"Mister Miracle" (1971) de Jack Kirby: el Rey de corazones
Llegamos a lo que es, por mucho, la creación más querida de Jack Kirby en DC Comics. Insuflada en gran medida por los amores del Rey, Mister Miracle fue la colección que más duró en este experimento que fue The Fourth World y se nota que el Rey de los Cómics se encariñó con ella en su justa medida.
Kirby y amigos
A pesar de la gran calidad de las colecciones creadas por Jack Kirby en los setenta, estas no calaron mucho en el público de la época. El mundo del cómic pedía otro tipo de aproximaciones, series más centradas en el superhéroe y no tanto en la ciencia ficción y, lamentablemente, las creaciones de Kirby sufrieron por esta tendencia. Si vemos los números, la inclinación es patente: Superman’s Pal Jimmy Olsen duró quince números con el veterano autor a cargo, mientras que Forever People llego a los once números al igual que New Gods; la cabecera más longeva del conjunto fue Mister Miracle, con dieciocho números.
La tendencia era clara para los ojos del Rey: al público norteamericano le gustaban los superhéroes, y tener a Superman le había ayudado a prolongar su estancia en las aventuras de Jimmy Olsen. Kirby abordaría bajo este prisma las correrías de Mister Miracle para darle a sus fans lo que estaban pidiendo desde su llegada a DC Comics: aventuras superheroicas.
Mister Miracle nace de la inspiración de uno de los amigos más entrañable que el veterano de guerra tuvo cuando trabajó en Marvel Comics. Me refiero a su colega Jim Steranko, quien había probado suerte siendo escapista antes de volverse artista de la Casa de las Ideas y darnos un poco de su psicodélico arte en la colección del superagente Nick Fury. En aquella época, Kirby era la imagen a la que se asociaba cada cómic de la editorial, y Stan Lee pedía a todos que siguieran el estilo de Kirby. Cuando Steranko partió en Nick Fury: Agent of S.H.I.E.L.D., lo hizo como todos: siendo ayudante de Kirby. La personalidad del escapista caló hondo en el Rey, dejando que él se encargara sólo de la colección a los pocos números, dotando las páginas de Nick Fury de una fuerza única, similar a la de su maestro, pero completamente diferente en estilo. El carácter inquieto de ambos autores no deja de ser otro motivo para entablar tan buena amistad; mal que mal, Steranko antes de convertirse en autor de cómics fue boxeador amateur, esgrimista, gimnasta, faquir, artista en fugas, músico, pandillero, ladrón de autos y un largo etcétera.
De ahí es que Mister Miracle sea un personaje donde su principal habilidad sea el escapismo. No tiene súper fuerza ni súper resistencia. Vuela gracias a la ayuda de artilugios fantásticos, y si lo comparamos a otros Nuevos Dioses, pues es bastante débil. La idea de Kirby era darle sensación de peligro a la colección, que el lector de verdad se sintiera atraído hacia un personaje que se veía envuelto en las más extrañas tramas y trampas. Detrás de la máscara de Mister Miracle está Scott Free, uno de los nietos más avanzados que fue entrenado en el orfanato de Granny Goodness, la encargada de las tropas de Darkseid. Scott se había revelado ante la opresión del régimen de Darkseid, escapando a la Tierra con ayuda de Big Barda, la líder de las llamadas Female Furies.
Scott Free conoce en la Tierra a Thaddeus Brown, un escapista que lo adopta como aprendiz al ver las habilidades tan particulares de Scott, quien adopta el personaje de Mister Miracle de Brown cuando éste muere asesinado por un ataque de la mafia. En esta situación, Scott hereda la fama de escapista de Brown, y su ayudante Oberon, un particular enano con el que entabla amistad casi inmediatamente. Pero el pasado del que Scott está escapando lo persigue en cada esquina, y lo meterá en varias situaciones peligrosas.
Truco de magia en tres partes
Las aventuras de Mister Miracle en su andadura de 18 números pueden dividirse según sus tópicos en tres secciones. Los primeros números están centrados en historias autoconclusivas, a veces de una o dos partes, donde Scott, Big Barda —que debutó en el número #004— y Oberon son conducidos hacia la trama de algún villano de turno. Estos villanos varían entre mafiosos o uno que otro rezagado de Apokolips que quiere que Scott vuelva al orfanato de Granny Goodness. Mención especial merece la aparición de Funky Flashman y su ayudante Houseroy, versiones en clave parodia de Stan Lee y Roy Thomas quienes tratan de robar los secretos de Mister Miracle, pero son demasiado torpes para conseguirlo. En estos números también aparece el Doctor Bedlam, personaje que logra encerrar a Scott dentro de un edificio lleno de gente deseosa de matarlo gracias a su píldora de la paranoia. Sí, Kirby inventó Die Hard, The Raid y Dredd 3D sin siquiera esforzarse mucho.
La segunda parte de esta colección podría enmarcarse en una saga un poco más larga, donde los continuos ataques de Granny Goodness terminan por obligar a Scott y Barda a volver a Apokolips y pelear por su independencia absoluta. Aquí, el siempre creativo autor nos muestra en todo su esplendor cómo operan las huestes de Darkseid, dándonos un acercamiento de lujo a este terrible mundo industrializado hasta su último rincón. Kirby saca una galería de villanos muy nutrida, que van desde Kanto el mercenario, pasando por Virman Vundabar, Bernadeth y varios más, dándonos un espectro completo de Apokolips y sus divisiones jerárquicas. Mención aparte para Himon, personaje que ayuda a Scott a escapar en un principio y que es responsable de la creación de los artilugios más importantes de toda esta mitología: las Mother Boxes.
La tercera etapa de esta colección es una especie de vuelta a los orígenes, pero con mayor números de secundarios. Kirby introduce al hijo de Thaddeus Brown, Ted, quien se convertirá en el representante del show de Mister Miracle. Además, de la saga anterior heredarán la presencia de las Female Furies como ayudantes —comandadas por Barda— y Scott adoptará como discípulo a Shilo Norman, un huérfano al que ayudó a resolver el asesinato de su hermano. Esta etapa es rica en desarrollo de personajes, donde se ve el creciente amor entre Barda y Scott y la humanización de ambos ante la presencia de Shilo. Creo que la aproximación del Rey en Mister Miracle es la de una persona que ha escapado a su destino y se ha convertido en alguien completamente nuevo, formando amigos y familia en el proceso.
El dibujo de esta colección es mucho más recatado que el resto. Kirby sigue usando de 5 a 6 viñetas por páginas, pero reduce el número de páginas dobles comparadas con las otras colecciones de The Fourth World. Sus diseños siguen siendo sumamente buenos, sobre todo los de las creaciones de Apokolips, siempre justificándose en cada uno de ellos, como es en el caso de Kanto. Big Barda también destaca tanto por su dibujo —físicamente, es el personaje más potente de toda la colección— como la personalidad que le da el autor a su creación. Vince Colletta y Mike Royer continúan como los entintadores oficiales de esta etapa del Rey, dejando un acabado muy prístino en sus páginas. Mister Miracle, a pesar de ser algo distinta a sus series hermanas, aún conserva la espectacularidad de Jack Kirby, dándole un sentido de unión con las otras colecciones.
Pensamientos finales
Mister Miracle fue la despedida parcial de Kirby a la mitología que creó en los setentas para DC Comics. Se nota que hay más corazón en esta colección, tanto en su inspiración —se dice que Barda está inspirada en la esposa de Kirby y su relación con ella— como en su tratamiento general. Quizás no tenga ese lenguaje portentoso de New Gods, o la experimentación de Forever People, o la innovación de Jimmy Olsen, pero en Mister Miracle hay corazón y tripas. Y el corazón de un Rey vale mucho. Como el mismo Kirby firmada a veces: Kirby's the name and comics is my game. Y él era el Rey del juego.