Mesa de Combate S01E05 – Camel Up: “Camellos rápidos y furiosos”
¿Qué haces cuando tienes mucho dinero y te estás aburriendo en una calurosa tarde en el desierto? Lo que cualquier persona sensata haría, organizar una carrera de camellos alrededor de la pirámide más grande de Egipto. Pero no te preocupes, no debes ser el jugador más rápido, sólo el más inteligente. Acá debes predecir qué camello ganará la carrera, o por lo menos, el que vaya a la cabeza una vez que se cierren las apuestas. ¿Tienes mala suerte? ¡Perfecto! Ya que también podrás ganar dinero apostando por el camello que llegue último. Camel Up o Camel Cup (dependiendo de tus inclinaciones filosóficas) es un rápido y divertido juego competitivo. Ganador del Spiel des Jahres 2014, uno de los premios más importantes en el mundillo de los juegos de mesa. Camel Up te lleva la emoción de las carreras de camellos directo a tu mesa. Pero ojo, ya que estas bestias son más sorprendentes de lo que imaginas, y puede que pierdas tu dinero en la última curva.
Camel Up
Año: 2014
Editorial: Pegasus Spiele/Z-Man Games/Ediciones MasQueOca (Edición revisada)
Diseño: Steffen Bogen
N° Jugadores: 2-8
Tiempo de juego: 20 a 30 minutos
Dependencia del idioma: Muy baja
Idioma: Multilenguaje
Abriendo la caja
A diferencia de otros juegos, este no trae un organizador dentro de la caja para los componentes, pero sí varias bolsas resellables para dejar todo ordenado y separado. Los componentes son de muy buena calidad y con un arte simple, pero muy llamativo, eso ayuda a recordar de manera fácil para qué sirve cada uno y que los puedas usar rápidamente durante el juego.
- 1 Pirámide armable.
- 1 Tablero de juego.
- 5 Figuras de camello.
- 5 Dados de movimiento.
- 40 Cartas de apuesta.
- 8 Fichas de desierto.
- 15 Tarjetas de apuesta por etapa.
- 5 Tarjetas de pirámide.
- 1 Marcador de jugador inicial.
- Mucho dinero en forma de monedas y billetes.
El tablero de juego es de un tamaño menor a otros juegos antes revisados, aproximadamente de - eso eso -, lo que lo hace ideal para cualquier mesa sin miedo a que te quedes sin espacio para botanas, y además, si lo das vuelta, tienes un póster con la ilustración de la portada del juego. Los camellos y dados, hechos de madera, están pintados de colores fuertes y son fáciles de diferenciar, especiales para jugar con niños, por su diseño simple. Tanto las tarjetas como las monedas, ambas de cartón, tienes un arte que sigue la temática del juego hasta el más mínimo detalle y siempre con un humor muy ligero. Pero lo que se lleva el primer lugar sin dudarlo, es la pirámide armable 3d. Viene separado por piezas y con instrucciones detalladas de cómo armar este divertido componente, como si estuvieras armando el nuevo mueble de tu living traído desde IKEA. Y si se fijan bien, podrán encontrar los nombres de la gente que ayudó en el juego, escritos en algunos bloques de la pirámide casi en secreto. Por último el manual, de tan sólo 2 hojas, tiene reglas simples y muchas ilustraciones, cosa que aprendas de manera rápida y puedas recordar las reglas con mayor facilidad.
Revisando el manual
Como ya te comentamos, en Camel Up, representas uno de los 8 personajes de la alta sociedad egipcia, decidiendo cual de los camellos será el ganador durante una serie de etapas hasta que un camello cruce la meta. Cada jugador dispone de 5 cartas de apuesta secreta, una por cada camello, y una ficha reversible de oasis-desierto. Los demás componentes se sitúan en el tablero. Se elige un jugador al azar para que este lance los 5 dados al mismo tiempo, lo que determinará las posiciones iniciales de cada camello al comenzar la carrera y que después se seguirán usando para determinar el movimiento de cada dromedario durante la competición. ¿Recuerdas que te mencionamos que estos simpáticos camellos son un poco más especiales que el resto? Descubrirás que tienen aspiraciones de alpinista, por lo que cada vez que más de un camello esté en el mismo espacio, en vez de estar uno al lado del otro, estos se montarán encima del camello que ya estaba ahí. Por lo que si 2 camellos llegan a un espacio donde ya había un camello, estos se subirán sobre él, formando una torre digna de un juego de Jenga. Por último, cada vez que se mueva un camello con polizones sobre su espalda, estos se moverán junto a él, tomando ventaja de su esfuerzo titánico.
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Durante el turno de un jugador, él podrá hacer una acción de entre cuatro opciones:
- Tomar una tarjeta de pirámide: Esta acción permite al jugador lanzar al azar uno de los 5 dados disponibles, que se encuentran dentro de la pirámide armable. Cada dado mueve a un camello en específico según su color y lo moverá de 1 a 3 espacios. Una vez que la quinta tarjeta de pirámide ha sido usada, y todos los camellos se han movido, se acaba esta etapa y se pagan las apuestas hechas hasta ahora. Luego se guardan todos los dados de vuelta a la pirámide y se inicia una nueva etapa. Además, cada una de estas tarjetas otorga una moneda cuando se termina cada etapa.
- Tomar una ficha de apuesta: Cada camello tiene 3 fichas de apuesta con distintos valores, las cuales te recompensan o castigan dependiendo de la posición en la que haya salido ese camello en esta etapa, y estas se ordenan de mejor a peor apuesta. El primer jugador en tomar una ficha para cierto camello, podrá ganar 8 monedas, el segundo 5, y el tercero solamente 2, por lo que es importante saber cuándo arriesgarse.
- Colocar tu ficha de desierto: Cada jugador cuenta con una de estas fichas, y puede colocarla en el tablero siguiendo estas reglas:
- No puedes colocarla en un espacio donde ya haya una ficha de desierto ni adyacente a esta.
- No puedes colocarla en un espacio donde hayan camellos o en la posición de salida.
Si ya está tu ficha en juego, puedes usar esta acción para moverla a otro espacio, siguiendo las mismas reglas ya mencionadas.
- Apostar por el camello ganador o el perdedor: Puedes usar una de las cartas de tu mano y apostar secretamente por el camello que crees que ganará o el que crees que perderá la carrera. Mientras tengas cartas en mano, puedes seguir apostando en tus siguientes turnos, pero no puedes mover ni retirar las apuestas que ya hayas hecho. A diferencia de las tarjetas de apuesta, estas sólo se pagan al final de la carrera y no después de cada etapa.
Después de que finalice una etapa, se pagan, o cobran, las fichas de apuesta que tenga cada jugador y se devuelven al tablero. Además, se pagan las fichas de pirámide y estas también se devuelven. Por último, cada jugador recupera del tablero su ficha de desierto si es que la jugó. Se devuelven los dados a la pirámide y se inicia una nueva etapa. El juego termina cuando el primer camello cruce la línea de meta, independiente de que este lo haga solo o con uno o más camellos en su espalda. Recuerda que en cada torre de camellos, se considera que el camello que va más arriba es el que va primero en caso de empate. Una vez que se termine la carrera, se realizan los pagos del final de etapa y se procede a pagar las apuestas en secreto hechas por los jugadores. ¡El jugador con más dinero, es el ganador de la partida! Te mereces un refresco helado y un oasis para tu camello ganador.
¿Por qué debes jugarlo?
Además de ser un juego premiado y uno de los fenómenos del 2014, Camel Up es un juego amigable y para toda la familia, pero a la vez muy competitivo. Esto se debe a que tiene reglas simples y turnos rápidos. A pesar de su alta dependencia de los dados, el sistema de juego permite que sean tus decisiones las que afecten tu partida, por lo que aunque elijas un camello flojo, puedes recuperar tus pérdidas. Sus turnos rápidos, permiten que el juego escale bien en tiempo, por lo que tus partidas de 2 jugadores serán igual de divertidas que de a 8, aunque será necesario que te arriesgues en cada turno si quieres asegurar la victoria. Los componentes aunque simples, son hermosos, desde el tablero hasta las figuras de madera de los camellos, pero sin lugar a dudas, la pirámide se lleva todos los elogios una vez que la pones en el tablero. Te aseguro que esta será una gran adición a tus noches de tablero para que juegues entre partidas de tablero más complejos y extensos. En sus marcas. Listos. ¡Partieron!