Mi Historia con Locke & Key
Conocí Locke & Key en el 2013, durante la FILSA —Feria Internacional del Libro de Santiago— de ese año, y desde ese momento me volví fanático de la historia. Recuerdo que en ese momento Arcano IV llevaba publicado los 2 primeros tomos —"Bienvenido a Lovecraft" y "Juegos Mentales"— y tuve la oportunidad de hojearlos en el stand en que se encontraba la editorial. Lo que me atrajo a primera vista fueron los dibujos de las portadas e interiores, sobre todo después de ver unas cuantas viñetas, donde la sangre era la protagonista indiscutida.
“Es una historia de terror y misterio”, me dijo quien atendía el stand.
“Buena”, respondí sin ponerle mucha atención.
“Está escrita por Joe Hill y dibujada por Gabriel Rodriguez, un chileno”, me dijo, mientras hojeaba ambos tomos. La verdad nunca pesco mucho a los vendedores, porque obviamente te tratan de convencer de comprar algo que al final puede no resultar tan bueno como lo pintan.
Dejé los tomos en su lugar y continué recorriendo los demás stands. El nombre de Joe Hill me quedó dando vueltas en la cabeza, pero como nunca he sido bueno para los nombres, quizás había leído algo de él pero en ese momento no lo recordaba. Hasta que la respuesta apareció como un rayo: "el hijo de Stephen King”…
Siempre me ha gustado Stephen King. Siempre me han gustado las historias de terror, más aún si mezclan misterio y cosas sobrenaturales, así que por qué no darle una oportunidad, si la historia no me gustaba después podía revenderla y recuperar algo de plata. Así que seguí recorriendo la FILSA, visitando otros stands donde habían cómics y tentándome de comprar otras cosas, pero siempre con los tomos de Locke & Key en mente, mal que mal los dibujos eran buenos y se notaba que la historia era verdaderamente cruda y de terror, además en esa época los superhéroes me tenían algo cansado y quería alejarme un poco de ellos.
Era momento de irme y volví al stand de Arcano IV, tomé el primer tomo y lo volví a hojear por un momento para convencerme aún más de llevarlo.
“Me lo llevo”, le dije al vendedor.
“¿Va a llevar solo el primero?”, me preguntó. Maldito vendedor, no había pensado en si llevar uno o los dos, solo pensé en llevarlos... así que lo analicé un poco, toqué mi bolsillo y me di cuenta que tenía suficiente dinero para llevar ambos pero no podría comprar nada más; sería un salto de fe para aventurarme a comprar una historia que no conocía.
“Deme los dos”, respondí, ya que si la historia resultaba ser buena me iba a arrepentir por no haber comprado el segundo al tiro, y si resultaba ser mala igual sería un plus vender ambos tomos juntos —sí, soy muy analítico y la mayoría de las veces antes de dar un paso lo pienso 10 veces—.
No recuerdo cuánto me costaron, pero luego de recibir el vuelto le di las gracias al vendedor y este me dijo que Gabriel Rodríguez vendría mañana, así que podría aprovechar para que me los firme.
“Ahí veo“, creo que le respondí y emprendí rumbo a mi casa con mis dos tomos de Locke & Key.
No pude leerlos sino que hasta el otro día y cuando lo hice los encontré realmente maravillosos y quedé con ganas de seguir leyendo más y más de los hermanos Locke. Al final del tomo dos decía que la historia continuaría en “Corona de Sombras” pero aún no habían noticias de cuándo se publicaría. No fui a la FILSA al otro día y por lo mismo Gabriel Rodríguez no pudo firmarme los tomos.
No fue sino hasta la FIC —Feria Internacional del Cómic— del año siguiente en que pude finalmente conocerlo en persona y que me firmara mis tomos, los cuales había leído y releído innumerables veces para hacer menos angustiosa la espera del tercer tomo, ya que no había querido continuar con la historia hasta tenerla en mis manos. Tenía absoluta fe en que la calidad no decaería. Temblorosamente le di las gracias por ayudar a crear este grandioso cómic y que para mí era emocionante conocerlo y que firmara mis tomos. Ese día volví muy contento a mi casa.
Pasó el tiempo y el lanzamiento del tercer tomo, “Corona de Sombras”, finalmente llegó, pero por diversos motivos no pude ir y me sentí mal por no haberlo hecho. Debido a eso decidí que ya había esperado mucho tiempo para continuar con la historia y bajé el resto de volúmenes en .cbr para leerlos digitalmente, total tarde o temprano terminaría comprando todos los tomos pero me inquietaba no conocer qué pasaría con los Locke.
Leí los 4 volúmenes restantes en una noche y cada vez quedaba más sorprendido por lo que leía y veía, convenciéndome cada vez más de tenerlos en papel. No fue sino hasta el lanzamiento del cuarto tomo, “Las Llaves del Reino”, durante un lluvioso sábado —me gusta la lluvia y por eso recuerdo los días lluviosos— que pude obtener el tomo 3 y, por supuesto, el 4. Durante el lanzamiento hubo una pequeña charla, donde participó Miguel Ángel Ferrada, editor de Arcano IV, Gabriel Rodríguez y una chica de un sitio web que hacía de interlocutor entre ellos y el público.
En la charla se dijeron muchas cosas, pero lo que más recuerdo es que se hablaron de los extras que contenía la edición de Arcano IV y lo que la diferenciaba de las demás ediciones de Locke & Key. Yo lo había comprobado semanas atrás, cuando en un recorrido por una tienda me topé con la edición de Panini que, si bien no era mala, personalmente prefería la chilena, ya que además contaba con la ayuda del mismo Gabriel Rodríguez para afinar detalles tanto en la traducción como en la parte gráfica.
Durante ese lanzamiento también tuve la oportunidad de hablar con Miguel Ángel Ferrada y agradecerle por el gran trabajo que estaban haciendo al editar Locke & Key en Chile, ya que sabía que a pesar de que las ventas no iban del todo bien, él no descansaría hasta terminar de editar la historia de forma íntegra y completa. Nuevamente volví a mi casa contento y con mis dos tomos firmados.
El tiempo pasó, hasta que hace unos meses me enteré del lanzamiento del tomo 5, “Engranajes”. Estando un paso más cerca del final, ahora era más claro que nunca que de alguna u otra forma Arcano IV editaría completamente Locke & Key. Como tenía el dinero preferí asegurarme y comprarlo en preventa junto con “Abre la Luna”, ya que a pesar de no haberla leído siempre había escuchado buenas críticas sobre ese one-shot.
El día llegó y fui al lanzamiento en el Taller Holanda, un lugar algo pequeño pero bastante acogedor, donde sin duda me encontraría con más fanáticos de Locke & Key. Al igual que los demás tomos de Arcano IV, “Engranajes” se diferencia del resto de ediciones en español no solo por la calidad y formato sino que por el contenido, incluyendo los planos de Keyhouse gracias a los cuales —y si los astros están de su lado— cualquiera podría algún día hacer su propia mansión.
Es notorio el esfuerzo y cariño que le han puesto por llevar hasta nuestras manos algo realmente bueno, rompiendo un poco con eso de que solo basta con una buena historia. Personalmente creo que una buena historia se potencia aún más con una buena edición, y no me refiero a tener una portada enchapada en plata y con hojas de oro, sino que cuidando hasta el más mínimo detalle como es en este caso, la traducción sin duda es de gran nivel, procurando mantener la intención original pero también volviéndolo accesible a todos los lectores. Los extras que incluye cada tomo, como la galería de cabezas en “Juegos Mentales”, la galería de sombras en “Corona de Sombras”, la galería de llaves en “Las llaves del Reino” o los anteriormente nombrados planos de Keyhouse en “Engranajes” ayudan a complementar la lectura, familiarizarse con los personajes y salir un poco del 2D del papel.
Luego de una pequeña fila llegó mi turno y pude conversar unas pequeñas palabras con Gabriel Rodríguez además de que me firmara “Engranajes” y “Abre la Luna”. Por tercera vez volvía muy contento y con mis dos cómics —un tomo y una grapa— firmados a casa.
Y ahora estamos aquí. Arcano IV realizo una pequeña preventa especial del sexto tomo y final de Locke & Key: “Alfa y Omega” para todos aquellos que han participado en las anteriores y han seguido fielmente esta saga, incluyendo una gran sorpresa (pueden leerlo en sus propias palabras AQUI) y no puedo estar más emocionado por eso. Es el cierre de algo que, si bien vengo esperando por poco tiempo —2 años—, ha sido bastante intenso.
Conozco el final de la historia, sé lo que ocurrirá con los personajes y el destino que les espera a los hermanos Locke y su familia, pero no por eso es menos emocionante esperar tener el sexto tomo en mis manos y leerlo. Aun no está confirmado el día que será el lanzamiento, pero yo ya tengo asegurado mi tomo de “Alfa y Omega” —junto con la caja *cof cof*— para que me lo firme Gabriel Rodríguez y regresar a casa muy muy contento.
Para los que ya compraron el libro en preventa y son de Santiago, espero verlos ese día en el lanzamiento. Para los que aún no lo hacen, no desesperen, pronto Arcano IV abrirá otra preventa y podrán asegurarse con su tomo, solo tiene que estar atentos a su fanpage e inscribirse en su página web para estar al tanto de las últimas novedades.