MR - Secret Empire #000: el maestro estratega finalmente despliega sus tentáculos
Aviso de Spoilers: La reseña que sigue a continuación trata los sucesos más recientes de la serie revisada, por lo que puede desvelar detalles argumentales importantes para quienes no estén al día. |
La frase "dormir con el enemigo" nunca tuvo tanto sentido en el mundo del cómic como ahora. Steve Rogers es y siempre ha sido agente de Hydra, y ahora se ha revelado. Veamos cómo comienza el mega evento Secret Empire.
SECRET EMPIRE #000
Editorial: Marvel Comics
Publicación: 19/04/2017
Guion: Nick Spencer
Arte: Daniel Acuña, Rod Reis
Rotulado: Travis Lanham
Reseña: Ricky
9 / 10
¡Clap! ¡Clap! ¡Clap! ¡Clap! ¡Clap! ¡Bravo, Nick Spencer! ¡Bravo!
En estos tiempos llenos de “renacimientos” —sí, hablo de DC Rebirth— y de matar personajes icónicos sólo porque sí —sí, sí, al estilo Bendis—, Nick Spencer nos demuestra que sí se puede escribir una gran nueva historia sin tener que tirar a la basura todo lo anterior hecho por otros autores y escritores. Spencer hizo la tarea y nos presenta un número #0 BRUTAL.
Pero primero, pongámonos en contexto. Si has estado viviendo en una nave espacial por los últimos 10 meses, esto va a interesarte.
- Maria Hill, Nick Fury Jr. y parte importante de S.H.I.E.L.D. tenían tiempo cocinando una prisión muy peculiar para villanos. Utilizarían un Cubo Cósmico sentiente y humanizado para lograrlo, el nombre que le dieron al cubo fue Kobik.
- La prisión se llamó Pleasant Hill y fue un éxito mientras duró. Pero pronto Baron Zemo y otros reclusos se dieron cuenta de que estaban siendo sometidos a un lavado de cerebro por ese cubo en forma de niña caprichosa y comenzó una rebelión. Varios héroes y equipos de Avengers debieron intervenir para reinstaurar el orden. Todo fue un desastre.
- Varios villanos escaparon, se formaron los nuevos Thunderbolts mientras que Kobik se fue libre también; pronto se uniría a este equipo de villanos renegados.
- La única nota positiva es que Kobik, manipulada por Red Skull, le devolvió sus poderes de súper soldado a Steve Rogers.
¿Se me escapa algo? No, eso es todo… ¡Oh! Perdón, se me escapaba un pequeño detalle.
- Kobik fue manipulada por Red Skull estando en la prisión; así, al devolverle los poderes al Captain America también alteró la realidad, modificando la niñez de Rogers y consiguiendo así que sea y siempre haya sido un espía de Hydra.
Ahora sí. ¿Listos? ¡Comencemos!
Nada más al abrir el cómic se nos conecta con una de las historias más icónicas —y lamentablemente aún inconclusa— de los últimos años en Marvel: me refiero por supuesto a S.H.I.E.L.D. de Jonathan Hickman y Dustin Weaver.
En épocas de la Segunda Guerra Mundial, el Cap se encuentra secretamente con el Kraken, quien está junto a Isaac Newton y Nostradamus, listos para hacer lo que sea con tal de cumplir la misión de que el mundo acabe como tiene que ser, tal y como lo dice la profecía de Hydra y no como lo quiere “El Escudo”, o sea, S.H.I.E.L.D.
Tras este pedazo de obra maestra de retcon, se nos transporta al presente, en donde se está desatando todo lo que hemos visto en la serie Captain America: Steve Rogers.
Los detalles estarían de más, no quiero arruinar la grata sorpresa que tendrán al leer una historia tan bien tramada. En definitiva, el Cap está armando el caos en diferentes frentes, dejando algunas piezas fuera del tablero, dejando ciegos a algunos que podrían ver su plan y listo para tomar el toro por los cuernos.
Lo interesante de este Cap es que sigue siendo el héroe admirado e inquebrantable de siempre ante los ojos de sus héroes y personas allegadas de siempre; pero en su faceta de súper espía siempre ha sido un peón; un soldado que sirve para fines y personas mayores. Así es que su gran momento es ahora, este es su acto, su número, y todo está saliendo de acuerdo a su plan. El levantamiento del Imperio apenas comienza.
Nick Spencer arma un guion para el número y el evento sencillamente espectacular. Los detalles y al fineza con la que se teje la estrategia del Cap de cerebro lavado es un espectáculo. El rubio del escudo arma un completo plan maestro y podemos verlo leyendo entre líneas, sin necesidad de que se nos recuerde de ello en cada viñeta, ya que todo es memorable e impactante. Le doy una estrella dorada por la narración; realmente muy buena, hace recordar algunos pasajes de Hickman.
Daniel Acuña hace un trabajo muy bueno como siempre. Siempre parece que le falta ¼ para el peso, que roza la excelencia, pero le falta algo; de cualquier manera su arte se disfruta y queda muy bien en los pasajes de suspenso. Por otra parte, los colores de Rod Reis son muy buenos en unas partes, regulares en otras; depende del momento en el cual se encuentre la historia. No siempre queda bien con el estilo de dibujo, me parece que hace falta más color. Pero no es mal de morir.
¡Léanlo ya! Antes de que alguien más les cuente que Hydra va directo a tomarse la ciudad de…