"Star Wars: Rebellion" (1998)
En el mundo de los videojuegos, Star Wars ha tenido una destacada participación. Más allá del éxito en el cine, George Lucas supo ver una interesante beta en este medio, donde la calidad de estos títulos son bastante buenas y la innovación en los primeros años de la franquicia fue una de sus claves. Escoger uno solo es difícil, la calidad y el género de los mismos son variados y bastante destacables. Habiendo dicho esto, siempre me han gustado las propuestas que tienden a salirse del molde tradicional y en su época Star Wars: Rebellion fue una de esas ellas.
Situado justo después de los hechos A New Hope, el juego pertenece a un género de estrategia bastante poco explotado, el de las 4X (eXplore, eXpand, eXploit and eXterminate) y donde podremos usar tanto al Imperio como a la Alianza Rebelde.
En el bando del imperio dispondremos de todas sus unidades, las más conocidas y otras no tanto, además de tener a nuestro lado a Darth Vader y el Emperador Palpatine. En el lado rebelde estarán los x-wings, tropas de asalto, el Millenium Falcon y por supuesto: Mon Mothma, Luke Skywalker, Han Solo, etc.
La clave para ganar es dominar por completo la galaxia y capturar a personajes claves en cada alianza: Vader y Palpatine en el imperio, Mon Mothma y Luke en los rebeldes. Para esto, debemos gestionar recursos donde nuestro bando sea más influyente.
Si tenemos un planeta bajo nuestra influencia podremos acceder a sus recursos, construir naves, reclutar personajes o ocuparlo de refugio para nuestros personajes.
Para hacernos con algún planeta tenemos varias vías: si el planeta ya está dominado por el enemigo, podemos iniciar revueltas y hacerlo inestable o enviar una flota de naves y eliminar emplazamientos enemigos. Si el planeta es neutral podemos enviar en misión a algún personaje que tenga cualidades diplomáticas y aumentar la influencia de nuestro bando.
Ese es otro aspecto interesante, además de los personajes que poseemos de un principio, podemos reclutar otros. Cada personaje tiene una habilidad particular que puede ser explotada: Palpatine es un excelente diplomático y Vader es un excelente “busca talentos”, por lo que es clave saber ocuparlos en sus respectivos roles. Claro que enviar en misión a algún personaje implica riesgos como el ser capturado por el enemigo. Ahí solo depende nuestra cautela e inteligencia.
Todo esto hay que hacerlo en tiempo real, por lo que también hay que tener una buena planeación. Por ejemplo, construir la Death Star lleva una considerable cantidad de días (en el juego, claro), pero además tienes que reunir los recursos para poder siquiera pensar en construirla, por lo que el tiempo es aún mayor. Pero, si la llegas a tener, el sistema donde la coloques, caerá rendido a tus pies. Todo es una relación de tiempo y recursos a los que hay que estar muy atentos.
En el caso de nos encontremos en un planeta ocupado con naves enemigas, podremos enviar nuestras flotas y habrá un enfrentamiento. Aquí todo cambia a una interfaz 3D donde podremos dar órdenes a cada nave, o simplemente podremos dejar que la computadora simule el resultado si es que no estamos tan interesados en este aspecto del juego.
Dada la cantidad de información que hay que manejar –planetas, tropas, naves, personajes y un largo etc – el juego viene integrado con una completísima enciclopedia, ya sea para sacarnos de algún apuro, como para simplemente aprender más del universo de Star Wars.
La verdad es que el juego me encanta. Sobre todo por la cantidad de información que maneja, que te mete aún más en el universo de las películas. Si bien no fue tan popular en su época, es toda una pieza de culto que nunca está de más probar. Aún puede ser adquirido en GOG por poco dinero. Dénle una oportunidad.