Entrevista a Marco Rauch, editor de Mythica: «Nunca hubo un boom del cómic chileno»
Continuamos con las entrevistas realizadas el 28 de febrero en el evento Un Día de Comic en tu Barrio realizada en el barrio Lastarria. Ahora es el turno del editor de Mythica Ediciones, Marco Rauch, quien nos cuenta acerca de los inicios de su carrera como editor, del proyecto de Zombies en La Moneda y el actual estado del mercado del comic en nuestro país. Además nos cuenta de su faceta como guionista.
Dentro de su carrera como editor ha sacado al mercado títulos como Acceso, Celeste Buenaventura, Manuel de Fuentesanta, E-Dem, Zombies en La Moneda, La Mano Izquierda, Corazón de Tinta o Mundo Mágico.
Agradecemos a demás el tiempo que nos dedicó para responder las siguientes preguntas. Como siempre, están invitados a comentar y dejar su opinión acerca de esta entrevista.
Fotografías por Francesca Richardi
Ignacio Núñez: ¿Hace cuánto que estás dedicado a la edición de cómics?
Marco Rauch: Ya hemos cumplido 5 años.
IN: ¿Qué es lo que te motivó a hacerlo y hace cuánto que eres seguidor de los cómics?
MR: Bueno, yo soy de la generación Mampato. Yo aprendí a leer con esa historieta, entonces a partir de ahí ha crecido esa pasión, primero por leer historietas, cuando más joven por hacer historietas hasta los 18 años más o menos. Después el trabajo me llevó a otras cosas, me alejé un poco de las historietas y el año 2007 vi gente que en Chile todavía intentaba que la historieta sobreviviera o renaciera, me entusiasmaron y eso ya es historia.
IN: Con Mythica ustedes se hicieron muy conocidos con Zombies en La Moneda. ¿Cómo fue que se llegó a producir ese proyecto?
MR: Zombies en La Moneda nació en un foro que se llama Ergocomics, un foro donde se reúne o se reunía mucha gente relacionada con el cómic, tanto fanáticos como gente que hacía historias, y empezamos así como por talla a hablar de la muerte del cómic chileno y el renacer del cómic chileno, empezaron a surgir ideas de cómo empezar hacer que la gente se entusiasmara por leer cómic y comenzamos a hacer propuestas y de repente uno de los artistas que dio la idea, Genzo, él fue uno de los que empezó a decir "¡hagamos algo con farándula, con política!", "¡con zombies!", dijo uno.
Entonces cuando apareció la mezcla de zombies con política, ese fue Gonzalo Artiagoitía quien dijo "Zombies en La Moneda". El nombre ya pegó, la gente en el foro se comenzó a entusiasmar, empezaron a generar ideas y yo me fui dando cuenta que había un potencial grande ahí. De a poquito empecé a ver a la gente que estaba hablando en serio del proyecto. De los que estaban en la talla armamos un grupo de guionistas, un grupo de dibujantes - eso fue por ahí por el año 2008-2009 - y desde ahí ha sido una muy buena experiencia, ya llevamos 5 tomos, en los cuales han trabajado más de 30 artistas y hemos vendido más de 8 mil ejemplares. Es un producto muy reconocido dentro del mercado pequeño que tenemos.
IN: El comic de Zombies en La Moneda se caracteriza mucho por hacer sátira a la sociedad y creo que más específicamente a la clase política. ¿Han tenido algún problema respecto a satirizar la política dentro del cómic?
MR: Afortunadamente no. En todas las portadas que sacábamos a la calle aparecían políticos, aparecían personajes sociales, sobre todo en las que dibujaba Eduardo de la Barra. Todos los políticos eran caricaturizados en forma bastante risible y no tuvimos problemas, e incluso llegaron comentarios al contrario de lo que pensábamos, que habían algunas personalidades que se veían retratadas en el cómic y les gustaba. Entonces parece que en aquellos años había cierto tipo de apertura y a la gente le gustó precisamente eso, porque nosotros no nos abanderizábamos, no nos cargábamos ni para derecha ni para izquierda, le pegábamos el palo a todo el mundo. Entonces por ahí el producto tenía cierto equilibrio y eso nos protegió de que no nos acusaran de que estábamos apaleando a un puro sector. Nunca tuvimos problemas de censura, querellas o cosas así.
IN: ¿En qué proyectos están interesados para sacar en este momento?
MR: Bueno, en la actualidad estamos tratando de sacar la 4ª edición del recopilatorio de Zombies en la Moneda: Saga en Santiago, porque con el beneficio de esa 4ª edición vamos a financiar el tomo 6 y final de Zombies en La Moneda, además estoy escribiendo el 2º tomo de Celeste Buenaventura, una obra de la cual soy autor. El primer tomo fue dibujado por Gonzalo Martínez y este segundo tomo será dibujado por Rodrigo López. A Celeste Buenaventura le tengo mucho cariño, le ha ido muy bien a nivel colegio, lleva tres años en los colegios y los mismos alumnos y profesores me escriben, me preguntan cuándo saldrán más aventuras. Entonces encontré un espacio de tiempo para escribir.
Estamos sacando el tomo 6 de Zombies en La Moneda, el tomo 2 de Celeste Buenaventura y vamos a apoyar un par de proyectos más que todavía están muy en barbecho que todavía no quiero anunciar públicamente.
IN:¿ Y cuáles son sus metas como editorial?
MR: Básicamente conseguir que más gente lea cómic, porque cuando conversamos con gente del medio yo siempre soy como el pájaro de mal agüero. Porque se hablaba del boom del cómic chileno y yo digo que nunca hubo tal boom.
Lo que pasa es que hubo un pequeño estallido de que se publicaba mucho y todo el cuento de que logramos algunas portadas, pero eso nunca se reflejó en la cantidad de masa crítica que un producto necesita. O sea, no podemos hablar de un boom porque en Chile ningún libro que venda menos de 3 mil ejemplares es considerado éxito. No se financia con menos de 5 mil, 3 mil ejemplares vendidos, yo no conozco ningún producto de cómic que logre sobrepasar los 5 mil lectores. Eso es lo que hace que aun no sea un negocio rentable, pero yo tengo la esperanza que lo logremos, mi meta de ahora es conseguir más de 5 mil lectores.
IN: ¿Tú crees que hay potencial para conseguir más lectores de cómic? ¿Crees que tal vez falta algún esfuerzo en lo que es el marketing, o tal vez es la misma calidad del producto chileno que invite a que lleguen más lectores? Sabemos que el cómic sigue siendo un medio desconocido para muchas personas, así que, ¿cuáles crees que sean los medios para hacer que el cómic se vuelva más popular y que la gente lo conozca más?
MR: La formula más tangible que yo he visto es básicamente apoyo de una editorial grande, por ejemplo el éxito que tuvo Mocha Dick [editado por Norma] habría sido distinto si Mocha Dick hubiese sido editado por una editorial pequeña como Mythica.
Mythica no tiene la capacidad que tiene una editorial grande de generar mucha difusión, entonces lo que más hace falta es eso, capacidad de inversión y de difusión en un producto de cómic. Que cualquier cómic pueda estar en cualquier cadena de librerías, con pósters, en prensa, eso solo lo puede lograr una editorial grande. Entonces un camino sería que las editoriales grandes reconozcan el potencial, que así como Mocha Dick es un producto bueno hay muchos otro productos buenos, títulos que yo he editado o que no he podido editar por temas de recursos, que han sido captados por editoriales grandes. El factor principal sería mucha más difusión. Porque la gente todavía asocia el cómic con "revista de monitos" y es mucho más, pero las herramientas que tiene una editorial pequeña son limitadas y necesitamos mayor inversión en difusión, ya sea que nos ayudemos nosotros los chicos o que una editorial haga lo que hicieron con Mocha Dick por ejemplo.
IN: ¿Tienes unas últimas palabras que quieras decirles a nuestro lectores de El Multiverso 52?
MR: Básicamente quiero decirle a la gente que el cómic no es solamente una herramienta de entretención, sino también de aprendizaje, de cultura y ojalá que la gente empiece a distinguir, primero que tenemos una enorme cantidad de artistas e ilustradores como guionistas capaces de hacer muy buenas historias, y que la gente además empiece a valorar lo que estamos haciendo y entienda que la historieta es mucho más que "revista de monitos". Es una forma de entregar cultura y entretención.
Entonces el mensaje sería ese, que cuando hayan ferias como esta u otro tipo de eventos donde hayan cómics, la gente vaya y no solamente compre sino que converse, se informe y se entere del enorme esfuerzo que hay detrás de todos lo que hacemos cómic para que esto realmente funcione. Necesitamos el apoyo básico, que es el del público.