MR DC 135 - Enter Ragman
Aviso de Spoilers: Las reseñas que siguen a continuación tratan los sucesos más recientes de las series revisadas, por lo que pueden desvelar detalles argumentales importantes para quienes no estén al día. |
Parece que seguimos en buena racha con DC Comics. En las MicroReseñas de esta semana tenemos un buen números de Detective Comic, otro de Action Comic, el siempre excelente Mister Miracle y muchas cosas mas. Además, tenemos nueva miniserie con el personaje favorito de los niños: Ragman. Pasen, pónganse cómodos y disfruten.
DETECTIVE COMICS #966
Publicación: 11/10/2017
Guion: James Tynion IV
Arte: Eddy Barrows
Tintas: Eber Ferreira
Color: Adriano Lucas
Reseña: Chris
7,5/ 10
Vaya, vaya, James Tynion IV con este arco se está llevando toda mi atención y es que prácticamente, para todo el que extrañaba a Tim Drake como para el que quiere respuestas acerca de todo el entramado de Mr. Oz y el señor azulado que ha dado tanto que hablar, esta es la serie que deben estar leyendo.
Si recuerdan el número anterior, Mr. Oz dejo el extraño lugar donde está confinado Tim Drake, para ir a terminar algunos asuntos, que solo los que están al tanto de Superman, sabrán de qué se trata. Bueno, el tema es que Tim, dando vueltas por allí, desesperado por una manera de salir, se encuentra con Batman, que resulta ser el mismo y bueno, tampoco es que haya mucho tiempo de reaccionar ante ello, porque tenían que enfrentarse a un gran problema en forma de Doomsday.
El numero comienza, con el Batman Tim enfrentándose a Anarky, al cual asesina sin compasión, como si fuera un mero trámite. Naturalmente llega la policía, la cual le dice que no quieren más a Batman y este Batman Tim les dice que se la suda y se va del lugar. Ya en la Batcave se pone a revisar la computadora, momento en el que se supone fue secuestrado por Mr. Oz, aparentemente. Porque en el número anterior se explico que Oz no está relacionado con la creación de dicha prisión, aludiendo a que cierto ente superpoderoso es el responsable y si tomamos en cuenta, que probablemente este Batman Tim algo loquito pueda pertenecer al futuro de otra dimensión, podemos concluir que Mr. Oz también pueda pertenecer a otra dimensión. Una dimensión, algo más oscura. ¿Estará Metal metido en todo el embrollo? Me lo creería, si no fuera porque DC tiene como estampa dejar cabos sueltos, desde que empezaron sus New 52.
Retomando la trama del número otra vez (soy insufrible lo sé), este Batman Tim es tan genial, que logra detener a Doomsday algunos minutos para poder hackear la computadora de la prisión, algo que hace constantemente para buscar sistemas de defensa para detener a la bestia que un día mató a Superman, mientras mantiene una larga conversación con el Tim Drake menos genial, que ya se encuentra algo perturbado con el hecho de que sea Batman y que mas encima use armas, a lo que este Batman Tim le cuenta todo lo que ocurrió con Bruce, Damian, Jason y demases, hechos que lo llevaron a tomar la capa de Batman y volverse un pirado. Así que apenas logra con ayuda de Tim, viajar a su tiempo, se lo quita encima, sin matarlo y se va a buscar a cierta persona para sacársela de encima. Y le toca a nuestro querido Tim, detenerse a sí mismo.
Que más le puedo decir, perdonen por los spoilers, pero es difícil pasar por encima, ciertos detalles que a mi gusto, hacen que la historia que se está contando, sea muy interesante y divertida, aunque se use el ya gastado argumento del futuro sombrío y oscuro, que ha hecho que los que eran buenos antes, pierdan la cabeza un poco (véase el arco actual de Justice League), pero al enfocarse en un personaje como Tim Drake hace que todo sea interesante, porque por un lado, hace mucho no sabíamos de él y por otro, que realmente se han esforzado por profundizar en un Robin prácticamente despreciado por la editorial, cuando años atrás, se había ganado un respetable lugar. Así que para los que sean fans del personaje, échenle un vistazo a este arco y a los que no, de todas maneras acérquense, porque pese a que si no hay ningún giro interesante, lo que se viene es una historia típica, pero bien hecha y bastante divertida, acompañado de un arte más que correcto del buen Eddy Barrows, que esta alucinante en esta entrega, tanto en fondos, como expresiones, disposición de viñetas, conllevando a que sea un gusto leer la historia planteada.
Concluyendo, no puedo esperar por el próximo número, la historia me tiene bien enganchado, así que espero que sorpresa nos deparen y mas con cierto rumor que anda dando vueltas por allí, del regreso de cierto personaje que los New 52 olvido…
ACTION COMICS #989
Publicación: 11/10/2017
Guion: Dan Jurgens
Arte: Viktor Bogdanovic
Tintas: Viktor Bogdanovic, John Trevor Scott
Color: Michael Spicer
Reseña: Oscar Cayul Aedo
8 / 10
Lo que ha pasado poco y casi nunca desde Rebirth es que Action Comics esté mucho mejor que la serie hermana Superman, pero aquí está, en una historia sorprendentemente entretenida, motivante y curiosa, en lo que ha sido un maravilloso golpe de oficio comiquero por parte del veterano Dan Jurgens. Quien diría que llevo más de 20 años leyendo historias de este autor, y me alegra positivamente ver que todavía lo logra, que sabe cautivar y encantar.
Superman deja de perder tiempo con Mr. Oz y se dedica a hacer lo que mejor sabe, ayudar al desprotegido. Sin embargo, no puede estar en todos los lugares a la vez, y un atentado terrorista por fanáticos (!?) de Oz amenaza al Daily Planet, con Lois Lane haciéndose cargo de la situación. La oportunidad nos permite la posibilidad de que Jonathan conozca a su abuelo y nos deje de lleno a la parte final de la historia, con ganas de seguir leyendo.
Gran parte de estas ganas de seguir leyendo la transmite lo vivo del equipo artístico. Aunque no me gustan los rostros que Bogdanovic nos entrega, si valoro su expresividad y los enfoques que remarcan la acción. El color de Spicer sigue haciendo de este un cómic vistoso.
Esperemos que el cierre sea así de satisfactorio, y que además responda la pregunta más importante, ¿Steve Lombardi está bien?
WONDER WOMAN #032
Publicación: 11/10/2017
Guion: James Robinson
Arte: Sergio Fernandez Davila
Tintas: Scott Hanna, Mark Morales
Color: Romulo Fajardo, Jr.
Reseña: Fantasma Rojo
6,5 / 10
Luego de un bastante sorpresivo primer número de James Robinson en éste título, nos encontramos con un número mucho menos frenético, pero que a pasos agigantados cubre el terreno que se encontraba pendiente, porque puntos argumentales que en otras circunstancias podrían haberse estirado bastante, se resuelven rápidamente, o de forma más clara, Wonder Woman ya sabe que está lidiando con Grail y Darkseid, además que el misterio de su hermano perdido no es un misterio muy profundo.
El inicio de este número está cargado a la acción y parece ser más que nada una maniobra para introducir oficialmente a los Oddfellows (los compañeros de armas de Steve Trevor) al título. Es agradable ver como se empieza a gestionar un reparto de secundarios alrededor de la amazona, porque Steve Trevor y Etta Candy se hacían muy pocos luego de que Greg Rucka hiciera borrón y cuenta nueva, aunque espero que en próximos números se empiece a diversificar dicho reparto que hasta ahora es mayormente masculino.
La otra parte del número es más calmada y parece tener dos facetas. Por un lado hay una clara intención de pasar rápidamente por todas las exigencias de continuidad que son un requisito ineludible de esta historia, haciéndose mención al pasado de Steve Trevor con A.R.G.U.S. o como Diana ya se había topado con el siempre jocoso bebé Darkseid durante Metal. Esta es quizás la parte menos interesante del relato, pero tiene su cuota de utilidad al ayudar a calibrar una tormentosa continuidad reciente de Wonder Woman, situación que la amazona misma reconoce. Por otro lado, la exploración del que era hasta ahora un difuso vínculo entre Diana y Hércules es mucho más interesante. La figura del héroe griego tiene una connotación en la cultura amazona bastante diferente a la tradicional y Diana no se muestra ajena a ello, pero no deja que nuble completamente su capacidad para hacerse su propia opinión y el tratamiento de esto es sorpresivamente emocional, con una singular nostalgia que se transforma en piedad cuando Diana conoce los haberes de su legendario pariente. Acá siento que hay una oportunidad desperdiciada porque uno de los puntos más interesantes de los primeros números de la etapa reciente de Greg Rucka fue la forma en que reflejó la misoginia como un elemento frecuente en figuras divinas y este Hercules mucho más calmado y reflexivo podría haber aportado una visión distinta. Es una lástima que solo póstumamente podamos ver a Diana entender y confrontar a una figura que podría haber servido más que como carne de cañón.
Este número no es malo, pero luego de su estrambótico número de apertura se siente un tanto pequeño, aunque no decepcionante. La velocidad con que avanza la trama me genera reacciones mixtas, por un lado se siente que la espera no vale la pena y por el otro falta cada vez menos para ver que puede hacer James Robinson estando libre de una mochila argumental heredada.
JUSTICE LEAGUE OF AMERICA #016
Publicación: 11/10/2017
Guion: Steve Orlando
Arte: Felipe Watanabe
Tintas: Ruy Jose
Color: Marcelo Maiolo
Reseña: Chris
5,0 / 10
Seguimos con el arco de Ray Palmer y se nos sigue explicando que ocurrió con la llegada de este al Microverso y su enemista con Aron Aut. Si recuerdan el número anterior, Palmer había hecho contacto con Aut para ver el problema que estaba poniendo en peligro el Microverso, donde dejan muy claro que el tipejo este, algo se traía entre manos. Bueno, el tema es que logran llegar al centro del problema, el punto de ignición, lugar donde Aron Aut revela la verdadera naturaleza de sus intenciones, que no son más que acelerar el proceso que está llevando a la destrucción del Microverso, con la idea de hacer un suicidio masivo, para así terminar con todas las cosas malas que pasan y bla bla bla, y que ojala que el nuevo mundo que se venga, sea mejor que el actual. Vamos, todo un filósofo este tipejo, que se hace llamar Null. Un nombre que aparte de falta de inspiración, ya lo tienen otros dos personajes del universo DC, que poco o nada tienen que ver con Ray Palmer. En fin, sigamos con la historia que me pierdo.
Naturalmente, este “Null” que se saca una armadura toda chula de la nada, aprisiona de alguna manera a Atom, pero este ni tonto, ni perezoso, se saca un plan del bolsillo y logra escapar, dándole una paliza y dejándolo tirado por algún lugar extraño del Microverso, para que se muera del asco (todo un encanto este Ray Palmer). Hubiera terminado todo allí, pero ya sabemos que la Justice League fue engañada por el tipo (y a Batman, algo super RARO, porque él es infancia y nadie lo engaña) y bueno, el tipo va a hacer algo, pero antes de que ocurra cualquier cosa, el numero ya se ha terminado, teniendo que esperar hasta el próximo número para saber que le ocurrió al perro de Null, para que se ponga tan determinista con sus ideas.
Creo que ya saben cuál es mi problema con este número. Porque me JODE mucho que alarguen tanto una historia. Y te creo si fuera una historia super épica que viene a reformular la manera en que vemos la vida, los personajes o lo que sea que nos estén contando, pero hasta ahora el argumento que ha planteado Steve Orlando es divertido sin más y no necesita muchas vueltas para que se expanda tanto en caracterizar personajes, que no lo necesitan. ¿A quién rayos le importa Null? Sé que suelo criticar bastante el hecho, de que hay series de grupos que no aportan nada a los personajes y esas cosas, pero está más que claro que en la narrativa de una historia, para que esta mantenga el interés del lector, debe saber ahorrar recursos, para evitar que muera de aburrimiento, algo que no ha hecho Orlando hasta ahora. Prácticamente en estos dos últimos números, se dio una paja bastante larga de explicar que ocurrió con Ray Palmer y su enemistad con “Null”, algo que pudo haber sido explicado en la mitad del número anterior, pero no, usas dos números COMPLETOS, sin avanzar nada en la trama actual. Vamos que ya me da miedo, ver que el próximo número se ponen a explicar y revelar más cosas del pasado y la Justice League siga estando tirada en el suelo, esperando a que Orlando la use para algo más que escuchar la triste historia del villano, que nadie pidió, pero que jode porque si. La única explicación que le encuentro a esto, es que al ser una historia que no tiene mucho que contar, pero que si o si ira a un tomo, de alguna manera hay que justificar el precio del tomo por las páginas que lleva, por lo que toca rellenar. O es que Orlando tiene graves problemas a la hora de afrontar esta serie. O la opción más valida: la serie no tiene razón de existir, más que mero relleno. Qué bien se siente, rociar bilis virtual, pero me he quedado a gusto. Porque de verdad, me hubiera gustado que esta serie tuviera algo que la diferenciara de los otros grupos y de la otra Justice League, pero es la típica serie genérica que solo está para hacer bulto en las tiendas, con personajes más o menos interesantes, pero que en la serie son 0 aporte. Y eso que tienen a Lobo y a Batman. Hay que hacerlo muy mal, para no aprovechar esos personajes. La única manera de levantar la serie, es cambiar un poco el elenco o cambiar al guionista o que se yo.
Del arte, seguimos con Felipe Watanabe, que se aburrió de dibujar relleno y como es de esperar, el bajón gráfico se nota bastante, pero es competente, con trazos limpios, buenas expresiones y el coloreado sigue siendo tan efectivo como en números anteriores. Al menos en este aspecto no falla y es que la serie en pocas ocasiones ha fallado en el aspecto artístico.
En fin, esperemos a ver que pasara en el próximo número y es que si no se acuerdan, Vixen está metido en algo y quizás eso alargue la trama actual, así que nos toca aguantar un poco mas de esta odisea en el Microverso que irónicamente se está haciendo más grande de lo que debería…
MISTER MIRACLE #003
Publicación: 11/10/2017
Guion: Tom King
Arte: Mitch Gerads
Reseña: Zombi Rodros
9 / 10
El bueno de Tom King y el talentoso de Mitch Gerads siguen dando de hablar con un cómic bien cuidado que podría ser, fácilmente, lo mejor que ha publicado DC este año. Un gran acierto para una editorial que está cosechando victorias a través de fórmulas caladas. Mister Miracle se siente como un continuo y fresco trabajo experimental que busca expandir, un poco más, lo que se puede hacer bajo el alero de historias superheróicas.
El escritor se toma bastantes libertades con los personajes, hasta el punto de tensar las estructuras que suelen definirlos. ¿Podemos confiar en un Orion que tomó el manto de su padre? ¿Podemos confiar en Lightray quién vaporiza a Forager por buscar una salida a la muerte de tantos insectos en la guerra de Orion? Los personajes de esta historia son, y a la vez no son quienes estamos acostumbrados a ver en las páginas de tantos libros de DC. Sólo Scott es Scott, mientras nos bombardean con la incesante frase de que, al menos, Darkseid es.
Tanto en el guion que se nos presenta, como en el arte, existen referencias veladas a la guerra y a la crueldad, a la falta de fe y la desesperación. Es notable como Scott, ante la muerte de Forager sólo puede decir "Jesús", nombrando a un dios terreno en vez de alguna expresión más propia del Fourth World. Luego de eso, va a dormir como si nada junto a Big Barda y se cuestiona, así también nos hace cuestionarnos a nosotros, qué significa la famosa frase Darkseid es. Esta insensibilidad o negación de la existencia de la crueldad también es usada por Gerads en el apartado gráfico. Podemos ver como las escenas más sangrientas del cómic son matizadas por un efecto, como una televisión mal sintonizada. ¿Acaso eso hacemos con la guerra, la obviamos, la anulamos, no la sintonizamos?
Este juego ya ha sido utilizado antes. Como dije, en los momentos de mayor gore, pero también cuando la tensión está en las nubes. Orion comparte una escena con Scott Free que amerita el uso de este filtro sintonizado, que acompaña además el final del capítulo y una extraña, pero reiterada mención, a Dr. Bedlam, uno de los aliados de Darkseid.
Un gran cómic, que como toda gran historieta, nos deja con más interrogantes que certezas.
DAKR NIGHTS: METAL #003
Publicación: 11/10/2017
Guion: Scott Snyder
Arte: Greg Capullo
Tintas: Jonathan Glapion
Color: FCO Plascencia
Reseña: Fantasma Rojo
7,5 / 10
Si hay algo que admitir es que las primeras impresiones de este evento no fueron las mejores, pero rápidamente ha ido escalando en cuanto a intensidad. Al pan, pan y al vino, vino: acá no van a encontrar una obra culmine del noveno arte, no es un cómic que los va a hacer cuestionarse a sí mismos o al género de las capas, pero lo que si van a encontrar es una aventura con todas las de la ley.
Me sorprende el nivel de detalle que se puede encontrar a lo largo del número, no todos los días el famoso “nanana Batman” termina siendo una parte importante de la trama. De manera similar y luego de haberle hecho el quite como a la peste durante años, por fin vemos a Scott Snyder escribiendo a Damian Wayne y el resultado es bastante aceptable. Robin mantiene su voz independiente y caprichosa, pero sin convertirse en una parodia de sí mismo y manteniendo un adecuado nivel de vulnerabilidad, lo cual no hace sino complementar un manejo bastante decente del reparto de personaje que estamos viendo, en especial Superman.
Aunque no soy fan de la forma en que Snyder abusó en su estadía en Batman del recurso de destruir toda una ciudad para que sus historias se sintieran “importantes”, esta es la primera vez que me parece justificado. Metal en la forma que la vemos durante este número es el cumplimiento de la historia que se nos prometió: una extravaganza cósmica. De forma bastante sutil tenemos a Barbatos sometiendo a Superman a la sanción Omega tal como se introdujo en Seven Soldiers of Victory, también tenemos a Superman, Flash y Steel haciendo uso de súper-ciencia que solo tiene sentido porque las convenciones del género lo hacen aceptable, tenemos a Mr. Terrific decodificando códigos a través de una muy sutil broma obscena de Plastic Man, en definitiva tenemos un cómic que es consciente de lo absurdo que es y lo muestra con orgullo.
Toda la maquinaría publicitaria de DC daba a entender que este sería el típico evento donde Batman sería el caballito de batalla, pero en Metal #3 nos damos cuenta que eso fue un engaño, una hábil treta para meternos de lleno en una historia que pretende recorrer todos los rincones del universo DC usando al murciélago como carnada. Para que quede más claro, si usted amigo lector llega a esta historia esperando cambios radicales de continuidad o consecuencias cataclísmicas, va a salir decepcionado porque a pensar de las tonadas multiversales de la serie, en su espíritu la serie no pretende ser una Crisis no-oficial, sino que está más cerca de un evento como Invasion, donde lo que importa es el espectáculo en sí mismo. Al menos ya es mejor que Convergence y eso en mi libro es un triunfo.
SUPERGIRL #014
Publicación: 11/10/2017
Guion: Steve Orlando
Arte: Jose Luis
Tintas: Norm Rapmund
Color: Michael Atiyeh
Reseña: Fantasma Rojo
7,0 / 10
El desarrollo de esta serie ha sido tormentoso, pero desde hace un par de números parece haber recobrado su rumbo. En esa misma senda nos encontramos con un inesperado crossover con New Super-Man que no hace sino recanalizar la renovada energía que se ha venido viendo en tiempos recientes.
Kara Zor-El tiene un problema de contención de poderes, pero donde la ciencia no tuvo la respuesta, las enseñanzas místicas de I-Ching parecen abrir una puerta. Uno de los elementos más interesantes de la serie ambientada en China es la forma en que reinterpreta ideas propias de esa cultura y las hace análogas a conceptos de ficción como lo es la S de la casa de El, aprovechando una interesante coincidencia. Aunque no se trata con la misma profundidad que en su título de origen, la presencia de estos personajes imbuyen a esta historia de un enfoque místico que resulta especialmente interesante de leer dada la crianza altamente científica de Kara. No esperen ver a Supergirl pintando mandalas, pero el que se adopte conceptos más esotéricos a su visión de mundo no hace sino darle una nueva dimensión al personaje.
El otro grueso de la historia radica en cómo la mera idea de poder no es la solución a todos los problemas. Esta parte de la historia está ambientada en Mongolia y tiene la presencia de un Rocket Red. Luego de haber pasado tanto tiempo durante New 52 aguantando a una Kara perenemente enojada, es un gusto ver una forma distinta de abordar los conflictos.
Aunque Supergirl no logra tocar con la misma pasión algunos conceptos que sus series hermanas han manejado mejor, lo hace de forma consistente y eso ayuda en el renovado proceso que se está llevando en este título.
THE FLASH #032
Publicación: 11/10/2017
Guion: Joshua Williamson
Arte: Christian Duce, Howard Porter
Tintas: Christian Duce, Howard Porter
Color: Hi-Fi
Reseña: Fantasma Rojo
7,0 / 10
A lo largo de 33 números hemos visto como Joshua Williamson nos ha presentado diversas facetas del mundo de The Flash, con éxito variable, pero no es sino hasta hoy que podemos apreciar como todos esos elementos forman un telar armónico.
Welcome to Iron Heights sin ser un número especialmente llamativo, es una excelente carta de presentación de toda la etapa Rebirth de este título. Los arcos argumentales han tendido a ser autoconclusivos, pero es aquí donde se pueden sentir las consecuencias. Godspeed y los Rogues se encuentran en el recinto penitenciario, Barry y el Wally más joven empiezan de a poco a parchar su relación y el cliffhanger marca el regreso de un personaje que parecía olvidado, todo gira alrededor de la idea que las distintas historias no son ideas separadas, sino que hay un mundo alrededor de Barry Allen y quizás la joya más llamativa es el recinto penitenciario Iron Heights. La forma en que la cárcel es presentada en este número no solo nos lleva a una locación importante del universo DC, sino que dota de una relevante cuota de personalidad al título. Iron Heights no es el Asilo Arkham, pero se le trata con tanta reverencia que podría llegar a ser tan icónica como el sanatorio de Gotham si se le dedica el suficiente tiempo, o al menos eso es la impresión que me da al leer The Flash #32.
Lamentablemente habrá que esperar para ver los frutos de una historia que parece haber sido preparada durante 23 números ya que el próximo número es un tie-in a Metal, pero al menos el futuro se ve prometedor.
RAGMAN #001
Publicación: 11/10/2017
Guion: Ray Fawkes
Arte: Inaki Miranda
Tintas: Inaki Miranda
Color: Eva de la Cruz
Reseña: Oconowoc
7,5 / 10
Quizás a los más jóvenes, el nombre de Ragman no les suene mucho, pero a los que ya tenemos nuestros añitos a cuestas, Ragman no nos es tan desconocido. El personaje creado por Robert Kanigher y Joe Kubert en los setentas ha pululado por las líneas editoriales de DC de forma relativamente constante. La última vez que recuerdo haberlo visto en plena forma fue en la subvalorada serie Shadowpact, colección mística creada después de los hechos acontecidos en Infinite Crisis.
Esta nueva serie, presenta un nuevo comienzo para el personaje. El escritor Ray Fawkes sabe que los ecos de la guerra de Vietnam ya están muy apagados –y que era parte del origen del personaje en los setentas- y salta a los conflictos en medio oriente, concretamente en Israel, donde se desarrolla el principio de la historia. Si elude cualquier nudo que aluda a la guerra de Estados Unidos contra el terrorismo en la región y simplemente nos presenta a un grupo de soldados que descubren una especie de tumba ancestral, muy al estilo de la ultima película de Tom Cruise y la Momia.
El grupo es atacado por una fuerza desconocida y solo Rory Reagan sobrevive al ataque. De estos hechos saltamos a Gotham, donde Reagan trata de sobrevivir, enfrentando el trauma de su estancia en el medio oriente y combatiendo las lagunas mentales que no lo dejan vivir una vida normal. Lo que descubrimos en las páginas del cómic es que Reagan no tienen lagunas mentales, simplemente es que una entidad se apodera de su cuerpo, dándole un aspecto similar al cruce de Spider-man con la Momia. Lleno de harapos, dientes filosos y tiras, transformado ahora en Ragman, se enfrenta a los que parecen ser las fuerzas místicas que atacaron a Reagan en Israel.
Si bien el guion no presenta nada fuera de lo común, es el dibujo de Iñaki Miranda el que hace bastante disfrutable este primer número. Su composición de página es bastante clara y su dominio de la forma humana hace que el guion de Fawkes se sienta mucho más aterrizado de lo que es. El realismo prima en varias páginas del cómic, pero cuando se requiere, el dibujante desata su imaginación con un par de buenas páginas dobles. Las tintas están bastante bien a pesar que se nota cierto aire digital que a mí en lo personal me saca de la inmersión.
Para ser un primer número, no ha estado tan mal. Ragman es promocionada como miniserie de seis números y quizás sea por eso que no tenga la atención que debería. Ya de por si el personaje es medio oscuro y la falta de publicidad hará que merme sus ventas. Aun así es cómic es interesante y puede que haya una segunda reseña de la miniserie en esta sección. Ya veremos.