MR - "Divinity II" #001: una nueva diosa ha nacido y está al servicio de Putin
Aviso de Spoilers: La reseña que sigue a continuación trata los sucesos más recientes de la serie revisada, por lo que puede desvelar detalles argumentales importantes para quienes no estén al día. |
El año pasado vimos la excelente miniserie Divinity de Matt Kindt y Trevor Hairsine, narrando la historia del cosmonauta Abram Adams, su transformación en un ser con poderes casi divinos y su llegada a la Tierra. Pero Adams, en la misión que lo convirtió en la entidad denominada simplemente como Divinity, dejó atrás a dos compañeros cosmonautas. Divinity II viene a explorar el destino de estos dos cosmonautas, partiendo desde esta premisa con el mismo equipo creativo de la miniserie original, incluyendo entintador, colorista, rotulista y hasta portadista y editores.
DIVINITY II #001
Reseña: Valiant Entertainment
Publicación: 20/04/2016
Guion: Matt Kindt
Arte: Trevor Hairsine
Reseña: Armstrong
Esta primera entrega es un número de origen. Esta vez conocemos a Valentina “Myshka” Volkov, una huérfana vagabunda adoptada por el doctor que encabezaría el proyecto para enviar a los cosmonautas rusos a lo profundo del universo. A diferencia de Abram, Valentina está 100% comprometida con la misión y con El Estado, lo que la impulsa a buscar la forma de regresar a casa por cualquier medio, decidiendo exponerse a “Lo Desconocido” tal como lo hizo Abram para recibir sus mismos poderes y lograr así encontrar una manera de volver. Gracias a la transformación de Valentina podemos entender un poco más el proceso que ambos cosmonautas sufren, aunque aún quedan muchas incógnitas, siendo la principal ¿qué es “Lo Desconocido”?
En el apartado artístico está el expresivo Trevor Hairsine, siguiendo con su buen trabajo hecho en la primera miniserie, manejando los tiempos narrativos a través del uso de distintos tamaños de viñeta. Las fuertes sombras del pasado en las tintas de Ryan Winn contrastan con los brillantes tonos púrpuras de “Lo Desconocido” en los colores de David Baron, consiguiendo un resultado final bastante efectivo.
Al igual que en la miniserie original, Kindt construye la narración en base a contrastes entre el pasado y el presente, contraponiendo la difícil infancia de Valentina y las oportunidades que tuvo gracias al Dr. Volkov con su posterior misión espacial y transformación cósmica. Es de prever que la miniserie se vuelva luego una yuxtaposición entre Valentina y Abram, mujer y hombre, comunismo y… ¿capitalismo? —no es que Abram represente el capitalismo, por eso mi curiosidad—, lo que será un interesante ejercicio que espero Kindt sepa llevar a buen puerto. Como mínimo, con el cliffhanger de este número con Valentina ofreciendo su ayuda a Vladimir Putin, ya nos deja con altas expectativas.