Mangapolis - "Utena, la Chica Revolucionaria" de Chiho Saitō
Luego de una ausencia de más o menos dos meses, estoy de vuelta en Mangapolis para reseñar un manga del que mucho —o quizás no tanto— se ha dicho: Utena, la Chica Revolucionaria. Mucho se ha escrito, opinado y hasta interpretado de esta serie, y sinceramente parece innecesario escribir algo más al respecto, todo parece ya dicho; sin embargo, tras leer esta obra no pude parar las ganas de escribir al respecto.
Utena, La Chica Revolucionaria
Título original: 少女革命ウテナ | Shōjo Kakumei Utena
Demografía: Shōjo
Publicación original: 1996 - 1997
Guion y arte: Chiho Saitō
Cantidad de volúmenes: 5 tomos tankōbon
El argumento de Utena gira entorno a ella, nuestra protagonista, quien con seis años se enfrentó a la muerte de sus padres, lo que generó una depresión que la llevó casi a la muerte. En aquella ocasión, Utena fue salvada con un príncipe que secó sus lágrimas y entregándole un anillo la motivó a vivir con nobleza y perseverancia, indicándole que volverían a encontrarse. Tras un par de años y ya con una Utena adolescente, nuestra protagonista es guiada hasta la Academia Ohtori, lugar donde conoce a los intrigantes miembros del consejo estudiantil, y a Anthy Himemiya, una enigmática joven sumisa que parece ocultar innumerables secretos. Tras un par de acontecimientos, Utena reta a un duelo a uno de los integrantes del consejo; éste la cita al coliseo de duelos oculto tras de la escuela. Al llegar ahí, Utena descubre un enorme castillo flotante al revés en el cielo, y no sólo eso, también descubre que Anthy Himemiya oculta dentro de sí una espada llamada “la espada de Dios”, la que guarda el poder de revolucionar al mundo. Quien gane el duelo será el dueño de Anthy, la prometida de la rosa y el portador del poder de Dios.
Resumo a grandes rasgos el increíblemente interesante argumento de Utena. Créanme, mi resumen es muy vago para lo que en verdad se trata la historia. Probablemente, muchos de ustedes conocerán Utena por el anime y por las temáticas yuri; sin embargo, en el manga hay muy pocos matices yaoi y yuri a diferencia del anime, esto porque comenzó a emitirse mientras el manga aún estaba publicándose y el enfoque de ambas historias, aunque tienen acontecimientos similares, son completamente diferentes. Por un lado, el anime se enfoca en la interpretación de que la historia narra el proceso de crecer, de pasar de la infancia a la adolescencia de una manera dura; Utena es una chica que sueña con convertirse en un príncipe noble que rescate princesas, pero se enfrenta a un mundo lleno de perversión y malicia que termina por consumirla y hacerla despertar de sus fantasías, encontrando solo consuelo en Anthy, su compañera inseparable. El manga, por otro lado, trabaja la idea de madurar, pasar de la infancia a la adolescencia sin nunca traicionar tus ideales, viviendo con nobleza para alcanzar tus sueños. Desde esta perspectiva, el anime es más oscuro y más enfocado en un público masculino; el manga, a su vez, es más ideal, más shōjo que otra cosa.
Refiriéndome netamente al manga y por qué lo recomiendo muchísimo, me parece que es una obra redonda, con un argumento increíblemente bien narrado y con temas importantes que se relacionan estrechamente a la adolescencia. No se sorprendan si encuentran diálogos increíblemente filosóficos o existencialistas, pues el argumento avanza a la par con el desarrollo identitario de los personajes. Temas como la religión y el machismo son los fuertes del manga, oculto en diálogos y símbolos que finalmente se concretizan en el arco final de la historia. Lo que quiero decir con todo esto es que el manga de Utena, la Chica Revolucionaria se centra más en la evolución espiritual del adolescente. Utena, que parte siendo ingenua pero con deseos de conocer a su salvador, inicia un viaje que la llevará a enfrentar la amargura de la decepción más de una vez, sin embargo ella logra sobreponerse y aprender de esto manteniéndose fiel a sus ideales y eligiendo seguir el camino del bien. Por este motivo, tanto el manga como el anime de Utena han sido comparados con novelas de formación tales como Demian o Siddhartha de Hermann Hesse, y en efecto, comparto esta opinión. Si han leído alguna novela de Hesse, estoy segura que encontrarán fácilmente las similitudes entre Utena y Anthy, con Sinclair y Demian, o entre el Dios de este mundo y Abraxas.
Estéticamente, el manga es un festín de simbolismo: por ejemplo, la pérdida de la inocencia aparece representada constantemente a través de la espada que destroza una rosa, o el despertar a la sexualidad y el deseo se representa de manera casi explícita en una escena donde un personaje besa los pies descalzos de Utena. El manga representa escenas oscuras como la manipulación masculina hacia personajes femeninos, pero no lo hace de una manera gráfica y física como ocurre en el anime, sino que a través de las acciones y diálogos del personaje, optando tratar estos temas a un nivel psicológico. Mientras en el anime veremos escenas de abuso sexual explícito, en el manga veremos cómo la manipulación lleva a los personajes femeninos a actuar de una u otra forma sin que alguien se lo pida, pues sus mentes están trabajadas con anterioridad.
La relación de Utena y Anthy no está desarrollada desde la perspectiva romántica, sino desde la premisa de una unión feminista en la que las chicas no deben esperar a que un varón las salve, sino que pueden y deben valerse por sí mismas, apoyándose entre ellas. Plantea el valor femenino, la alianza en base a los ideales de este movimiento en el que se busca la igualdad de los géneros. Y esto está bien representado, aunque destaca mucho más en el anime. En la versión animada es mucho más característico el hecho de que ningún personaje es hetero y homosexual, ni que sean CIS hombre o mujer, solo existen los individuos, y en este mundo la concepción de amar es más grande que la de género. Y tanto en el manga como en el anime podemos ver que la verdadera revolución de Utena es el romper con los cánones típicos del shōjo en el que todo es blanco y negro, en Utena, la Chica Revolucionaria existe el gris en infinitas gamas y todas son válidas dentro de la senda correcta, “el mundo de la luz”.
Antes de acabar, les comento que pueden conseguir fácilmente el manga de Utena, la Chica Revolucionaria —por lo menos en Chile— pues fue editado hace ya un par de años por Norma Editorial. Es un manga de fácil acceso y que además se suele vender la historia completa en packs. En Utena no encontrarán los típicos elementos del shōjo, pero vamos, ¿quién realmente quiere leerlos? Si quieren leer algo interesante, lleno de matices y simbolismos, Utena, la Chica Revolucionaria es su manga. Por mi parte, este ha pasado a ser sin duda uno de mis favoritos.