MR Indies 157 - Mechoneo zombie
| Aviso de Spoilers: Las reseñas que siguen a continuación tratan los sucesos más recientes de las series revisadas, por lo que pueden desvelar detalles argumentales importantes para quienes no estén al día. |
Este ha sido un día muy largo, y eso que recién está empezando, así que no me pidas una introducción tan alegre como siempre. Veamos, ¿qué tenemos por acá? Al parecer tenemos la continuación de Judas, un spin-off de la biblia en forma de cómic. Además, en Image, la siempre sangrienta Slots con la siempre sangrienta Deadly Class, y The Walking Dead que sigue maravillando a sus cinco fanáticos. En Valiant, el origen secreto de un personaje que nadie pidió. Disfruten las MR de esta semana, o cómo sea.
BOOM! Studios
JUDAS #004
Publicación: 14/03/2018
Guion: Jeff Loveness
Arte: Jakub Rebelka
Tintas: Jakub Rebelka
Color: Colin Bell
Reseña: Oscar Cayul
10 / 10
Terminó Judas. Fue una historia corta pero con un mensaje claro. Por supuesto ha jugado con varias ideas presentes en las narrativas tradicionales del cristianismo, pero en sus vueltas de tuerca, refuerzan valores clásicamente cristianos. Es muy similar al trabajo que hizo Nikos Kazantzakis en su Cristo Nuevamente Crucificado, y más específicamente, en La Última Tentanción de Cristo: tomar la figura cargada de odio a Judas y redimirla, en consonancia con el mismo mensaje de Cristo.
Lo que Loveness hace aquí (que gran apellido para este fin), es mantener al Judas traidor, pero también el culposo, que llega al infierno luego de su suicidio. En el número anterior descubrimos que en el camino se encuentra no solo con Lucifer, sino con un doliente Jesús, que según la tradición cristiana, desciende a las profundidades en los tres días que se mantiene muerto. Es aquí donde Judas empieza a sospechar que todo estaba escrito, que si traicionó a Jesús, y se suicidó, fue para que le recibiera y ayudara en ese momento. Por supuesto Judas se siente manipulado, por lo que se encuentra en libertad, incluso en el infierno, de tomar una decisión vital.
La verdad es que es un número bello, poético, y lleno de una resignificación de algunos clásicos versículos que por ser tan clásicos, van perdiendo su sentido y requieren ser vueltos a representar. Y no podía haber una mejor forma que en ese ejercicio de talento que derrocha Jakub Rebelka y Colin Bell, de llenar de imágenes y sensaciones a una historia que es tan buena que podría ser cierta. Se cierran 4 números redonditos. Recomendable.
Image Comics
SLOTS #006
Publicación: 14/03/2018
Guion: Dan Panosian
Arte: Dan Panosian
Tintas: Dan Panosian
Color: Dan Panosian
Rotulado: Pat Brosseau
Reseña: Rodrigo Méndez
8 / 10
Nuestro protagonista Stanley Dance no se encuentra en la mejor forma. Justo el día anterior a la gran pelea, fue golpeado hasta el cansancio por el gorila de Les, quien quería asegurar que su apuesta contra el viejo boxeador diera resultados. ¿Podrá el ingenioso Stanley salvar el Piggy Bank de la quiebra? En este capítulo final, nos enteraremos.
Una agradable sorpresa resultó ser el final de esta serie. Termina una historia sencilla, sin muchas pretensiones, pero que está muy bien contada, con recursos visuales en las peleas muy interesantes, que hicieron que la trama nunca se sintiera demasiado lenta. En este caso, para la pelea final, ni siquiera vemos 1 solo golpe, sino más bien las reacciones de todos los personajes secundarios ante la pelea. Es una jugada arriesgada, pero funciona para darle un mayor impacto emotivo al encuentro.
El plan original de Stanley no funciona, pero gracias a una cadena de eventos desafortunados (para Les y Toffman) el casino se salva. Como se nos dice desde el principio de la serie, nuestro protagonista es un bastardo con mucha suerte. Hay un par de escenas que no entendí bien por qué están ahí, como el asunto del revolver enterrado, pero no restan demasiado al conjunto. Me gustó la redención del protagonista, el viaje de una persona que siempre fue toxica para quienes lo rodeaban, hasta el punto donde es capaz de sacrificarse por sus seres queridos. Si se sienten desanimados, les recomiendo leer Slots, un comic pequeño pero con un gran corazón.
DEADLY CLASS #032
Publicación: 14/03/2018
Guion: Rick Remender
Arte: Wes Craig
Tintas: Wes Craig
Color: Jordan Boyd
Rotulado: Rus Wooton
Reseña: Rodrigo Méndez
9,5 / 10
Después del cliffhanger más desgraciado del último tiempo, dejando todo a medias en una tremenda escena de acción, vuelve Deadly Class. No debería sorprendernos, ya que con un par de meses de diferencia, Remender nos hiso la misma jugada en Black Science, pero de momento centrémonos en la historia de los chicos de King’s Dominion. Todos los protagonistas excepto por Saya están enfrentándose a un grupo de Yakuzas enviados por el hermano de ella, todo para acabar con Marcus, la principal debilidad de la japonesa. El más buscado tiene a Viktor y a Brandy Lynn a su alcance, es más ya le clavo un puñal hasta el mango a esta última. Parece que por fin es tiempo de que ambos paguen por todos sus pecados, especialmente por la muerte de Willie.
O no, ya que debido a la marea de Yakuzas sadomasoquistas el trio se verá obligado a cooperar para seguir con vida. Es una idea que se ha visto en muchas películas, pero llevamos tantas aventuras con estos personajes que ver a Viktor y Marcus salvándose mutuamente resulta sumamente interesante, mal que mal son de los mejores asesinos que la escuela de artes letales tiene para ofrecer. Como siempre, las escenas de acción del capítulo son espectaculares, como la bajada por las escaleras, donde se representa el movimiento de los personajes sin el uso de viñetas, algo parecido a lo que hace Mikel Janin frecuentemente en Batman, pero sinceramente a Craig y Boyd les sale mucho mejor.
También los otros protagonistas viven momentos tensos, después de que se separan en parejas, pero el que quiero destacar a Quan y Maria. Dos personas que vienen recién conociéndose, y por lo mismo se complicará todo. Porque al no ser su amiga, la mexicana no se va a creer cualquier historia que el Vietnamita le lance. Y después de que los Yakuzas lo llamaran por su nombre, tiene harto que explicar.
Explosivo regreso de mi serie favorita de Rick Remender. Creo que el equipo creativo está tirando la casa por la ventana y usando sus mejores recursos para este arco, que seguramente va a tener muchas definiciones para los jóvenes protagonistas, especialmente cuando Petra y Marcus puedan conversar a solas.
THE WALKING DEAD #177
Publicación: 07/03/2018
Guion: Robert Kirkman
Arte: Charlie Adlard
Tintas: Stefano Gaudiano
Grises: Cliff Rathburn
Rotulado: Rus Wooton
Reseña: Rodrigo Méndez
8,5 / 10
¡Hola fanáticos de TWD! Disculpen por el atraso con la reseña, pero no piensen que me iba a olvidar de ustedes. Después de un capitulo enfocado en conocer a la líder del Commonwealth, Pamela Milton, y al reencuentro de Michonne con su hija, las cosas comienzan a complicarse. Esto porque por fin conocemos al capitán de los soldados/guardias de esta comunidad. Mercer se muestra como una persona respetada por sus compañeros, pero quién debe tolerar los caprichos del hijo adolescente de Pamela, Sebastian. Este último se comporta como un niño mimado, que cuenta con protección personal 24/7 pero trata al resto de la gente como basura, algo que probablemente aprendió de los líderes del grupo, que se caracteriza por una jerarquía vertical, con clases sociales bien marcadas, definidas por el empleo o los estudios que se tenían antes del apocalipsis.
Este capítulo es bastante contenido, y solo dedicará unas 4 páginas a lo que está sucediendo en Alexandria y Hilltop. En estos momentos lo trascendental ocurre en Ohio, y hay 3 escenas que marcaran la pauta para los futuros episodios. La primera es el picnic entre Sebastian y su novia, donde presenciaremos lo que relaté anteriormente, la segunda, es entre Michonne y Elodie, donde madre e hija descubrirán que a pesar de la distancia vivieron situaciones similares, pero más importante, respondieron de la misma forma. La última es una conversación entre Mercer y otro guardia, donde nos queda claro de que no todos están contentos con la clase dominante de la mancomunidad.
Entretenido capitulo. La acción sigue enfocada en conversaciones y no en hechos, pero es lógico que primero se nos presente los nuevos personajes para que nazca naturalmente el nuevo conflicto. Me gusta el rumbo que ha tomado Kirkman con su historia. A diferencia de la llegada a Alexandria, aquí los nuevos personajes se nos presentan de a poco, cosa que tengamos tiempo de aprender algo de ellos antes de que los maten. Hubo una época que metían tantos personajes nuevos sin mayor personalidad o rasgos distintivos que uno se olvidaba fácilmente quién era quién. Por suerte esto ha mejorado. Esperemos que ya en la segunda parte del volumen las piezas estén colocadas para que empiece el caos.
Valiant Entertainment
SECRET WEAPONS: OWEN'S STORY #001
Publicación: 14/03/2018
Guion: Eric Heisserer
Arte: Raúl Allén, Patricia Martín
Tintas: Patricia Martín
Color: Raúl Allén, Patricia Martín
Rotulado: Patricia Martín
Reseña: Zombi Rodros
7 / 10
El Síndrome de Diógenes toma su nombre del filósofo griego cínico que acostumbraba coleccionar objetos sin valor que usaba en sus oratorias, ahora se le llama así a las personas que no pueden detener su obsesión con la acumulación de basura. Ese parece ser el caso de Valiant, que esta semana publicó un nuevo libro de Eric Heisserer a cargo de los mutan-- de los psiot, los personajes con poderes mentales de la editorial.
El salto, esta vez, es más largo que el de la protagonista anterior Nikki. Ella tiene la habilidad de hablar con los pájaros, mientras que Owen, nuestro actual protagonista, puede materializar objetos desde la nada. No entraré en la discusión de qué tan poderosa puede ser la mente, pero para mi una habilidad que le permita crear ese tipo de objetos es más cercana a la magia que a la ciencia ficción sobre poderes mentales. Sin embargo, acabando el rabeo, se le perdona. En realidad el libro es bastante divertido y dinámico, moviéndote por la historia mientras te entrega pequeños pero importantes detalles que le permiten ser autoconclusiva.
Raúl Allén y Patricia Martín son los siempre favoritos del autor, y esta vez vuelven a cumplir con un gran trabajo en la publicación. Tanto los dibujos como los colores nos hacen sentir que la historia es más familiar de lo que parece, permitiéndonos incluso empatizar con un expresivo Owen.
¿Recomendado? Sí, una pieza divertida en una historia autoconclusiva, pero que poco aporta al universo en el que se aloja.
