MR Marvel 47 - Marvel in Space; el instinto maternal de Spider-Woman; Slott vuelve con sus mañas
Aviso de Spoilers: Las reseñas que siguen a continuación tratan los sucesos más recientes de las series revisadas, por lo que pueden desvelar detalles argumentales importantes para quienes no estén al día. |
Buenos días amigas y amigos, bienvenidos a otro capítulo más de MicroReseñas Marvel. Hoy es la última entrega de MicroReseñas del año y así como los Power Rangers después de la destrucción de la Cámara de Poder, ¡nos vamos al espacio! La mitad de las reseñas son aventuras espaciales ya sea de Venom, Star-Lord, Spider-Woman y un parcito traído a ustedes directamente desde el legado de Jim Shooter, ¡Starbrand & Nightmask!
En fin, en La Casa de las Ideas hay mucho que leer, así que veamos qué nos tiene preparada esta semana el Todo-Nuevo, Todo-Diferente Universo Marvel, traído a ustedes por God Doom.
¡Ah! Y no olviden pasar por el resto del espectro de reseñas, como las MicroReseñas DC y las MicroReseñas Indies.
RED WOLF #001
Esta serie es continuación directa de la miniserie 1972 que tuvo lugar en Secret Wars y en donde el protagonista, como su nombre lo indica, es Red Wolf. En este primer número lo vemos realizar las funciones clásicas de un sheriff además de conocer un poco más sobre sus orígenes y de dónde viene, para terminar con un cliffhanger que la verdad puede verse bastante cliché, sobre todo si pensamos que la “Distinguida Competencia” —DC— hizo lo mismo hace unos pocos años con una serie de tono similar —All-Star Western— y por lo mismo aún está fresco en la memoria. Al menos yo lo recuerdo.
Era un número decente hasta el final, me molestó que usaran un recurso que se ha vuelto muy recurrente en los cómics del Viejo Oeste en el último tiempo.
La historia hasta antes de eso, si bien no era excelente, si tenía cosas rescatables, pero para mí todo terminó en la basura con la página final. Teniendo un mundo abierto para crear, explorar e incluso expandir, Nathan Edmonson decide usar lo fácil, lo conocido, lo manoseado y recontra usado. Comprendo que sea un poco complicado escribir “historias de vaqueros” cuando al lado hay seres súper poderosos que tienen fuerza sobrehumana, vuelan o tiran rayos, pero si se aventuraron a hacer una serie de este estilo que por lo menos hagan el intento y se atrevan a sorprender, porque la verdad estoy pensando seriamente que en el próximo número Red Wolf se va a encontrar con Tony Stark y le va a decir que su tátarabuelo le dejó acciones en su empresa, o quizás lo haga con Steve Rogers y le cuente que un ancestro suyo lo dejó como sheriff.
PATSY WALKER, A.K.A. HELLCAT! #001
La inocente Patsy está de vuelta con su propio título, y las cosas no podrían ser peores para la gata infernal: despedida, arrojada a la calle y, por si eso fuera poco, acaba de descubrir que los cómics que su madre escribió sobre ella acaban de ser republicados sin su autorización. Pero no todo es malo, la necesidad de un servicio que encuentre trabajo para aquellos con habilidades que no quieren ser héroes puede ser el golpe de buena suerte que Hellcat necesita.
En su afán de publicar cómics para niños y así expandir su clientela, Marvel nos entrega este título que trae elementos de animación japonesa, con dibujos chibi kawaii en cada pagina; la intención de crear material atractivo para las niñas más pequeñas se siente a ratos casi obligado y sobre-forzado, pero logra hilar una historia atrayente para el público objetivo.
De todas maneras debo advertirle al público regular que este no es un título para los gordos sudorosos nerds como yo, que ya estoy acostumbrado a escenas de sexo y sangre como un requisito en mis cómics, pero un gran título para niños que se están iniciando en el mundo del Noveno Arte.
STARBRAND AND NIGHTMASK #001
Como lector relativamente nuevo —me metí a los cómics recién el 2011—, estoy en un constante descubrimiento de lo que es la historia de las editoriales y personajes. Conozco lo mínimo del New Universe que Jim Shooter creó a mediados de los ’80 para Marvel; mi mayor exposición al concepto fue lo poco que rescató Jonathan Hickman para su excelente etapa en Avengers y New Avengers. En consecuencia, Starbrand y Nightmask fueron dos personajes que inmediatamente llamaron mi atención y capturaron mi imaginación: su potencial era muy intrigante, teniendo a un joven inseguro con el poder de defender la Tierra con sus propias manos y un ser lleno de conocimiento práctico pero con nula experiencia de vida. Su química bajo la pluma de Hickman era entretenida, prometían mucho.
Luego llega esta serie. Del señor Greg Weisman solo conozco Kanan: The Last Padawan, que mi compañero Toripe ha disfrutado mucho, por lo que es una buena referencia. Kevin Conner y Adam Blackveil tienen diálogos divertidos, la trama avanza a un buen ritmo, tiene un cameo de Squirrell Girl y los villanos que aparecen al final prometen un enfrentamiento emocionante para el próximo número, además de abrir un potencial misterio para nuestros héroes. Entonces, ¿qué falla?
Mi gran problema con este número es el arte. No conozco a Dominike “Domo” Stanton, y por lo que veo en internet tampoco ha hecho muchas series, siendo su mayor trabajo Fanboys vs. Zombies para BOOM! Studios. Aunque no es un estilo que me guste, puedo respetar sus decisiones estilísticas como señas de identidad; mi problema es con la representación de edades. Contrario a lo que le ocurre a la mayoría de artistas superheroicos que son incapaces de dibujar a un adolescente como tal, Stanton hace a todos los personajes jóvenes parecer apenas unos quinceañeros, pero según la historia nuestros dos protagonistas están entrando en la universidad, por lo que deberían estar entrando en la juventud. Se ven de 12 cuando tendrían 18.
Pese a esto los guiones de Weisman no son malos, así que la serie puede sostenerse con ello si se mantiene a un buen nivel y tal vez con un cambio de artista la cosa mejore. O que Stanton afine su pluma. Hasta entonces, no pasa del correcto, bordeando el mediocre.
SQUADRON SUPREME #001
Presentados en la historia que conectaba los demás teasers en Avengers #000, James Robinson y Leonard Kirk comienzan a lo grande y sin rodeos con el nuevo Squadron Supreme, compuesto por miembros de mundos muertos tras las Incursiones que desencadenaron en Secret Wars. Dispuestos a defender la única Tierra que les queda a toda costa, no temen tomar medidas extremas como la de este número.
Si aún no saben quién muere en este número no les arruinaré la sorpresa, pero si ya lo leyeron o lo vieron en internet —malditas fanpages que spoilean todo sin aviso— sabrán que no fue alguien sin importancia. Algunos estarán de acuerdo en que lo merecía, otros no; lo realmente importante son las consecuencias que desencadenará y el mensaje que envía el Squadron Supreme con sus acciones. Además, no nos engañemos, tarde o temprano volverá de entre los muertos.
Curioso que en Avengers #000 el equipo adquiere el edificio y empresa de un conocido personaje, pero al parecer nadie prestó demasiada atención a este hecho hasta ahora, que resulta bastante esclarecedor tras lo visto. Estoy siguiendo a James Robinson desde que volvió a Marvel en los All-New Invaders y Fantastic Four —me salté su Spider-Man: Family Business— y hasta ahora ha hecho un gran trabajo. Aunque tiene sus peros, el balance final, al menos para mí, ha sido siempre satisfactorio. Squadron Supreme al parecer mantendrá el nivel, si es que no lo superará, ya que la premisa es ambiciosa, los personajes sumamente atractivos y la acción e intriga están aseguradas.
Parte central en lo bien que se siente este número es el gran trabajo de Leonard Kirk. Me he topado con algunas críticas a su trabajo durante su etapa en Fantastic Four, pero en general son nimiedades, como alguna expresión un tanto extraña, fácilmente perdonables. Durante los FF estuvo coloreado por Jesus Aburtov, quien tenía unas decisiones de colores que nunca terminaron de convencerme del todo; esta vez el colorista es Frank Martin, quien antes me desagradaba y terminó de enamorarme con su trabajo en East of West. Martin coloreó a Carlos Pacheco en la reciente Squadron Sinister, enmarcada en Secret Wars, lo que ayuda a una transición visual bastante adecuada considerando las medidas extremas de esta agrupación de supuestos héroes. Con Martin, los lápices de Kirk lucen mejor que nunca.
Potente inicio para una prometedora serie. Le tengo mucha fe a Robinson y Kirk. Lectura recomendada y a tener en cuenta.
SPIDER-WOMAN #002
Me encanta la situación que está viviendo Jessica Drew. Y cómo es planteada por parte de Dennis Hopeless. Cómo analiza su entorno y prefiere tragarse su orgullo de heroína y pedir ayuda para enfrentar lo sucedido en un hospital alienigena.
Me encanta cómo su monólogo se traduce a una conversación con su hijo no-nato. Puede parecer una conversación de una sola vía, pero las «respuestas» del bebé son simples y simpáticas. Y cómo le habla de su vida, muestra un amor impresionante, un cariño y unas ganas de protegerlo dignas de una madre. Jessica no quería tener un hijo, no estaba dentro de sus planes ser madre, pero ahora que está con las botas maternales hay que darle con el 110%, incluyendo a sus amigos como núcleo familiar, mencionando a Tía Carol y todo, es divertido y entretenido.
Aunque hay algo que me llamó mucho la atención y es la agresividad con la que vi a Jessica, ya sea por proteger a su bebé o por cómo avanzó la trama del número, lo encontré interesante. El arte de Javier Rodríguez sigue sacando aplausos y más todavía en las escenas de acción, donde el movimiento es súper fluido y bonito. Siempre es agradable ver cómo le sacan la madre a los skrulls.
Si bien no es mejor que el número anterior, es una buena continuación.
Me gusta esta Jessica, empoderada, viendo el bien de su hijo por sobre todas las cosas y mandando al carajo a los skrulls, como se debe. La pelea telefónica con Carol es tierna, es como «Vente ahora, por tu culpa estoy acá, tu sobrino te necesita» pero termina abruptamente con el fin del número y la incógnita… ¿Cómo saldrá «mamá» de esta?
THE AMAZING SPIDER-MAN #005
Supongo que en algún momento tenía que pasar. Dan Slott saca a relucir sus verdaderas mañas en este número, el que es sin duda el más bajo de los 5 publicados después del reinicio. Y por varios motivos.
Creo que es primera vez que veo a un Peter Parker al que se le empiezan a escapar las cosas de las manos. Y no lo digo tan solo por la situación en África, sino que por cómo soluciona las cosas y cómo maneja las discusiones con la gente que interactúa en este número. Por otro lado, estoy echando de menos lo clásico, el Peter de antaño; siento que el cambio del statu quo quizás fue positivo y se veía bien en los primeros números, pero ahora se están desenredando muchas marañas típicas de Slott que marean al lector. Si querían hacer cambios y que se rompieran esquemas, creo que este no era el camino, se siente raro, o poco natural.
No estoy diciendo que sea el peor cómic del universo o de la semana, de hecho, el monólogo interno de Peter lo confirma como un personaje fuerte, y su crecimiento como tal es evidente. También me gusta las relaciones formadas, son interesantes y justifican el cambio y la industrialización de la visión superheroica de Peter/Spidey, pero Slott, explícame por qué mierda siempre pones a un superhéroe pegándole así sorpresivamente a otro.
Zodiac quizás no fue el mejor ente villanesco para Spidey, sobre todo por como terminaron las cosas en Londres, quizás priorizar a Scorpio desde un principio hubiera sido ideal.
Slott, te doy este número de beneficio para que arregles lo que debes.
Get your shit together.
DAREDEVIL #002
Me gusta mucho este nuevo run de Daredevil. La forma en que se cuenta la historia, el paralelo entre Matt Murdock y el villano, jugando con la coloración y cruzando la historia, es sublime. Tenfingers es un villano a tomar en cuenta, Charles Soule se arriesgó a darle un nuevo enemigo a Daredevil, lo dota de carisma y lo presenta como un verdadero rival.
La dinámica entre Daredevil y Blindspot es excelente. Tal como en el primer número, ver a Matt siendo un maestro, comportándose como Stick frente a él, es avanzar en su historia y personaje. Y de nuevo destaca el tremendo arte de Ron Garney, sin tintas y con muy pocos colores, jugando con tonalidades de rojo, gris y negro. Un estilo propio y con atmósfera única.
Además de esto la historia es interesante, el ritmo es rápido, todo funciona bien. Un gran regreso de Daredevil a lo oscuro, donde sabe desenvolverse.
VENOM: SPACE KNIGHT #002
Flash Thompson es un personaje bastante atractivo. Un ex-soldado que perdió sus piernas en servicio, tomó el manto de Venom para hacer el bien mientras luchaba con su alcoholismo. Hoy, como miembro de los Guardians of the Galaxy, viaja a través del cosmos ayudando a todo aquel que lo necesite. Un tipo de buen corazón, humilde, siempre dispuesto a ayudar. Robbie Thompson logra transmitirnos su simpleza en este par de números, ahora dándole una nueva misión hasta ahora sumamente ambigua.
Esta vez nos explican un poco más el tema del Agente del Cosmos, pero de forma muy superficial. Lo interesante es que lo hacen un par de seres que también portan simbiontes, o como les puso Bendis en Guardians, Klyntar. Pareciera que lo del Agente del Cosmos está vinculado con la naturaleza pacífica de los klyntar; me pregunto si habrá mayor explicación al respecto a futuro… eso espero, de lo contrario sería sumamente anticlimático.
Una vez más Ariel Olivetti impresiona en cada viñeta. Su nivel de detalle y realismo es increíble, aunque a ratos le juega en contra con figuras un tanto estáticas. Pero cualquier problema lo compensan sus extraterrestres, tan expresivos como se puede.
Sigue sin impresionarme, pero hasta ahora me está agradando esta nueva serie. Solo espero que de a poco crezca en ambiciones y se atrevan a algo que salga de lo usual, entonces valdrá realmente la pena.
STAR-LORD #002
Tal como dije en el número anterior, tenía mis reparos ante esta serie. Ya tengo claro que Star-Lord ya no es el mismo personaje del que me enamoré en Guardians of the Galaxy de Dan Abnett y Andy Lanning, así que esta vez venía con una disposición más abierta. Lo único que le pedía a la serie es que fuera entretenida, con buenos diálogos, una trama atractiva y personajes interesantes. Hasta ahora, ha cumplido.
Peter se robó una nave espacial de la NASA y quedó varado en el espacio; mientras intenta reparar la nave es atrapado por los Ravagers de Yondu, así que tendrá que arreglárselas para mantenerse con vida frente a estos piratas espaciales.
Absorbiendo cada vez más elementos de su versión cinematográfica, Peter Quill poco a poco queda finalmente definido como personaje. Debido a sus orígenes editoriales fuera de la continuidad oficial de Marvel, desde que fue incorporado a Earth-616 su historia ha sido retocada cada vez que se ha visto abordado. Esta vez mi deseo es que esta historia de origen sea la definitiva, al menos parece que Sam Humphries construirá unos cimientos sólidos y llevará la trama a buen puerto, puede resultar en una buena lectura y hasta ahora se nota que es una historia que realmente tiene ganas de contar.
Otro punto interesante en este número es Yondu. Nuevamente inspirado por su contraparte cinematográfica, este no es el mismo Yondu Udonda de los Guardians of the Galaxy originales, ni debería; en cambio, se atisban ciertas marcas únicas, como la razón tras su cresta corta y su historia como pirata.
Pero independiente de cómo resulten finalmente los guiones, lo que no defraudará será el arte de Javier Garrón. Dinámico, expresivo, detallista, preciso, con personalidad, lo que le pidan este español lo tiene. Sobre todo, tiene una habilidad natural para retratar a personajes jóvenes reflejando de forma correcta su edad, algo que es realmente difícil de encontrar. Garrón llegará muy lejos, tiene el mismo potencial que Russell Dauterman, y ya lo vemos a este último ilustrando The Mighty Thor. Hasta que nos quiten a Garrón para alguna otra serie de mayor perfil —RUEGO que no sea para una de Bendis—, sepamos disfrutar lo que está haciendo aquí —y lo que hizo en Cyclops, a pesar de los guiones flojos—.
De verdad me está gustando la serie, estoy gratamente sorprendido hasta este punto. Ojalá siga así.
DARTH VADER #014
Ya llevamos 4 de 6 capítulos del crossover «Vader Down», y hemos avanzado muy de a poco en la trama general, fuera de lo que fue el primer número. Al parecer es más importante la interacción entre los personajes de las diferentes series que la historia misma.
El encuentro entre Leia y Vader, que fue nuestro cliffhanger en la parte anterior, tiene algunos buenos momentos pero en términos generales decepciona un poco. Salvador Larroca dibujando a Luke, Leia y Han me incomoda, siempre se le critican sus foto referencias y aquí se le nota demasiado. No se sienten nada naturales, sólo una imitación de expresiones de los personajes.
El número prepara muchas cosas, pero para desarrollarse más adelante. Chewie y Han tienen un encuentro con alguien que habíamos olvidado desde el primer número de Darth Vader. También, una trama que se desarrollaba en esta serie choca con el crossover. Ahora sí que sí, los que solo leen Star Wars estarán muy perdidos, lamentablemente para este evento es necesario haber seguido la serie del Lord Sith.
En fin, movimiento de piezas, algunos interesantes momentos, pero poco avance general. Hasta la próxima.