente el conflicto inminente y la valentía del pueblo natal de la joven Titán, pero toda esa decisión y seguridad se esfuma cuando advierten la presencia de Rogol Zaar, el villano nuevo creado por Bendis, como si de arma de destrucción masiva se tratase. Ivan Reis dibuja una ciencia ficción-fantasía hermosa, el drama de un desastre inminente, y Bendis logra vendernos un conflicto intergaláctico en donde su personaje parece pieza esencial, misteriosa y temible. Excelente secuencia inicial.
La próxima secuencia no deja de ser sorpresiva, muestra al clásico Superman reflexivo, ese que nos cuenta anécdotas, pensamientos y recuerdos atingentes a su presente. El relato tiene que ver con una consulta clásico, si acaso no es una tortura estar siempre escuchando el clamor de otras personas, el peligro y los pedidos de auxilio. La respuesta no podía ser más Superman, porque en dos partes nos dice que podría ignorarlo, que puede apagar escuchar todo eso , que eso es algo que todos hacemos, y que por otro lado, observa también la resiliencia de la gente, los que ayudan y los que también salvan, esos también están. En una primera parte nos dice por qué no es una tortura ser Superman, en una segunda parte no está diciendo que lo que experimenta él lo podemos experimentar todos. Hermoso. No es la primera vez que Bendis pone palabras y pensamientos en la voz del héroe tan bien pensadas, tan propias del personaje, y a la vez tan bellas, otro punto alto de momentos irregulares del nuevo guionista.
El resto del número no está a la altura de este primer cuarto de páginas, pero hay momentos memorables de todas formas. El cameo de la primera aparición en continuidad de un curioso personaje de las películas clásicas de Superman deja más preguntas que respuestas, y también la tensión extra natural de que la presencia del planeta en la zona fantasma le afectará inevitablemente así como los poderes del protagonista. Evidenciado por un Flash que solo confunde porque le pintaron el pelo rojo siendo Barry, el mundo está en peligro. De pronto esta historia ha levantado vuelo.
WONDER WOMAN #052
Publicación: 08/08/2018
Guion: Steve Orlando
Arte: ACO
Tintas: ACO, David Lorenzo Riveiro
Color: Romulo Fajardo, Jr.
Reseña: Fantasma Rojo
7,0 / 10
Una de las grandes falencias de la serie actual de Wonder Woman ha sido su incapacidad para salir de su zona confort, haciendo que incluso conceptos extravagantes tales como aquellos relacionados al Cuarto Mundo perdieran brillo. Por suerte, esta semana Steve Orlando nos entrega un cómic que demuestra que la zona divina de DC es un área con potencial a la que vale la pena prestar atención.
Un comentario que suele encontrarse en internet respecto de la princesa amazona es que conceptualmente ella es más cercana a Thor que a Superman, situación que lamentablemente no suele reflejarse en esta cabecera, existiendo una tácita timidez a explorar el lado divino del universo DC, situación notoriamente obvia tras el casi nulo aprovechamiento de la revelación dada en Multiversity que muestra a diversos panteones compartiendo un reino en común. Wonder Woman #052 empieza a compensar esta deuda, dejando de lado las medias tintas y abrazando de lleno la idea que lo divino es campo fértil para ideas alocadas, resultando bastante evidente el grado de influencia que tuvieron las historias de Grant Morrison para la creación de esta entrega, lo cual para suerte nuestra es algo positivo, ya que más que emular el contenido de ese autor, Orlando cultiva las semillas narrativas que dejó el escocés para crear algo nuevo.
Lamentablemente no todo lo que brilla es oro, siendo los diálogos el punto más débil del número, los cuales resultan un tanto genéricos y sin la suficiente cuota de personalidad, cosa que no es fácil de ignorar dado que una parte importante de la entrega se centra en las interacciones entre Wonder Woman, Artemis y la nueva Aztek. Aunque esto no arruina al cómic, tampoco le hace favor alguno.
En general esta entrega ofrece bastante más de lo que uno podía esperar de un arco de relleno, interconectando ideas que no habían recibido mayor continuidad y ampliando el canvas de lo que un cómic de Wonder Woman puede plasmar.
HAL JORDAN AND THE GREEN LARTERN CORPS #050
Publicación: 08/08/2018
Guion: Robert Venditti
Arte: Rafa Sandoval
Tintas: Jordi Tarragona
Color: Tomeu Morey
Reseña: Aarón
9,5 / 10
Hemos llegado al número final de la corrida de Robert Venditti y con ella, la conclusión de la guerra de los Green Lanterns vs los Darkstars. El último número nos dejó en medio de la batalla entre Tomar-Tu y Hal Jordan, así que este número se concentra en esa pelea.
Una pelea de principios se convierte en una batalla a golpes, con ambos personajes cambiando intercambiando sus opiniones mientras de muelen a puñetazos. Tomar-Tu argumentando que el mundo no es tan sencillo y la única solución al mal es matar a todos aquellos que lo comitan, mientras Hal Jordan intenta hacerlo entrar en razón y hacerle ver que no es la solución.
Sin atestar el golpe final, Jordan decide eliminar a los Darkstars de una vez por todas, así que la historia da un giro completo, con una sobrecarga de voluntad desarmado de una vez por todas al malvado ejército y deja a los linternas como la patrulla espacial que se encargará de poner orden en el Universo.
Durante Rebirth, la voluntad de Hal Jordan fue la gran constante, desde crear su propio anillo hasta demostrar que podía más que los demás y al final todo se ve reflejado en ese último destello que deja inválido al enemigo.
Esta serie - junto a Superman - ha sido para mi de las más entretenidas durante esta etapa de DC y Venditti realmente cumplió con creces. Es hora de esperar a Grant Morrison y ver por donde lleva al Caballero Esmeralda.
SUPERGIRL #021
Publicación: 08/08/2018
Guion: Marc Andreyko
Arte: Kevin Maguire
Tintas: Sean Parsons
Color: FCO Plascencia
Reseña: Fantasma Rojo
6,0 / 10
La llegada de Brian Michael Bendis a DC sin duda alguna remeció por completo la estructura editorial de las series vinculadas a Superman. Dado el carácter mensual que tiene Supergirl, no habíamos tenido oportunidad de ver como este terremoto editorial afectó a la serie de la chica de acero y que es lo que se podía esperar de ella en éste nuevo escenario.
Con un nuevo equipo creativo constituido por Marc Andreyko a cargo de los guiones y Kevin Maguire aportando dibujo, no es descabellado esperar un cómic de buena factura técnica que alce a Kara Zor-El a nuevas alturas y que le dé una nueva dirección interesante. Desgraciadamente, estas expectativas se cumplen solo durante la segunda mitad del número, ya que lo que vemos en las primeras páginas de esta entrega merece comentario aparte.
Para mala suerte de todos los involucrados, Andreyko y Maguire tropiezan en su debut con errores no forzados. La decisión de comenzar una nueva etapa con Supergirl antagonizando a su primo es mala porque se siente como un retroceso en cuanto a caracterización. El presentar a Kara Zor-El actuando desagradable porque “nadie la entiende” no es un concepto nuevo, es más, gran parte su etapa de The New 52 trató sobre como ella aprendió a lidiar y superar su mala actitud. Volver a tocar esa tecla luego de verla durante más de 20 números lidiando de forma mucho más madura con sus problemas es un despropósito. Lo más curiosamente absurdo de esto, es que el equipo creativo parece darse cuenta, ya que durante la segunda parte del número las diferencias de opinión entre los super-primos son tratadas de forma más acorde a lo que se ha visto en Supergirl desde que empezó Rebirth, haciendo aún más inexplicable la necesidad de mostrar a Kara actuando como una adolescente idiota.
Lamentablemente, no todos los problemas de este cómic provienen de malas decisiones narrativas. Kevin Maguire no parece estar a toda máquina, ya que aunque la conocida expresividad que imprime a sus personajes sigue presente, a ratos parece querer ahorrarse trabajo no detallando mucho las facciones, cosa que resalta gracias a la hilarantemente triste cantidad de ojos bizcos que se ven durante el número.
Este nuevo punto de entrada tiene dos almas, pero solo una de ellas vale la pena. Ojalá el mal sabor de boca que dejan sus primeras páginas solo sean un mal paso y no el auspicio de cosas por venir. El concepto de Supergirl y Krypto teniendo aventuras espaciales no merece ser limitada por las circunstancias miserables que le sirven de excusa.
THE FLASH #052
Publicación: 08/08/2018
Guion: Joshua Williamson
Arte: Christian Duce
Tintas: Christian Duce
Color: Luis Guerrero
Reseña: Fantasma Rojo
7,5 / 10
Con más de 50 números a cuestas, cuesta creer que Joshua Williamson siga teniendo energía para llevar esta serie. Con Flash War ya en el retrovisor, entramos a nueva era donde la falta de certidumbre es una virtud.
Un mal que suele aquejar a cómics como The Flash es la creencia equivocada que toda amenaza debe ser absoluta para resultar intrigante. Williamson no ha estado ajeno a ese defecto, entregando en ocasiones relatos que al tratar de abarcar demasiado se vuelven superficiales. Al verse obligado a seguir una historia con tanto peso como lo fue Flash War, era esperable que se corriera este riesgo, cosa que parecía reafirmarse en la escena de apertura ambientada en la House of Heroes de Multiversity, pero esto no fue sino una hábil maniobra de distracción.
The Flash #52 logra contener su energía y mostrar que caracterización y trama no son fuerzas en disputa, sino complementos naturales, o dicho de modo más claro, aunque la presente entrega se centra en la exploración de una de las nuevas fuerzas elementales desatadas en el arco anterior, no se queda en eso y da espacio para que personajes como Trickster, el alcaide Wolfe o incluso el futurista Commander Cold empiecen a desarrollarse. Etapas como las de Mark Waid y Geoff Johns tienen tan buena consideración precisamente porque logran mantener ese equilibrio y para suerte nuestra, Williamson parece haberse contagiado de su buen oficio.
Para quienes no estén familiarizados con la versión actual del velocista escarlata, The Flash #52 resulta un excelente punto de entrada al presentarnos un status quo bastante abordable, un reparto de personajes fáciles de seguir e incluso cierta sinergia con la serie principal de Justice League. Lo bueno es que esta accesibilidad no sacrifica el trabajo del resto de la etapa, no teniendo que reinventar la rueda para entregar una nueva dirección a la serie.
HAWKMAN #003
Publicación: 08/08/2018
Guion: Jeff Lemire, Robert Venditti
Arte: Bryan Hitch
Tintas: Andrew Currie, Paul Neary
Color: Alex Sinclair
Reseña: Fantasma Rojo
7,5 / 10
¿Cuántos comics has leído esta semana que partan con su protagonista peleando mano a mano con un T-Rex? Si tu respuesta es “ninguno”, Hawkman tiene la solución. Las nuevas aventuras de Carter Hall están desafiando hasta el más optimista de los pronósticos al ofrecernos una serie que se siente como una reinterpretación moderna de un héroe Pulp.
Individualmente considerado, este tercer número es más débil respecto de sus dos primeras entregas al abundar escenas de acción que perfectamente pueden interpretarse como relleno destinado a gastar páginas. Esta idea es engañosa, ya que a pesar de que efectivamente esta edición es más “física” en cuanto a trama, sus implicancias son sorpresivamente introspectivas. Los pasajes selváticos y los desafíos imposibles no son sino ropajes que cubren un viaje de autodescubrimiento que queda en evidencia al prestar atención a las escenas más tranquilas y a los diálogos internos.
Aunque Hawkman en esta ocasión se presenta como un cómic de acción, no pierde sustancia y mantiene el buen nivel que ha presentado hasta ahora, entregando un cómic que divertido y fácil de abordar.
SUICIDE SQUAD #045
Publicación: 08/08/2018
Guion: Rob Williams
Arte: Jose Luis
Tintas: Vicente Cifuentes, Jordi Tarragona
Color: Adriano Lucas
Reseña: Fantasma Rojo
7,5 / 10
Una de mis pocas aprehensiones respecto de Aquaman era lo aislada que se sentía respecto del resto de series de DC, pero luego del golpe de timón de su última entrega, es bueno ver que una de las series más infravaloradas del catálogo actual finalmente toca tierra. Para mala fortuna de los habitantes de Atlantis, y buena suerte nuestra, su primer punto de contacto con el resto del universo DC es mediante un crossover con el Suicide Squad de Rob Williams.
Sinking Atlantis es un caso de laboratorio para la idea detrás de los crossover, ya que entrama los argumentos de ambas series participantes sin que haya un importante grado de pérdida como consecuencia de un equipo creativo interpretando una serie con la que no se encuentra habituado, o en otras palabras, el lector que venga desde Aquaman se siente como en casa gracias a que Dan Abnett participa de forma directa, ampliando el alcance y rol de sus personajes. A pesar de lo diferentes que son ambas series, los puntos de contacto no resultan artificiales y por lo tanto no se sienten con voces en conflicto.
A pesar de que este cruce empieza en Suicide Squad, los ritmos narrativos los marca Aquaman, ya que es un nuevo capítulo de la historia que inició en Throne of Atlantis durante The New 52 y que tuvo continuidad en el actual volumen de Aquaman antes de la saga de la Guerra Civil atlante. Independiente de la serie desde la cual se aborde, el cómic cumple.
En el papel, un crossover destinado a tratar las consecuencias de Dark Knights – Metal suena como caldo de cultivo para cómics terribles, pero contra todo pronóstico William y Abnett sacan la tarea adelante y ofrecen un interesante nuevo episodio de las Aqua-aventuras de Arthur Curry.
THE SANDMAN UNIVERSE #001
Publicación: 08/08/2018
Guion: Neil Gaiman, Nalo Hopkinson, Kat Howard, Simon Spurrier, Dan Watters
Arte: Bilquis Evely, Max Fiumara, Sebastian Fiumara, Tom Fowler, Dominike "Domo" Stanton
Tintas: Bilquis Evely, Max Fiumara, Sebastian Fiumara, Tom Fowler, Dominike "Domo" Stanton
Color: Mat Lopes
Reseña: Oconowoc
9,0 / 10
Eventualmente tenía que pasar. Y, de hecho, pasó hace mucho tiempo. Mas derivados de Sandman, quizás la más famosa obra de Neil Gaiman, tenían que llegar. Pero con este Sandman Universe hay una pequeña gran diferencia que aumenta significativamente la apuesta.
Mientras que el universo Sandman se había limitado a un número de series auto conclusivas autorizadas por Gaiman y una que otra escritas por él –como los especiales de Death- la presión por nuevo material tenía que llegar a puntos muy altos en la plana mayor editorial, como para seguir insistiéndole al autor que vuelva a sus personajes. Porque, por contrato, cualquier producto derivado de la creación de Gaiman tenía que ser supervisado por su creador, y de ahí su limitada presencia en el mercado. Esta dosificación serviría para poner a los fanáticos con los dientes largos por más material y que terminaría con un último esfuerzo de la editorial: la aclamada Sandman Overture. Pero para DC Comics no era suficiente.
Claramente, el autor sabe que no lo van a dejar tranquilo hasta que la editorial pueda sacar la última regalía de su creación, por lo que para subsanar esta necesidad de tener su presencia atada a cada nueva andadura de sus creaciones, ha reunido un grupo de guionistas. Gaiman en esta ocasión hace de conductor de orquesta y encarga a su selección de guionistas la elaboración de los relatos que componen este nuevo universo.
The Sandman Universe parte de forma similar a como parte la historia original: The Dreaming parece estar colapsándose al no tener a su señor gobernándola. Y como adivinan, el único que puede solucionar toda la situación es Sueño. Aquí entra el cuervo Matthew, quien será el encargado de viajar y encontrar al eterno favorito para que trate de revertir la situación.
Esto sirve de excusa para presentar a los distintos personajes que compondrán este Sandman Universe: desde viejos conocidos como Timothy Hunter o Lucifer hasta nuevas adiciones como la inquietante Dora. Cada historia está unida por el mismo hilo conductor, pero se siente bastante orgánica en el conjunto, claro que como primer número, deja plantada la semilla para un nuevo set de historias que se supone que continuara en cuatro colecciones distintas. Destaco que, a pesar de servir como un inicio claramente impuesto por la editorial, también funciona como una divertida historia que recurre a veces a la nostalgia. Pero vamos, que dice Sandman en el título y es obvio que van a aparecer viejos conocidos para los fanáticos de esta serie.
El dibujo de cada sección es espectacular y único. Cada dibujante se siente bastante diferenciado y atado en estilo a los personajes que les tocaron y voy a asumir que los mismos se van a repetir en cada título futuro que compone este nuevo universo. Destaco mucho el trabajo de Bilquis Evely por su enérgico trazo y su incansable necesidad de detallados fondos.
Un buen comienzo, quizás un poquito forzado por la editorial, pero del que Gaiman y su equipo de guionistas y dibujantes salen muy bien parados. No puedo esperar para ver que nos tienen preparados.