Especial Action Comics - ¿900 números y esta es tu decisión, Lex?
Y aquí estamos. Novecientos números de Action Comics. Lamentablemente, para mi gusto, este especial no es tan espectacular como los anteriores en la era moderna de Superman, por motivos más relacionados con la editorial que con el trabajo mismo de los autores. Pero no adelantemos nada y vayamos a lo nuestro. Bienvenido al Action Comics #900.
ACTION COMICS #900
Editorial: DC Comics, Inc.
Publicación: Junio 2011
Guion: Varios Autores
Arte: Varios Autores
Tintas: Varios Autores
Color: Varios Autores
Reseña: Oconowoc
El número está dividido en dos partes. La primera es el cierre de la saga “The Black Ring” que Paul Cornell venía construyendo desde varios números atrás y que estaba atada completamente a la continuidad del personaje en esa época. La segunda parte es una serie de historias cortas, firmadas por diferentes autores y que son de variada calidad.
Publicado en junio del 2011, nos encontramos con una época relativamente oscura en DC Comics. En el horizonte se veía nuevamente un “reseteo” en la continuidad y Geoff Johns había quemado ya todos sus cartuchos en Green Lantern. No podemos despreciar el trabajo de Johns, ya que sus guiones cada vez se hacían más grandes y empezaban a tocas a todas las colecciones de DC, sea esto intencional o no. Esto terminaba por opacar cualquier otro personaje que no fuera Green Lantern, y Superman sufre bastante en esta época por ello.
“The Black Ring” es una saga consecuencia de las peripecias de Johns en Green Lantern y muestra la búsqueda de Lex Luthor por el anillo de poder al cual tuvo acceso en el mega-evento Blackest Night. Este camino, de once partes nada menos, lo llevaría a encontrarse con numerosos personajes del Universo DC en un tour bastante interesante. Para mí, los problemas parten cuando esta saga se conecta con el crossover "Reign of Doomsday", donde varios héroes “menores” se venían enfrentando al asesino de Superman.
Y es que a estas alturas del partido no tengo idea cómo los guionistas no renuncian a ese personaje tan unidimensional que es Doomsday. Derechamente es tratado como un arma y me cansa simplemente verlo. Doomsday debió ser un hito en la historia del Hombre de Acero, y lo fue, pero el abuso que hicieron los guionistas terminaron quemando al personaje. Algo que tampoco era muy difícil, dado a su poco desarrollo durante los años.
Lo más interesante de esta parte de la historia es que Lex al fin se ha convertido en una especie de dios, capaz de salvar a la humanidad y sacarla de su sufrimiento. El problema de Lex es que también dispone de la capacidad de terminar con Superman, y tiene que elegir en uno de los dos objetivos: ser el mayor benefactor de la humanidad o convertirse en el asesino de su peor enemigo. Por supuesto, elige lo último, gracias a ese complejo de inferioridad que el personaje lleva cultivando durante años.
El remate final de la historia es bastante entretenido: Luthor trata de quebrar a Superman, afirmando que él no es humano porque no puede sufrir como tal, pero el recordar los momentos más dolorosos en la vida del Último Hijo de Krypton termina por trabajar en contra de villano, demostrando que una de las fortalezas de Superman es poder recuperarse ante cualquier cosa. En el proceso, Luthor aprende varias cosas que le permanecían ocultas respecto a nuestro héroe —incluida su identidad secreta— pero The New 52 al final dijeron que nada de esto valdría la pena. Ademas, el número termina en un “cliffhanger” que continúa en la mencionada "Reign of Doomsday"…
Y ahí no me meto ni a palos.
Las historias cortas que acompañan el grand finale de Cornell tampoco destacan mucho. "Life Support", firmada por el incompetente Damon Lindelof, muestra a Jor-El contratando a un ingeniero kryptoniano para poder acabar de diseñar la nave que sacará a Kal-El del planeta que está condenado. ¿Por qué el ingeniero accede a la petición de Jor-El, en vez de asegurar su propia familia? Son cosas que Lindelof prefiere dejar al lector en vez de desarrollarlas como un buen guionista haría.
"Autobiography" de Paul Dini funciona mejor. Superman se encuentra con Sarva, un ser todopoderoso que comparte muchas cosas en su historia con Superman. Ambos personajes son básicamente dioses que pueden hacer lo que quieran, pero Dini apunta a la humanidad inherente de Superman, la que lo hace triunfar por sobre otros personajes similares.
"Friday Night in the 21st Century" es solo una excusa para tener a Gary Frank dibujando en el número. Muestra la insistencia de Lois Lane para celebrar una fiesta con los amigos de la infancia de Clark, que son, básicamente, la Legion of Super-Heroes. El nombre de Geoff Johns es casi incidental en la historia.
"The Incident" es quizás la más interesante de estas historias. Superman decide intervenir en las protestas llevadas a cabo en Irán entre el 2011 y 2012. Esto termina por crear un incidente internacional que hace que la Casa Blanca trate de definir bien la intensiones de Superman con EE.UU. —a punta de pistola, claro—. Superman responde que el mundo está demasiado interconectado para dedicar sus esfuerzos solo a un país y se declara ciudadano mundial, dejando “plop” al consultor de seguridad nacional con el que se entrevista. La idea de la historia es bastante buena, pero su remate tan torpe le quita un poco de peso. De todas formas, no deja de ser un buen intento de parte de David S. Goyer, un guionista que siento que a veces quiere a actualizar a Superman a costa de matar su esencia.
"Only Human" es la recolección de unos storyboards que tienen la garantía de tener a Richard Donner como productor. En ellos, se muestra la entrevista a un ex-atleta que ahora es la cara visible de una compañía que pretende vender un traje que hará a cualquiera un súper-humano. Naturalmente, la enseñanza aquí es que el poder se gana con esfuerzo y no con métodos artificiales, para tener así un grado de responsabilidad al usarlos. Una historia entretenida sin la necesidad de grandes diálogos. Donner se nota que conoce la fibra de Superman y la aprovecha.
Eso es todo. Action Comics #900 termina siendo no tan bueno como debería, pero hay un par de destellos de grandeza dentro de sus páginas. Ahora estamos con el número #1000 a la vuelta de la esquina y no podemos estar más emocionados. Esperemos que DC Comics esté a la altura de esta celebración. Lo averiguaremos muy pronto.