"Legends" (1986): el primer paso a una gran aventura
Voy a comenzar esta reseña como casi siempre comienzo mis entradas: hablando de DC Comics en la época de Crisis on Infinite Earths.
Sé que esto es algo regular, pero siempre me tomo muy a pecho el consejo de Don Francisco al hacer Sábado Gigante: "debes hacer cada programa como si fuera tu primer programa". Habiendo hecho las disculpas del caso, hablemos un poco de la DC de los ochentas.
Una vez terminado el exitoso crossover editorial, DC Comics tenía un universo relativamente nuevo con el cual comenzar. Este era el principal objetivo de Crisis on Infinite Earths, eliminar cualquier incongruencia y tener vía libre para gestionar un universo ordenado y sin fallas argumentales. Pero el mega-evento reveló otra cosa que hasta ahora no se había hecho tan notorio: los crossovers grandes venden en grandes cantidades.
Con esto en mente, Dick Giordano pide un evento que continuaría la historia de Crisis on Infinite Earths, pero de forma mucho más contenida y con menores pretensiones. El objetivo principal de esta nueva saga era la de introducir personajes que no habían tenido tanto desarrollo en la anterior macrosaga, además de presentar conceptos completamente cambiados y actualizados a este nuevo Universo DC.
Giordano, muy astuto como editor, sugiere tener dos guionistas con andaduras completamente diferentes en la editorial: un novato John Ostrander y el veterano Len Wein. Ostrander aportaría un enfoque fresco a cada concepto abordado en la miniserie y Wein haría funcionar los diálogos para que los cambios radicales no sonaran tan descabellados.
El primer aporte de los guionistas al nuevo universo DC sería la incorporación inmediata del Fourth World, creación de Jack Kirby, que muchos fans temían que se hubiera perdido en la anterior saga. Giordano sugirió que también se le diera un rol importante a The Flash —identidad adoptada por Wally West meses antes— y al Captain Marvel, adoptado por la editorial en 1972 y relegado a esa burbuja que era Earth-S.
Pero la meticulosa planeación editorial tenía sus contratiempos: Superman y Wonder Woman no estaban disponibles para la fecha de publicación de Legends. Esto se debió a que John Byrne y George Pérez no terminaban de delimitarlos como personajes en sus respectivas series. Y si hay algún personaje que merece el apelativo de “leyenda” son Wonder Woman y Superman.
Este tipo de problemas aún se siguen repitiendo, Batman y su continuidad fue respetada al completo, pero Superman y sobre todo Wonder Woman eran personajes casi completamente rediseñados, por lo que sus apariciones en la saga pasan casi de manera circunstancial.
Una vez ya con el guion armado, faltaba que alguien lo dibujara. Se barajaron varios nombres, pero al final se decantaron por John Byrne, el canadiense que estaba trabajando en la miniserie The Man of Steel. Byrne era idóneo para la tarea: era capaz de dibujar dos series al mismo tiempo y su trabajo en Superman permitía una mayor coordinación para usar un poco más al personaje. Byrne no tuvo problemas en aceptar el encargo, salvo por el de reducirla de ocho a seis números para no tener una carga de trabajo tan pesada. Ostrander y Wein no tuvieron problemas, ya que la saga involucraba muchos menos personajes que Crisis on Infinite Earths, por lo que era posible reducir el número de páginas sin perder lo contado.
La historia de Legends gira en torno a Darkside y el universo DC post-Crisis. En este caso, la malvada creación de Jack Kirby trataría de conquistar la Tierra con una aproximación fresca: la de la cultura del miedo. El dios oscuro usaría la habilidad de persuasión de Glorious Godfrey para generar controversia entre la sociedad respecto a los superhéroes, con el fin de que se pusiesen en contra de ellos hasta el punto que fueran prohibidos. El nudo de la historia recuerda a mucho una de las subtramas de Watchmen, publicado un par de meses antes, pero creo que la mayor influencia en la historia es la Marvel de Stan Lee y Jack Kirby, que fue tan popular en los setentas. Un claro testamento de que DC tenía todas las intensiones de renovarse de la ya caduca Edad de Plata.
Conforme la historia se desarrolla, se comenzarán a pasear varios personajes que se suponían estaban en Tierras separadas del universo DC principal. Blue Beetle, Black Canary, Captain Marvel y Doctor Fate quedarían establecidos como parte integral del universo DC post-Crisis. Otros pasarían a la reinvención parcial, como es el caso de la Justice League, que estaba viviendo sus últimas aventuras como la Justice League Detroit, dando paso a la liga que todos amamos: Justice League Intenational.
La renovación completa se vería reflejada en la imagen del Suicide Squad. Concebido originalmente como un cómic de guerra con tintes de fantasía, trataba de un grupo de soldados que cumplían misiones imposibles durante la Segunda Guerra Mundial —varias de las cuales se situaban en la Dinosaur Island— y donde estos mismos soldados eran considerados desechables. Legends volvería a introducir este concepto de “misión imposible” bajo un prisma completamente distinto: al verse sobrepasado por la amenaza de Darkside y sin superhéroes de su lado, el gobierno de los Estados Unidos crearía un grupo que actuaría en las sombras, comandados por Amanda Waller y guiados en el campo por el coronel Rick Flag. El grupo estaría compuesto principalmente por villanos del Universo DC que cooperarían en la misión con la esperanza de permutar sus condenas. El concepto saltaría de Legends a tener su propia colección con Ostrander en los guiones.
A grandes rasgos, Legends como lectura no profundiza mucho en las buenas ideas que propone. Todo el tema de la prohibición de los superhéroes da para mucho —como veremos en posteriores años— pero también creo que ese nunca fue el objetivo de la saga. En vez, tenemos un crossover que se preocupa por mostrarnos ciertos personajes y definirlos en pocas líneas, dando un buen cómic introductorio para el lector novato que quiere meterse a leer esa particular época de la editorial. Es el pie a una gran aventura que continuará en Justice League International, Suicide Squad, Superman, Wonder Woman, etc. y creo que la calidad de esos cómics en particular está más que probada. Un interesante comienzo para la mejor versión del Universo DC. Al menos lo es ante mis ojos.