Mangapolis - 'Solanin' de Inio Asano
Estoy desde hace un mes cesante. Fue una decisión que me costó muchísimo tomar porque ha sido mi primer trabajo, el cual era muy cómodo (hacía muy poco la verdad) y quedaba cerca de casa. Sí, sé que este no es mi blog personal, pero el manga que les presento a continuación parte con esta premisa.
Nuestra protagonista está aburrida de su trabajo. Está en algo que no es lo que le gusta sólo para ganar dinero, pero ya no da más de la costumbre. Su novio, con quien vive y a quien prácticamente mantiene debido al poco sueldo de éste, la apoya e incita a renunciar. Desde ahí en adelante no sólo la vida de la pareja cambiará, si no también la de quienes les rodean, así como sus destinos.
ソラニン Soranin | Solanin
Guión y dibujo: Inio Asano
Años de publicación: 2005 - 2006
Cantidad de volúmenes: 2
Cuando Meiko entrega su carta de dimisión no piensa en qué hará a futuro. El dinero de sus ahorros le alcanza para vivir perfectamente por un año, así que se tomará un tiempo de libertad para pronto ver qué hacer. Sin embargo, como era de suponerse, al cabo de unos días ya se encuentra aburrida. Sigue en el círculo de la monotonía, pero ahora sin hacer nada productivo. Taneda, su chico, trabaja en una empresa de Diseño como ilustrador, obteniendo muy mala paga, y además de esto tiene una banda con su grupo de amigos, por lo que Meiko está sola en el apartamento durante gran parte del día.
El grupo de jóvenes está compuesto por Taneda como guitarrista y vocalista, Kenichi Kato en el bajo y Jiro "Billy" Yamada en la batería, además de la novia de Kenichi, Ai y Meiko, novia de Taneda, quienes, bueno, no son parte de la banda, pero que están junto a ellos acompañándolos desde los inicios de la Universidad, donde todos se conocieron.
La banda no se ha separado y siguen teniendo ensayos y una que otra pequeña tocata a pesar de que ya todos tengan menos tiempo debido a sus trabajos o continuación de estudios, pero hay algo que a Taneda le sigue incomodando y no le deja seguir el camino como si nada: Necesitan ir más allá antes de que la oportunidad pase. Deben promocionarse, grabar algún demo, y en el fondo, moverse para hacer algo grande y notarse dentro de la industria. Razones suficientes para que ahora sea Meiko quien le brinde ánimos y así él deje también la empresa para dedicarse 100% a la música, su sueño de toda la vida.
El tema es, ¿Podrán cumplirlo? ¿Podrá Taneda sentirse pleno y completamente satisfecho con su trabajo, obteniendo el reconocimiendo deseado?
Con mucha similaridad al manga de BECK debido a ser sobre una banda de rock de jóvenes que buscan salir del sitio donde ensayan y a los alti-bajos que deben pasar para lograrlo, así como la mezcla de la amistad y el amor con este tema, Solanin es sin embargo un tanto más crudo que el ya mencionado. Más realista y maduro, quizás porque los protagonistas son también mayores, o porque desde ya sabemos que las historias de Inio Asano suelen ser así, sobre la vida cotidiana, pero llena de dosis de pesimismo y malos presagios, pero también movidas por mucho esfuerzo.
En cuanto más creamos que la felicidad plena será alcanzada y que nuestros protagonistas al fin han dado pasos importantes para poder surgir en lo que realmente les apasiona, Asano nos tomará por las alas y nos azotará contra el piso. Si bien puede ser algo frustrante en algunas ocasiones todo tiene un motivo para continuar la historia con un limpio guión y con muchas más ganas por parte de los chicos en cuanto a esta meta que se han propuesto.
Solanin es sin duda uno de los mangas más simples de leer de este mangaka, pero esto lo acompaña con aquellas ilustraciones de fondos tan detalladas que te dejan boquiabierto, aunque no tan impresionantes como las que nos mostrará posteriormente en Umibe no Onnanoko, tanto por un tema de experiencia como también porque la situación no lo amerita.
Pero así como es fácil de comprender (contrariamente a Nijigahara Holograph) es también el que probablemente más les toque la fibra sensible del corazón debido a las tantas situaciones que suelen ocurrirnos normalmente.
No sólo veremos la historia de Meiko y Taneda, cómo se conocieron y cómo llegaron a estar juntos, si no también nos haremos partícipes de la complicidad de ambos, de la confianza en pareja y de lo importante que es apoyarse mutuamente incluso en las situaciones más difíciles. También seremos parte de los problemas de Kato, el único que aún no ha logrado salir de la Universidad y de Ai, su novia con la cuál puede entrar quizás a una crisis por factores ajenos. Mientras tanto, Billy, el soltero de la banda, tipo que luce rudo pero es sin duda el de más noble corazón, quien casi siempre se muestra muy carismático y divertido, esconde una serie de sentimientos que lo afectan bastante en sus momentos de introspección. Él además nos enseñará vagamente a un anciano que sigue amando a su mujer hasta el fin de los tiempos, algo sin relevancia en el relato de la historia principal, y que a pesar de poseer viñetas mínimas nos hará caer en la ternura y a la vez soledad de manera demoledora a los más sensibles, pues en pocas y sencillas imágenes caeremos en lo que es el ciclo de la vida, en lo que sí o sí pasará en algún momento y que no quedará más que afrontar.
Al igual que varios de los mangas que ya he reseñado en esta sección, Solanin cuenta con una película del tipo Live-Action.
Estrenada el año 2010 y bajo la dirección del en ese entonces novato Takahiro Miki, es una representación bastante fiel al manga. No vamos a decir que es fantástica, pero cumple su objetivo y logra entretener así como emocionar si te conectas con la historia. Además cuenta con la participación de Aoi Miyazaki, actriz muy recordada por su papel en la película del manga NANA, y tenemos nuevamente a Kenta Kiritani, de quién les hablé en la entrada de BECK por su memorable papel como Chiba, quién esta vez nos enseña su destreza como baterista al interpretar a Billy. Porque si hay que destacar algo de muchos live-actions japoneses es que hacen que la mayoría de sus actores toquen realmente los instrumentos, o canten cuando es necesario.
Siguiendo con el formato manga, podemos encontrar en nuestras comiquerías nacionales esta obra gracias a los Españoles de Norma Editorial, a un valor que ronda los $18.000. Ésto porque Norma ha decidido unir ambos tomos japoneses en sólo uno, para así brindarle una lectura fluida al lector. Y si bien el tomo es muy grande y pesado, por lo tanto incómodo para andar leyéndolo en todas partes, este es uno de los mangas que debes continuar enseguida terminas el primer tomo. No sé cómo lo habrán hecho los Japoneses para aguantar semejante espera ante la salida del tomo dos, pues yo me desesperé un tanto al ver que el número de estreno acababa de esa forma. Sin duda alguna si tienen Solanin en sus manos querrán continuarlo de golpe.
Sobre la calidad no hay mucho que decir. Ya se ha mencionado en la entrada anterior el gran prestigio de esta editorial dentro del mundo de las novelas visuales, y que no te hace sentir que desperdiciaste el dinero una vez lo tienes en tu poder. Otra cosa a favor desde mi punto de vista es la linda ilustración que han elegido para la portada, ya que las de los tomos nipones nunca fueron de mi agrado debido a la gran cantidad de tonos marrones que le hacían un tanto aburrido y poco atractivas, (Para los curiosos, la imagen para la versión en castellano es la misma que he puesto como cabecera en este review.)
¿Ya leyeron el manga o han visto la película? Si no, se los dejo como obligación. Podrían aprovechar de conocer también a la banda que compuso el tema original del film, canción fiel en cuanto a letra a la que inventó Inio Asano para poner en su manga. Y les digo que aprovechen de hacerlo ahora porque ASIAN KUNG-FU GENERATION viene a Chile en Noviembre, así que, ¿Por qué no vamos a escuchar el tema "Solanin" todos juntos ese día? De seguro no sólo yo soltaré un lagrimón si logramos oírla en vivo.
Así que ya sabe, si quiere comenzar a leer algo de este genial autor, le recomiendo partir por aquí.