MR DC 159 - El final de la era del metal y otras historias
Aviso de Spoilers: Las reseñas que siguen a continuación tratan los sucesos más recientes de las series revisadas, por lo que pueden desvelar detalles argumentales importantes para quienes no estén al día. |
Esta semana llegamos a lo esperado por muchos: el final de la saga Dark Nights: Metal. Por supuesto, aquí en MicroReseñas DC, les tenemos listo el repaso al último capítulo de esa locura perpetrada por Scott Snyder. Pero no teman, no hemos descuidados el resto de colecciones. Nos paseamos por una camino tan amplio, que van desde Detective Comics a Doomsday Clock, sin siquiera despeinarnos. Adelante.
DETECTIVE COMICS #977
Publicación: 28/03/2018
Guion: James Tynion IV
Arte: Eddy Barrows, Javier Fernandez
Tintas: Javier Fernandez, Eber Ferreira
Color: John Kalisz
Reseña: Chris
7,5/ 10
Otro nuevo número de Detective Comics y como ya es costumbre, tenemos otro número más que decente. Como ya saben, James Tynion IV es conocido por echar raíces argumentales, que tarde o temprano utilizara para algún nuevo arco. En este arco Ulysses Armstrong, un chico genio que utilizaba Colony como ingeniero y creador de armas, expulsado del grupo por crear armas demasiado peligrosas, para los objetivos del grupo, ahora vuelve a la carga para obtener su preciada venganza. Y utilizara todos los recursos que tenga a mano y si es necesario a Tim Drake, personaje con el que no guarda pocos paralelos. No es que sea un villano muy amenazante, pero encontró la manera de apropiarse de los registros de la computadora del Tim Drake del futuro, lo que conlleva a saber todo lo que ocurrirá en el futuro y todo el armamento que este utilizaba. Lo bueno es que este Robin no es tan difícil de manipular, pero con el sentimiento de culpa que suele atribuirse a los chicos murciélagos, seguramente hará una tontería. Pero tendrá que hacer algo, porque Armstrong ya empieza a mover sus fichas y nada bueno puede salir de algo llamado Brother Eye.
No puedo decir más de este número, sin entrar a spoilers. Todo avanza fluidamente, vemos las consecuencias de los actos que han ocurrido, como el miedo de Tim Drake sobre el futuro, de la salida de Batwoman, la muerte de Clayface y como eso fue la gota que colmo el vaso, en el tema de la confianza que se daba en el grupo y también la confianza depositada en Batman y que además con el tema de Ulysses Armstrong, al parecer queda más que claro, que aquel que viene a asumir misiones altruistas, termina tarde o temprano cagandola de manera permanente. Una crítica bastante directa al concepto de Batman, pero también a aquellas personas que se toman la justicia por la mano, temas que desde siempre ha manejado esta serie y de buena manera. En este punto, James Tynion IV no decepciona y ha sabido darle identidad propia a una serie que pocas veces ha logrado independizarse de la serie hermana del encapotado.
En cuanto al apartado artístico, hay un par de críticas. La primera es que este número tiene 3 dibujantes y lamentablemente se nota demasiado. Los trazos de Javier Fernández (incluyendo el buen uso de la disposición de viñetas, como recurso narrativo), son fácilmente reconocibles y se denota la calidad en ellos, al igual que las páginas dibujadas por Eddy Barrows. Pero también hay un tal, Eber Ferreira, que desluce el conjunto con unas expresiones de los personajes inclasificables y lo peor es que a veces, se cuela en la página siguiente de por ejemplo, Javier Fernández o Eddy Barrows, haciendo difícil mantener la coherencia artística. Me da miedo pensar que esto va a ser tónica habitual, ya que Detective Comics siempre destaco por tener un buen apartado artístico y sería una pena que se cayera en esto.
En conclusión un buen numero que no decae en su ritmo y nos deja con las ganas de saber que ocurrirá en el siguiente, para ver si por fin tendrá algo de paz, el sufrido grupo de murciélagos.
WONDER WOMAN #043
Publicación: 28/03/2018
Guion: James Robinson
Arte: Marco Santucci
Tintas: Marco Santucci
Color: Romulo Fajardo, Jr.
Reseña: Fantasma Rojo
7,0 / 10
Luego de un largo tiempo, Wonder Woman parece estar enmendando su rumbo lentamente. La combinación de Diana y los elementos del Cuarto Mundo en números pasados no lograban cuajar del todo, pero al acercar el foco en los personajes en lugar de preocuparse de la trama, todo empieza a mejorar.
Lo primero que llama la atención es el encuentro entre Wondie y las Furias Lashina y Mad Harriet. A pesar de lo breve de la interacción, es interesante ver los paralelos y discrepancias entre hijas de dos sociedades de mujeres guerreras. Aunque me duela decirlo, en manos más capaces podría haberse aprovechado eso para explorar la relación histórica entre ambos grupos, pero luego de una larga serie de entregas que en el mejor de los casos resultan mediocres es mejor quedarse con lo que se pueda.
En general el número se dedica a fortalecer las caracterizaciones de los personajes al mostrar a un Darkseid intimidante y calmado, a un Steve Trevor dedicado y certero o a un Jason cada vez más arrogante. Aun así se siente que todo este esfuerzo llega un poco tarde y que sigue arrastrando el peso de malas decisiones.
Amazons Attacked con cada número mejora un poco más, pero aun así no hay nada que la vuelva una serie recomendable. El reparto de secundarios se siente muy limitado y aunque la historia hace esfuerzos para entregar un misterio digno, se nota insuficiente. James Robinson ha mascado más de lo que puede tragar con esta serie y recién ahora parece mejorar un poco, pero es más probable que cualquier idea que se tuviera llegue demasiado tarde y diluida como para provocar algún impacto relevante.
JUSTICE LEAGUE OF AMERICA #027
Publicación: 28/03/2018
Guion: Steve Orlando
Arte: Hugo Petrus
Tintas: Hugo Petrus
Color: Hi-Fi
Reseña: Chris
5,0 / 10
Y otra vez a sufrir con un nuevo número de esta Liga. No han pasado ni dos arcos y ya vuelve a sus andanzas aquel enemigo llamado Chronos, el tipo ese que quería destruir al Microverso. Si lo recuerdan, Lobo se ha ido del equipo, una porque pago su deuda con Batman y Steve Orlando se dio cuenta que no encajaba para nada. Ojala algún día, Orlando se dé cuenta que no encaja para nada en grupos de superhéroes y que le iría mejor, guionizar una serie de Lobo, tal como lo hizo con la serie de Midnighter. Pero en fin, al menos tienen a Aztek, que ahora es una mujer. Quizás mas adelante, se vaya alguien más y metan al ángel ese que estuvo en la JLA de Morrison.
Pero en fin, hablemos del número. Bueno tampoco es que haya mucho que hablar, pero lo intentare. Todo empieza con la JLA, recordando lo último que les paso y haciendo reparaciones y agregando cosas, en su guarida que si recordaran, Prometheus y otros mas, irrumpieron y dejaron un lío más o menos grande. Mientras están en esto, irrumpe Chronos con un grupo de personajes que asumimos que son del futuro y comienzan a luchar. Lo típico. Y también es más típico que el grupo se vaya de viaje temporal, a la prehistoria en donde Chronos dice que ya se les adelanto, teniendo de rehén a un misterioso hombre. Y fin. Decirle a esto argumento, debería ser chiste, pero con este método que ya es habitual en el cómic mainstream, de descomprimir las tramas hasta el infinito, no debería sorprendernos. Como ya se está haciendo costumbre en esta serie, las historias no brillan por su originalidad, pero debo asumir que quizás las juzgo con demasiado severidad y es que el principal objetivo de cada comic, es principalmente divertir y este número lo logra en cierta manera y capta algo de interés. Hay que recordar que igual en cierta manera, Steve Orlando es un nostálgico y le gusta recurrir a historias pasadas del grupo o de otros superhéroes (inclusive de otras compañías) y adaptarlos a la actualidad. Aunque en este aspecto, se le puede criticar porque apenas uno lee un par de páginas, ya se sienten añejas. The Terrifics solo con el primer número, aporta originalidad, diversión y nostalgia, que toda la etapa que llevamos de esta Liga. Pero en fin, hasta que no la cancelen tendré que seguir leyéndola. O volverme loco. Lo que pase primero.
En cuanto al apartado artístico de parte de Hugo Petaus para ser buenos, no esta tan mal, pero recuerda poderosamente a Greg Land. Ustedes ya saben, personajes con expresiones sacadas de revistas o fotos, pero a menor calidad. Algunas caras dan miedo, pero…a veces quedan bastante bien y de vez en cuando, sorprende la solidez de los trazos de los que están compuestos los personajes y a veces da terror, lo básico que son los trazos en otras páginas. Es como si el colorista y el entintador se fueran de vacaciones en una página y luego en otra le pusieran todas las ganas. Extraño lo que ocurre con el dibujo, aunque por lo menos la portada alternativa esta maravillosa y perturbadora, de buena manera.
En fin, JLA abre otro arco, al parecer introducirá nuevos conceptos y yo espero no quedarme dormido con lo que Steve Orlando esté planeando.
THE FLASH #043
Publicación: 28/03/2018
Guion: Joshua Williamson
Arte: Carmine Di Giandomenico
Tintas: Carmine Di Giandomenico
Color: Ivan Plascencia
Reseña: Fantasma Rojo
7,5 / 10
Perfect Storm llega a su quinta parte y su ritmo dinámico sorprende en una serie que hasta ahora se sentía un poco confundida en su identidad.
Un lastre que se arrastraba de un tiempo a esta parte era que Barry Allen no era un protagonista adecuado, sino que la mayor parte del tiempo actuaba como un cretino que no entendía su valor más allá sus poderes y afortunadamente eso no es omitido. Barry es confrontado con el hecho que sus palabras y sus acciones eran discrepantes, pero el cómic en lugar de justificarlo o usar el recurso de “estaba siendo manipulado por Grodd”, manifiesta que Flash es susceptible de equivocarse sin que ello implique una visión despectiva respecto de otros. Ha sido largo el trayecto junto a un Barry Allen solitario y ya era buena hora de dejarlo de lado.
A diferencia de entregas anteriores, el balance entre caracterización y dinamismo es excelente. A pesar de que es un número cargado hacia la interacción de personajes, todo transcurre de forma tal que se termina leyendo bastante rápido. Por lo general un número rápido es uno donde la acción es el elemento predominante, pero The Flash #043 maneja un timing impecable que resulta especialmente apreciable en una serie que por su concepto mismo no puede darse el lujo de empantanarse mucho.
El equipo de Joshua Williamson y Carmine Di Giandomenico han hecho cosas interesantes con The Flash, pero el tono reciente que empleaban resultaba innecesariamente negativo, por lo que la vuelta de tuerca respecto de Barry resulta sorpresiva para bien. En las últimas páginas se produce un giro que parece extender innecesariamente la historia, pero resultado de ello hace que la conclusión sea mucho más disfrutable comparado con las tres primeras partes del arco, probablemente porque una organización sin rostro como Black Hole no logra ser tan llamativa como lo es un gorila psíquico.
Cada vez falta menos para Flash War y por suerte esta serie por fin dejó de quemar números antes de llegar a esa historia y logró mostró algo interesante.
MERA: QUEEN OF ATLANTIS #002
Publicación: 28/03/2018
Guion: Dan Abnett
Arte: Lan Medina
Tintas: Richard Friend, Norm Rapmund
Color: Veronica Gandini
Reseña: Fantasma Rojo
7,0 / 10
Mera - Queen of Atlantis ofrece una excelente pieza complementaria respecto de Aquaman, pero paradójicamente no pudo ocurrir en peor momento. Mera es una figura al alza dentro del catálogo de personajes de DC, pero su contexto actual no parece ser el indicado para dedicarle una serie propia.
El concepto de este #002 es bueno y por fin empezamos a ver de forma directa los paralelos entre Mera y Orm, figuras políticas exiliadas que tienen problemas similares, pero que viven situaciones diametralmente opuestas tanto en su relación con Atlantis como en sus vidas familiares. El contrapunto entre ellos es bastante claro y es quizás lo más atractivo del cómic, por lo que resulta especialmente lamentable lo desperdiciadas que se sienten. Cuando ambos personajes interactúan por lo general funciona bien, pero en sus segmentos individuales sigue presente un narrador que poco y nada aporta cuando lo que se necesitaba era conocer los pensamientos de estas figuras, especialmente respecto de Orm que a pesar de ser un personaje complejo, sus conductas resultan un tanto regresivas y por lo mismo no queda del todo claro si ello corresponde a una máscara o si su nueva caracterización es así de simplona.
El otro gran problema de la serie es que Mera no está en su punto más álgido y por lo mismo se ve un tanto limitada respecto de Orm. Incluso si se omitiere la innecesaria escena de pelea, Mera es un personaje que se encuentra lamiendo sus heridas, lo cual no es problemático dentro de Aquaman, pero resultada desafortunado que en su primera mini-serie se encuentre con sus manos atadas a la espalda.
A pesar de mis aprehensiones, este segundo número cumple a cabalidad con ser una pieza más del rompecabezas que Dan Abnett ha armado en los Aqua-comics, llevando una trama que por sus participantes será relevante más temprano que tarde. Lo único que espero es que esta mini-serie no sea solo un spin-off, sino que empiece a demostrar porque Mera es un personaje que merece un especial grado de atención.
THE TERRIFICS #002
Publicación: 28/03/2018
Guion: Jeff Lemire, Ivan Reis
Arte: Ivan Reis, José Luís
Tintas: Vicente Cifuentes, Jordi Tarragona
Color: Marcelo Maiolo
Rotulado: Tom Napolitano
Reseña: Armstrong
6,5 / 10
Tras un debut muy comentado en las redes sociales, The Terrifics continúa con la historia de presentación que pretende sentar las bases para lo que será el núcleo de este inesperado super-equipo de exploradores.
Más allá de las bromas sobre su comparación con Fantastic Four, las diferencias son claras al examinar con un poco más de detención la individualidad de cada personaje; esta disparidad queda bastante clara con la historia de origen que se nos presenta en este número, narrándonos la historia de Linnya Wazzo, la nueva versión de Phantom Girl creada para esta serie. Con una mezcla de los orígenes de Kal-El y Mon-El, Linnya se perfila como una figura con un pasado sumamente trágico, pero que hasta ahora no ha demostrado verse afectada por dicha oscuridad en su forma de desenvolverse. Si esto es una virtud de su personaje — optimismo frente a la adversidad — o solo una bomba de tiempo esperando explotar, estará por verse.
Establecidos los personajes, Jeff Lemire e Ivan Reis— acreditados ambos como storytellers— nos dan más señas de lo que será la aventura propiamente tal al momento de que nuestros protagonistas logran huir del Universo Oscuro: averiguar la naturaleza de la antena que encontraron en dicho universo y averiguar quién es y dónde se encuentra un tal Tom Strong. Para terminar de rizar el riso, Mr. Terrific, haciendo un desplante de su encantadora personalidad, toma la decisión de abandonar la resto del improvisado equipo para estudiar la situación en su laboratorio, cuando recibimos la sorpresa (?) final que nos deja el cliffhanger de la semana.
Pese a que el arte de Reis se desarma un poco con la variedad de entintadores en este número y es reemplazado por José Luís hacia el tramo final, continúa como la principal fortaleza de esta serie, ya que las personalidades de los personajes siguen siendo bastante genéricas. En una serie como esta el mayor atractivo debería ser la interacción entre sus protagonistas por tener experiencias de vida tan dispares, pero hasta ahora Lemire parece cumplir con su máxima de que nunca rinde del todo bien en series grupales. Esperemos que esta sensación se vaya disipando con el correre de los números y podamos ver más de esa prometedora química que solo espera ser aprovechada.
En resumidas cuentas, en The Terrifics nos encontramos ante la materia prima para obtener una serie superheroica con tintes cósmicos y exploradores de primer nivel, pero que por ahora se mantiene buscando un norte hacia el cual apuntar. Siendo esta entrega la segunda parte de tres en el arco inicial ”Meet The Terrifics”, solo nos queda esperar y ver qué ocurre.
MOTHER PANIC: GOTHAM A.D. #001
Publicación: 28/03/2018
Guion: Jody Houser
Arte: Paulina Ganucheau, Ibrahim Moustafa
Tintas: Paulina Ganucheau, Ibrahim Moustafa
Color: Jordan Boyd, Paulina Ganucheau
Reseña: Diego Saenz-Laguna
Lo que a mí me importa está por encima de la gente que controla esta ciudad.
Mother Panic
La nueva numeración de la serie corresponde a una estrategia que ya había iniciado Marvel con su iniciativa Marvel Now! Se relanzaba una colección de vuelta al número uno después de un cambio de creativos o luego de un acontecimiento importante. Imitando el formato televisivo de las temporadas. En este caso el sello Young Animal siguió con esta lógica, renombrando y renumerando sus series. Shade the Changing Girl se convirtió en Shade the Chaging Woman, Cave Carson has an Cybernetic Eye paso a ser Cave Carson has an Interestelar Eye. La temporada dos de la serie que nos convoca vendría siendo Mother Panic: Gotham AD.
Como todo buen número #1 el cómic tiene que tener una premisa que altere drásticamente el statuos quo del personaje. En este caso nuestra heroína, después de la locura que fue el crossover MilkWars, se encuentra en una Gotham City distinta. Es un, suponemos, universo alternativo donde la ciudad es lo opuesto a lo que debería ser. Limpia, segura, hogareña. Un cartel de propaganda de la policía dice: “GCPD, los únicos héroes que necesita Gotham”. El vigilantismo endémico de la ciudad es cosa del pasado. Es ahí donde cobra sentido el AD que se agrega al título. En inglés significa después de cristo (D.C en Hispanoamérica). Estamos en una Gotham después de Batman.
En este nuevo escenario es donde Mother Panic debe desenvolverse en busca de respuestas. Su estilo marcado por el ímpetu de la juventud y la ultra violencia, se verán inútiles en esta nueva realidad en la que se encuentra. Gotham se convirtió en una utopía (o distopía, ya veremos) donde la violencia característica de la ciudad parece eliminada. Además tendremos que ver si su cruzada contra la élite de la ciudad seguirá estando vigente en esta antítesis de la ciudad. Los cambios que deberá realizar nuestra heroína probablemente será el hilo central de esta nueva historia.
En resumidas cuentas, este número establece los nuevos paradigmas que rigen este nuevo universo. Hace sentido que con un cambio de titulo y numeración, el escenario en el que desarrolla la historia debe ser distinta. Supone un nuevo desafió para los personajes, los saca de su zona de confort. Se agradece también que continuaran con la misma guionista Jody Houser, lo que le da un sentido de continuidad a la historia. En el apartado gráfico sigue la rotativa de ilustradores que se van acomodando a cada arco argumental. En Este caso le toca a Ibrahim Moustafa, que esta a la altura del desafío.
Es un perfecto número introductorio, tanto como para lectores actuales de la serie o los que quieran introducirse a partir de este número.
8 / 10
DOOMSDAY CLOCK #004
Publicación: 28/03/2018
Guion: Geoff Johns
Arte: Gary Frank
Tintas: Gary Frank
Color: Brad Anderson
Reseña: Fantasma Rojo
7,5 / 10
Luego de un par de números cargados hacia el desarrollo de trama, Doomsday Clock se toma una pausa para resolver el misterio detrás del nuevo Rorschach. La identidad de este personaje era uno de los grandes misterios de la serie y su resolución no solo alimenta los nexos entre el universo de Watchmen con el DCU, sino que provee nueva información para entender su rol temático como un personaje con legado.
Los puntos más altos de esta serie no ocurren cuando el reparto clásico de personajes de Alan Moore hacen aparición, sino cuando se utiliza el mundo que creó el británico para generar elementos nuevos. Por su mero concepto, el nuevo Rorschach carga una máscara ajena, una identidad que poco tiene que ver con Walter Kovacs, pero representa el potencial que Doomsday Clock posee. Quizás con la excepción del Dr. Manhattan, Rorschach es el personaje más reconocible de Watchmen y por tanto su mera aparición atrae miradas. “¿Se parecerá al original?”, “No es igual, ¿para que se molestaron?” y “Se está explotando un recurso visual conocido para algo que no tiene nada que ver” son comentarios que pueden hacerse tanto de este nuevo personaje como de la serie que lo contiene. Y ello no es casualidad.
Rorschach es parte central de la identidad de Watchmen, por lo que el destino de la obra no puede separarse al de uno de sus más icónicos personajes. Y de cierta forma este nuevo Rorschach es una encarnación de la obra seminal, no solo por su origen, sino por lo que refleja de la misma. Su destino tras el ataque del pulpo gigante es trágico y lleno de estrés post-traumático, compartiendo la misma suerte que suele adjudicársele al género de las capas tras la conclusión de la legendaria serie de doce números, pero a diferencia del enfoque conceptual que suele darse al discutir el final de Watchmen y su conflicto sobre moralidad en un mundo gris, este personaje representa las consecuencias de presentar una ciudad completa como un recurso para abrir un debate conceptual, o lo que es lo mismo, para el personaje bidimensional atrapado en sus páginas (y para el mundo del cómic en general) la famosa secuencia de “lo hice hace 35 minutos atrás” no fue el remate de un plan, sino que el evento que definió sus vidas. ¿Cómo sobrevive un concepto desarmado en vida? En un horror constante del que nunca se repone del todo, sintiendo siempre que falta una pieza. Al ser una obra autoconclusiva, Watchmen se desliga de sus efectos y es eso lo que Doomsday Clock #004 trata de refutar al presentar a personajes tratando de reencontrarse a sí mismos.
Lo que le juega más en contra a esta entrega es que las secuencias fuera de flashback no avanzan mucho la trama y aunque el recurso de narraciones paralelas está bien utilizado, podría haberse logrado el mismo efecto sin estancarse tanto. El esfuerzo narrativo conjunto de Geoff Johns y Gary Frank es digno de apreciar, pero luego del accidentado final de Metal de esta semana cabe preguntarse si este otro proyecto insignia va rumbo a otra conclusión apresurada.
DARK NIGHTS: METAL #006
Publicación: 28/03/2018
Guion: Scott Snyder
Arte: Greg Capullo, Mikel Janin, Alvaro Martinez
Tintas: Raúl Fernández, Jonathan Glapion, Mikel Janin
Color: June Chung, FCO Plascencia
Reseña: Fantasma Rojo
7,0 / 10
Llegó a su fin el primer mega-evento de Rebirth y, tal como ocurrió durante su mayor parte, deja sensaciones encontradas. Dark Nights – Metal es una historia ambiciosa y energética, pero esa misma energía desafiante le termina jugando en contra cuando en su entrega final no logra hacerse cargo de todo lo que propuso a lo largo del evento.
No es ninguna sorpresa ver a Scott Snyder flaqueando con un final y esa quizás la mayor tragedia de este número. El punto comunicacional más importante de Metal fue la presencia de los Dark Knights, los Batman de pesadilla provenientes de universos donde todo salió mal, pero en este #006 en el mejor de los casos resultan ser cameos glorificados y en el peor desaparecen por arte de magia, negando así el buen trabajo de caracterización que se había hecho con cada uno de ellos en el evento. Algo similar ocurre con Barbatos, el dios oscuro que manipuló la carrera de Bruce Wayne para sus propios fines, pero a diferencia de lo que ocurre en el excelente Batman – Lost del mismo Snyder, acá se comporta como un villano cósmico genérico. Lo que ocurre con estos personajes no da cuenta sino de la capacidad de Scott Snyder para desperdiciar el potencial de sus propias historias. Nada ocurre con los personajes de Gotham Resistance ni con la Liga de Primates de Tierra-53 que apareció en el final de Dark Knights Rising - Wild Hunt, tampoco vemos a los Dark Knights teniendo una batalla climática final donde no son un mero adorno ni mucho menos a Bruce Wayne y Hawkman confrontando directamente a Barbatos mientras reclaman sus identidades a nivel ideológico.
La premisa de este evento fue armar una historia masiva en cuanto a su alcance respecto del universo DC y ello ciertamente se logró, pero también resulta claro que al extenderse hacia tantos lugares diferentes afectó para mal su ritmo narrativo con puntos donde se dedica demasiado tiempo (como el epílogo) sin ganancia alguna en ello y otros donde no es suficiente. Es respetable la intención de introducir conceptos nuevos como lo son el rol de los metales o capas nuevas a la cosmología fantástica, ese tipo de ideas absurdamente grandilocuentes son la parte de lo que hace interesante al universo DC, pero no basta con presentar estas ideas cubiertas de una simple capa de pintura, se les debe dedicar tiempo y es ahí donde falla el final de Metal , ofreciendo un cierre simple para una historia cuyos puntos más fuertes radicaron precisamente cuando se daba el tiempo para explorar. Aun así, no todo es malo y hay momentos de brillantez tales como cuando se referencia al Joker sin cara de The New 52 o la forma en que la Justice League salva el día. Cuando Metal se atreve a jugar con los elementos que planteó, funciona.
Scott Snyder no logra romper su maldición sobre su forma de escribir finales, aplastado por los conceptos que él mismo trae a colación, pero en su núcleo este número final de Metal es correcto a pesar de la sombra constante de lo que pudo llegar a ser si se hubiera tenido un número más o si no se hubiera desperdiciado la mitad de Metal #001 con una secuencia que no influyó en nada.