MR - "Superman" #008: sobre los hombros de gigantes
Aviso de Spoilers: La reseña que sigue a continuación trata los sucesos más recientes de la serie revisada, por lo que puede desvelar detalles argumentales importantes para quienes no estén al día. |
Padre e hijo juntos en un proyecto de ciencias. ¿Qué podría salir mal? Bueno, estamos hablando de la familia de Superman aquí. Así que puede que todo.
SUPERMAN #008
Editorial: DC Comics
Publicación: 05/10/2016
Guion: Peter J. Tomasi, Patrick Gleason
Arte: Doug Mahnke
Reseña: Oconowoc
8,5 / 10
Ayudando a Jon en un proyecto de ciencias para la escuela, algo sale un poquito mal y Superman e hijo se ven transportados a una isla que parece estar oculta en la niebla. Esta parece ser la segunda versión de Dinosaur Island, que como el nombre indica, es una isla que el tiempo olvidó y que aun es habitada por dinosaurios ancestrales.
Descubierta por el Enemy Ace en 1927, la isla ha sido escenario de numerosas colecciones en el universo DC, incluido la primera versión del Suicide Squad que fue formado durante la segunda guerra mundial. La Isla supondría el final de esta primera versión del grupo de soldados más rebeldes que batalló contra Hitler en la miniserie DC: The New Frontier, cómic firmado por Darwyn Cooke en un intento de unir conceptos de la edad de plata con otros que no estaban situados en ninguna época particular, en este caso, Dinosaur Island.
La isla representa en los cómics el tiempo que no pasa por ellos. La isla es un concepto clásico, sacado –o inspirado- por los relatos de Conan Doyle que funcionan bien en cualquier época, por qué la inventiva no pasa de moda, y el tiempo no la afecta.
Tomasi y Gleason firman un relato de aventuras clásicas, donde los protagonistas tratan de salir de la isla y terminan descubriendo algo más. O a alguien más. A alguien que trascenderá el tiempo y a la muerte. ¿Ya imaginan a quién apunto?
El dibujo corre a cargo de Doug Mahnke, y si bien es correcto, nuevamente el entintado de Jaime Mendoza ensucia el trazo de Mahnke, dando unas terminaciones poco detalladas y sin ninguna definición artística buena. Es una lástima porque Mahnke es un excelente ilustrador y muy detallista, que no termina de convencer por su entintador.
Vibrante cómic que funciona como homenaje a ese gran artista que fue Cooke, pero que no termina de ser perfecto por lo poco comedido del entintador. De todas formas es un cómic muy interesante.