Camino a Justice League - "Suicide Squad" (2016)
Supongo que tenía que pasar. Otra vez. Había que darle una segunda mirada a Suicide Squad (2016) en algún momento para ver si algo de aquella película había perdurado en el tiempo. Y lo hice. En versión extendida. Y a pesar de todo el empeño que puse en este segundo visionado, la película escrita y dirigida por David Ayer sigue perteneciendo a la cloaca de donde Killer Crock y compañía trataron de salir y nunca pudieron.
Camino a Justice League:
- Man of Steel
- Batman v Superman: Dawn of Justice. Parte 1
- Batman v Superman: Dawn of Justice. Parte 2
Parte 1: Inicio de confusión
Los acordes de “The House of the Rising Sun” empiezan a sonar y supongo que alguien es un genio en Warner. Un genio de la sutileza, porque al compás de la canción se revela al personaje de Will Smith encarcelado en Belle Reve, institución correccional para criminales intratables, situada en los pantanos de Luisiana. Todo muy sutil desde el minuto cero. También vemos como un sureño paleto encargado de la seguridad abusa de su poder ante Floyd Lawton, el personaje de Smith. Nos queda claro que en Belle Reve, los derechos humanos no existen. Los derechos de autor sí, porque tienen que pagar la licencia de la canción.
Después saltamos a la celda de Harley Quinn y la canción cambia. Todo muy confuso y sin siquiera un patrón a seguir, Quinn está encerrada en lo que es una jaula. Suena “You Don't Own Me" porque Quinn se supone que es la representación de la mujer empoderada en este film. El mismo guardia flirtea con ella y esta le responde. Un flahsback muy en el estilo de un video musical –con múltiples filtros de imagen- nos recuerda que de alguna forma, Quinn y su frágil forma son peligrosos y más vale andar con cuidado.
Salimos de Belle Reve y nos vamos a Washington DC y lo que suena es ahora “Sympathy for the Devil” de los Stones y no la versión de los Guns. De una camioneta negra se baja Amanda Waller y ríe maliciosamente al ver una camiseta negra en señal de luto por Superman. La película nos cree lo suficientemente tontos como para no reconocer que Waller es “mala” y tiene que ponernos el tema de los Stones de fondo. Recién aquí aparecen los créditos. No llevamos ni cuatro minutos de película y no hay nada que me diga que esto es cine. Solo escenas sin conexión entre ellas, editadas para que se vean “bien” y a la moda. Este promete ser todo un vía crucis.
Lo siguiente es más positivo. Dos guardias abren las puertas de un hotel lujo a Waller. Me detengo en estos guardias porque creo que hasta ahora son lo más positivo que he visto. Sus diseños son los de un asesino a sueldo, vestido de forma elegante pero los cinturones y cartucheras de sus pistolas y rifles están por sobre sus bonitos trajes. Son cómicos e irreales.
Dentro del hotel, Waller habla con otros peces gordos sobre su programa Task Force X, presentando nuevamente a todos los integrantes del escuadrón. Nuevamente seguimos el patrón. Una música escogida de forma obvia acompaña cada escena donde aparece un nuevo integrante. Las escenas de Floyd Lawton/Deadshot y Harley Quinn son las que más duran y me hacen preguntar ¿Para qué han puesto las otras escenas en un principio?
Aquí es también donde vemos por primera vez al Joker de Jared Leto. Siéndoles sincero no me molestan los dientes de metal ni el look de pandillero. Creo que es fresco ver de vez en cuando al Joker como un simple criminal, en vez de ese caótico ser que parece inspirar esas páginas de Facebook que escupen filosofía barata. Sí me molestan los excesivos cortes para dar la sensación de caos a la presencia del personaje. Rescato el look de sus secuaces, todos con disfraces de Halloween –incluido un homenaje al Día de la Bestia (1995) de Alex de la Iglesia- disparando sus rifles dentro de Arkham, el sanatorio para los locos.
Dentro de todos los personajes que son introducidos en esta parte, los más perjudicados –aparte del espectador- son los de Rick Flag y Enchantress. La torpeza de la arqueóloga que descubre una muñeca de miles de años es demasiado difícil de tragar. Había diez mil soluciones más creativas para hacer que June Moone fuera poseída por esta bruja y se han decantado por la más tonta. El caso de Flag es más patético, pues tenemos que creernos que es un patriota porque lo dice un texto en la pantalla. ¿En serio? Al menos podemos rescatar algo de todo esto: la intenciones de Waller de crear un grupo de seres con habilidades extraordinarias para usarlos en la seguridad nacional. Sumando a Harley Quinn claro.
La siguiente escena nos muestra a Waller en el Pentágono tratando que apruebe su proyecto del Task Force X. Para ello ha traído a Enchantress a que les haga una demostración en vivo. El miembro más peligroso y difícil de controlar del grupo en medio de todos los líderes militares y políticos de Estados Unidos. Este guion desafía todo lo que ha establecido. Al menos le aprobaron el programa a Waller y podemos continuar.
La siguiente escena no tiene ningún sentido. Waller y Flag van a Belle Reve y ven que todos los miembros del escuadrón están en sus celdas. A lo más se establece que Floyd solo le importa el bienestar de su hija y que el Diablo no quiere usar sus poderes. Ambas cosas no eran necesarias, pues se habían establecido en sus introducciones unos minutos atrás.
Me voy a saltar a lo medular por que la película está llena de escenas que no aportan nada a la trama de la misma. Joker encuentra al guardia que torturaba a Quinn en Belle Reve para que le de información de su novia. Todo es muy de pandilla, así que a mi gusto la escena pasa. Lo que sigue no tanto. Flag y Moone se despiertan en medio de la noche. Enchantress ha manipulado a ambos para liberar a su hermano, atrapado en la otra muñeca que encontró la atarantada científica. ¿Por qué no hay más seguridad con este ente tan poderoso? El guion no lo cree necesario. Lo de engañar a Waller cuando está durmiendo parece sacado de un cuento de niños. En una escena de 2 minutos ya tenemos villano y un hoyo en el cielo. Ni siquiera esperaron al tercer acto para mostrar el apocalipsis… esto es cuando menos “rompedor”.
Parte 2: En el Hoyo del Conejo
Con el desastre de Enchantress, pues Waller llama a funciones al Task Force X. Con otro montaje musical –sí, otro más- vemos como al grupo les inyectan un explosivo en sus cráneos y se preparan para incursionar en Midway City, el lugar donde Enchantress y su hermano están haciendo maldades. Aquí nos presentan a dos miembros más del escuadrón: el Captain Boomerang y Slipknot. El film trata de engañarnos para que quedemos en la duda de cuál de los dos va a morir en la misión. Pero falla. Todos sabemos quién va a morir primero.
Ya en los helicópteros listos para viajar a Midway City, se nos presenta al último miembro del grupo: Katana. Y voy a citar textual a Flag para presentar al personaje:
This is Katana. She's got my back. I would advise not getting killed by her. Her sword traps the souls of its victims.
Esto es de pena. Sobre todo porque Katana y varios más se ven salidos de un cómic. El trabajo de producción en el maquillaje y vestuario es sumamente bueno, con trajes funcionales y llenos de detalles, pero muy cercanos al diseño del cómic original. El de Katana es igual al de los últimos años. Pero Flag la presenta como si se tratara de un personaje que no existe y que se lo está inventando al vuelo. Quinn interviene para tratar de salir del paso en la incómoda situación. Margot Robbie parece que es de las pocas que no está consciente del desastre en que está participando –tanto dentro como fuera de las cámaras- y parece simplemente pasárselo bien haciendo de Harley. Bien por ella.
Ya camino a Midway City, los helicópteros caen pero todos quedan vivos. Caminan a pie, una mezcla entre nuestros “héroes” y un grupo de soldados genéricos que no dicen mucho. Dentro de todo esto, aparece una chispita de los cómics. Boomerang convence a Slipknot para que se traten de fugar. Por supuesto, todo es una trampa del fastidioso personaje y la bomba del maestro escalador explota, dejándole sin cabeza. Esta escena es calcada a los cómics de Ostrander, así que David Ayer tiene poco mérito aquí, además de que el mortal péndulo oscilaba entre Boomerang y Slipknot desde que fueron introducidos minutos atrás. Aun así me río, pero Harley arruina el momento hablando.
El resto de este acto es un cúmulo de escenas de acción al ritmo de música pop y un par de insertos sobre el pasado de Quinn y el Joker. Nada absolutamente bien logrado y todo empobrecido por una edición que a esta altura dan ganas de que nunca hubiera ásido encargada a Trailer Park. Si, por que Suicide Squad está editada por una empresa dedicada a editar trailers, lo que explica perfectamente lo de estilo sobre substancia que impera en la película.
Al final, el acto termina revelando que toda la misión es en realidad una misión de rescate para la mismísima Amanda Waller. ¡Sorpresa! Grita el film. Pero no consigue el efecto. En vez de eso, el espectador se llena de preguntas, pero la historia no brinda ninguna respuesta. El único sentimiento de satisfacción va a llegar cuando esta película termine.
Parte 3: Somos los malos, es lo que hacemos
Con Waller asegurada, es el Joker el que aparece para llevarse a Quinn. Durante todo el film, ambos personajes se han estado comunicando por mensajes de texto, tratando de acrecentar la emoción para cuando ambos se encuentren. Y pasa que todo se llena de balas y explosiones. Quinn se escapa de la forma más acrobática y Lawton, o mejor dicho Deadshot, falla un disparo seguro a pesar de las órdenes y promesas de Waller. Cierto código tiene el asesino a sueldo y los demás parecen aprobarlo.
El film se deshace tan rápido del Joker como del buen gusto por tratar a sus espectadores de forma inteligente. Aquí ya todos y cada uno de los puntos que la historia trata de mostrar han tropezado con otra escena que está ahí para verse cool. Waller trata de huir pero cae, como es de esperarse, en las manos de Enchantress y su hermano, recuperando el corazón de la hechicera, dejándonos igual como al principio de la incursión de este escuadrón suicida. Ayer está más perdido que los excursionistas de la Bruja de Blair.
Nuevamente el escuadrón tratara de salvar a Waller para darse cuenta que todo esto está provocado por la misma Waller y Flag. Deberían descubrir que todo esto es culpa de Warner y sus ejecutivos ansiosos de tener un éxito rápido
Sin la correa al cuello de Waller ni la superioridad moral de Flag atosigándolos, todos los miembros del escuadrón deciden huir, no sin antes compartir un último trago. Aquí se indaga en el pasado del Diablo, el único que ha tratado de no meterse en peleas que no le corresponde, porque teme usar sus poderes debido a una tragedia familiar. En realidad, el film trata de indagar en el pasado de todos y más que nada en su moral, pero es el Diablo el que sale mejor parado de todo esto. Su historia es más fácil de tragar que la del resto, más que nada porque es la única en la que el film se detiene y la ejecuta a un ritmo decente sin los clichés de un videoclip. Al final llega Flag y convence a todos para que lo ayuden por voluntad propia a rescatar a su novia de Enchantress y su hermano.
No voy a relatar como es el final de todo esto, porque es un final que han visto un montón de veces en films tanto de Marvel como de DC. Sí me voy a quejar que, en este punto, la fotografía del film se vuelve aún más oscura y la batalla final entre el escuadrón y Enchantress no se aprecia en nada. Con sombras poco definidas y efectos de luces que marean, nada en la coreografía es rescatable. Lo único que realmente apela a algo es el look final del Diablo, que se ha transformado en un ser de fuego que parece un brujo azteca, dándole cierto grado de orgullo a su origen latino. Los diseños de producción son los únicos que merecen alabanzas en este film.
Todo termina y de vuelta a sus celdas. Todos consiguen un poquito de redención gracias al sacrificio de su libertad pero el mayor beneficiado es Deadshot, que puede estar un tiempo con su hija. Boomerang está encerrado en solitario porque lo merece al ser un capullo irremediable durante todo el film. Belle Reve vuelva a estar llena y la monotonía del encierro vuelve a sus paredes. Todo esto es interrumpido por un equipo de rescate del Joker, que ha venido por Quinn. Aparecen los primeros créditos. Al fin esta tortura ha terminado.
Esperen, en el colmo de su mal gusto, los créditos son interrumpidos por una escena donde Waller y Bruce Wayne hablan. Wayne parece incomodar a Waller pero esta termina de ceder ante las peticiones y le da informes de más humanos con poderes especiales. Un pequeño regalo narrativo para el film Justice League (2017) y así no tengan que perder tiempo en eso. A cambio, claro, el espectador sigue siendo torturado y lo único que quiero es que esto termine.
No les voy a mentir, Suicide Squad me produce rabia. Es un film mal ejecutado de principio a fin. Su historia es como una gelatina que se te cayó al suelo y tratas de recogerla, la edición de la película es incomprensible y la elección de los temas musicales no tiene sentido en la historia en sí. Simplemente son un montón de escenas que están inconexas que no aportan mucho. Y me da rabia porque el concepto de Suicide Squad tiene mucho potencial. Es una mezcla entre Misión Imposible y los Doce del Patíbulo que es más que suficiente para darnos una historia medianamente interesante. Pero Warner se ha decantado en las ganancias rápidas sin cuidar el producto final. Ahí tienen a los verdaderos villanos de la función.
No todo es malo en sí. Los diseños de producción son bastante logrados y coherentes, salvo por los de Enchantress, que es un personaje que no hay por donde tomarlo. El reparto creo que está bien elegido, salvo por Cara Delevingne que simplemente no da ni una bola buena en toda la película. Sí lo hacen Margot Robbie –que parece pasárselo chancho-, Will Smith –que aún tiene cierto carisma- y sorprendentemente la elección de Jai Courtney como Boomerang funciona porque el actor me cae mal y en consecuencia el personaje también. Y Boomerang siempre tiene que caer mal.
Como les digo, la película tenía todo para ser buena, pero el apuro de Warner termino ahogándola en una cloaca de la que ni siquiera Killer Crock puede salir. Aquí no hay ideas clara y está todo desparramado. Y tuve que soportar dos horas para corroborarlo. Necesito un aumento y un buen trago.