MR - "Secret Empire" #002: welcome to the Red Room
Aviso de Spoilers: Las reseñas que siguen a continuación tratan los sucesos más recientes de las series revisadas, por lo que pueden desvelar detalles argumentales importantes para quienes no estén al día. |
Las cosas comienzan a salirse de control para Steve Rogers con un terrible ataque que él no autorizó, por lo que decide tomar cartas en el asunto y buscar los fragmentos de Kobik; lo que no sabe es que la resistencia heroica planea lo mismo.
SECRET EMPIRE #002
Editorial: Marvel Comics
Publicación: 17/05/2017
Guion: Nick Spencer
Arte: Andrea Sorrentino, Rod Reis
Rotulado: Travis Lanham
Reseña: Ricky
9 / 10
Reciban un caluroso “Hail Hydra!” todos los fieles seguidores multiversales de este genial evento Marvel que NO promete cambiar por siempre todo el statu quo de Earth Prime o 616. Quizás eso es lo más genial de este evento; a diferencia de muchos otros eventos anteriores en la Casa de las Ideas, "Secret Empire" recibió una verdadera campaña de intriga y poco se habló de lo que pasaría durante y luego del mismo.
Las expectativas están al máximo, ¡pero están arriba por la intriga y las ansias del lector! No por entrevistas o declaraciones absurdas dadas por Joe Quesada, Tom Brevoort u otros personajes que en este punto tienen una reputación dudosa, como la del Cap.
A estas alturas ya supongo que todos han leído el FCBD 2017 Secret Empire y/o al menos Secret Empire #001, así que me sentiré libre de hablar más profundamente sobre la historia… Están advertidos. ¡Ahora sí, a lo nuestro!
En esta entrega todo está donde lo habíamos dejado. Hydra bombardeó brutalmente el estado de Nevada y ahora la resistencia o “Underground” está en las ruinas, rescatando a quien haya corrido con la suerte de salvarse. Después de haber visto aquella masacre, la impotencia y las ansias de venganza hacen que se caldeen los ánimos a lo interno del grupo de héroes; pero antes de fijar posiciones sobre un dilema moral más que interesante, ha llegado el momento de escuchar el mensaje que Rick Jones les hizo llegar.
Antes de haber sido ejecutado en público, Rick, estando preso en una cárcel del nuevo gobierno de USA, hackeó su base de datos y logró acceder a la gran verdad detrás de todo… ¡Steve Rogers ha sido cambiado y reescrito por Kobik!
Mientras este súper hacker cuenta la fantástica historia nos regala dos cosas:
- Un punto de partida para que los nuevos lectores puedan comprender qué c@%@70$ es lo que ocurre con Steve Rogers.
- El mejor panel que he visto en muuuuuucho tiempo. Esas dos páginas hechas con escenas y paneles superpuestos de otros números estuvo majestuoso; arte puro.
Esta notica que les da Rick es un gran descubrimiento para los héroes, pues recordemos que eso solo lo sabía parte del High Council de Hydra y ese Cubo sintiente hecho gente, nadie más —bueno, nosotros también—. Algunos de los chicos buenos reciben la noticia con incredulidad, sabiendo que puede tratarse de una trampa tendida por Hydra; otros héroes escuchan esas palabras con esperanza, ya que creen en el no derramamiento de sangre y la opción de volver a juntar a Kobik para deshacer todo parece viable…
Pero es aquí donde la resistencia se divide, pues mientas una facción cree en que esa búsqueda dará sus frutos, la otra, liderada nada más y nada menos que por una vieja amiga de Steve, Natasha Romanoff, cree que la mejor opción es acabar a Hydra desde adentro, incluso si eso conlleva a (ejem… me cuesta decirlo, discúlpenme…) matar al antiguo Captain America. Mientras tanto, los héroes liderados por Hawkeye que se animan a la búsqueda de Kobik, saben que deberán salir de las fronteras de USA of Hydra… así que van a verse con algunos otros héroes —¿o ex héroes?— para comenzar su aventura.
Para mí fue una grata sorpresa ver quiénes decidieron seguir a Black Widow, pero más sorprendente fue lo que vino antes. Marvel nos regaló un poco de lo que NO veremos en el MCU, pero que pedimos a gritos por mucho tiempo. Gracias, editores influenciados por el dinero. Y antes de que lo olvide, a propósito del MCU; al comienzo del número se le dedican unas páginas a los héroes que están en la burbuja de oscuridad que cubre a la ciudad de New York. Lo que ocurre en la Gran Manzana se parece un tanto a los que vimos en el final de la obra maestra de Christopher Nolan dedicada al protector de Ciudad Gótica. Caos, un mundo sin ley, algunos unidos resistiendo como pueden y otros haciendo favores para cobrar a futuro… The Defenders y otros héroes son los que mantienen un poco de luz en toda esa oscuridad, literal y figurativamente. Le hacen frente a unas criaturas que aún no logro descifrar muy bien lo que son, así que algo de ayuda caería genial.
Las referencias a lo que ocurre en la actualidad dentro del universo de series de Marvel se ve un tanto forzada… aunque realmente esto lo veo siempre que los cómics y el MCU se comienzan a parecer. Es innegable que todo es dinero, pero creo que podrían poner algo más de emoción mientras tratan de meternos a algunos héroes por los ojos.
En medio de las dos grandes escenas que reseñamos vemos otra obra maestra planeada por Nick Spencer. No solo un grupo de Avengers Underground van detrás de los fragmentos de Kobik, sino que el mismísimo Cap, molesto con algunos miembros de Hydra por su accionar, va detrás de los fragmentos de su amiga desecha para tratar de gobernar el mundo de una manera más “pacífica”. ¿Y quién más adecuado para esta misión que su amigo del alma, el mismísimo Bucky Barnes Baron Zemo?
Justo en este punto tenemos otro panel de infarto: se revela dónde están los fragmentos. De verdad yo no iría a buscarlos a ninguno de esos lugares. Aparentemente no podía pasar más nada relevante en este número, así que pasamos a las últimas páginas… y entonces llegó la nota WTF. Si alguien tiene alguna teoría sobre qué es lo que vimos en el último panel, adelante, lo escucho.
En este segundo número Nick Spencer hace de las suyas magistralmente; de nuevo todo parece perfectamente enmarcado, con armonía, nada pasa solo porque sí. Lo mejor de todo es que no necesitó escribir una historia con más de 180 números como la de Jonathan Hickman para hacer un evento muy bueno, con héroes y villanos inesperados y un aire de libro de aventuras. Mis respetos, de verdad.
Por cierto, el no-tan-flashback de Miles Morales me encantó… ¿Quién lo diría? Bendis colaboró en algo.
Andrea Sorrentino hace casi todo el arte. Como siempre un maestro del dibujo, de las sombras y con un estilo gráfico que permite, a pesar la limitada paleta de colores, transmitir fuertes emociones. Solo tengo una pequeña queja, algunos rostros se parecen demasiado, sobre todo en los ojos, lo que a ratos hace dificultoso distinguir a los personajes entre sí. En algunas otras páginas se puede ver el arte de Rod Reis; son pocas, pero se nota mucho el contraste entre ambos artistas. Sin embargo, el brasileño hace un buen trabajo y se mantiene a la altura del desafío. ¡Palmadas en la espalda para Rod!
Finalmente, no puedo irme sin quejarme por la estafa del año. Dos de los personajes en la portada no aparecen en el cómic, de hecho a uno ni siquiera lo nombran.
Muchos paneles para discutir; suelten sus teorías locas y celebremos que el evento se alargará un número extra, hasta el #10. Nos vemos en tres semanas para saber qué está pasando con los héroes atrapados entre la Tierra y las hordas de Chitauris.