MV52 2.0 – Guionistas Nº22-19
¡Seguimos con la lista de guionistas! Si se los perdió estando en un universo paralelo, acá tienen los guionistas 26 a 23 y acá los dibujantes 26 a 23.
Nuevamente, gracias a todos los que votaron e hicieron esta lista posible.
Hoy vamos con cuatro grandes muy diferentes: Stan Lee, Matt Fraction, Kurt Busiek y Alejandro Jodorowsky.
N°22 - Stan Lee
Reseña: Judith
Lugar: 20 (empate con 4 votos)
“¿Y qué va a pasar cuándo se muere Stan Lee?” me decía un amigo un día después de que falleciera Leonard Nimoy. “La cagá’ no más”, le respondí. Porque hasta el niñito que nunca ha tomado un cómic en su vida, debe cachar algo al viejito que sale en cameos en tantas películas de superhéroes. Típico en el cine, esa escena en donde aparece parece como si fuera un secreto compartido entre todos los asistentes; quizás no sepan el nivel de envergadura en la que el viejito canoso está involucrado con lo que ven, pero si cachan que es alguien.
Más que mal, Stan Lee se encargó de crear a toda una mitología moderna, y no solo eso, sino que logró que prosperara económicamente –salvo por algunos momentos, nuff said-.
¿Qué más se puede decir de Stan Lee que no se haya dicho antes? –incluyendo los líos legales con otros creadores como Jack Kirby, que bien turbios son y dejan más que un poco mal parado a Stanley Lieber-. Para bien o para mal, el viejo Stan es el corazón de Marvel; no solo supo crear historias y personajes fuera del molde en una época en que los cómics podían caer precipitosamente o surgir de forma espectacular; supo también aprovechar el auge de la ciencia ficción en los sesenta, y por sobre todo, tuvo el ojo necesario para crear un negocio que solo se fortaleció con los años. Las habilidades administrativas de Stan Lee son una causa principal para que Marvel haya seguido adelante, al igual que su universo cohesivo, una idea que no se había repetido antes en tal magnitud.
Pero hablando de Stan Lee como guionista, debo confesar que lo primero que leí de Spider-Man cuando era pequeña, fue escrito por él. Se trataba de la historia ¡Qué verde era mi Duende! Esa donde nos enteramos que Norman, el padre de Harry es persona detrás del maléfico villano. El argumento era entretenido, y te dejaba con ganas de saber más sobre la tumultuosa vida de Peter Parker. Había romance de por medio, con Peter tratando de sobrellevar su vida universitaria con esto de andar en mallas. Lo primero que leí de Los Cuatro Fantásticos y otros superhéroes, también fue firmado por The Man.
Es que Stan Lee tiene un talento muy claro en poder hilar diversas situaciones y poner un poquito de humor, romance, acción y drama, además de saber serializar los eventos que desarrolla, eso de los arcos argumentales que puso de moda. En sus historias pillamos momentos de entretenida acción –como decía, cabe destacar todo su run en Amazing Spider-Man, que es una joyita-.
Stan Lee supo agarrar todo ese prototipo superhéroico y agregarle su semilla propia, dando inicio por medio de eso a la modernidad comiquera. La mayor parte de sus creaciones tiene el sello distintivo de su mano: personas con un claro sentido del humor, una línea moral que no llega a lo engorroso, y relaciones personales que sin caer en el total culebrón, te enganchan el interés. Si a eso le agregas la personalidad pública que ha sabido cosechar entre los seguidores acérrimos de Marvel, y los fans más casuales, puedes entender porque para muchos su rostro con anteojos de sol oscuros y su cabello canoso, es sinónimo de la casa de las ideas.
Por eso, cuando me dicen “¿Y qué va a pasar cuándo se muere Stan Lee?”, prefiero pensar que seguirá vivo en algún otro lado del multiverso no más.
¡Excelsior!
N°21 - Matt Fraction
Reseña: Kishin
Lugar: 20 (empate con 4 votos)
Ganador de varios premios Eisner y con una carrera ligada a Marvel este escritor ha sabido hacerse un nombre dentro del mundo de los comics. Dueño de un estilo que podría denominarse “camaleónico” con el cual ha sido capaz de darles nuevos aires a los personajes que han desfilado bajo su pluma.
El humor y/o las situaciones cómicas son algo frecuente en sus relatos en los cuales podemos encontrar desde relatos de la vida cotidiana pasando por críticas a la manera de tratar el tema de la sexualidad en nuestra sociedad hasta relatos de ciencia ficción impregnados de flashbacks con una narrativa no lineal. El desarrollo de sus temáticas suele ser bastante definido y con ciertos detalles o guiños a otros autores que hacen más amena la lectura.
Nos narró la estrepitosa caída y posterior resurgimiento de Tony Stark en Invincible Iron Man, saco a pasear por el espacio/tiempo a la primera familia súper heroica en Fantastic Four mientras un grupo de reemplazantes nos divertía y emocionaba en FF, revivió a un arcano dios para matar a otro rubio en Fear Itself y en palabras de muchos reinvento al arquero de Marvel mostrándonos que no son necesarios los trajes estrafalarios y los nombres rimbombantes en Hawkeye.
Pero no es solo en la casa de las ideas donde Matt Fraction brilla ya que también podemos encontrarlo en las editoriales independientes. La entretenidísima Sex Criminals y la interesante Ody-C son algunas de sus propuestas en este ámbito.
N°20 - Kurt Busiek
Reseña: Toripe
Lugar: 20 (empate con 4 votos)
¿Por qué nos gustan las historias de Busiek? Tal vez suene demasiado cliché, pero es básicamente que sabe sacar el lado humano en sus historias super-humanas. Y eso es todo.
Sabe como hacernos querer a los personajes, que nos importen, que nos podamos identificar con ellos. Por muy descabellada que sea la realidad en que se encuentren.
Probablemente su obra más conocida sea Marvels, en la que junto a Alex Ross, hacen una mirada al Universo Marvel desde el punto de vista de un ciudadano común, el periodista Phil Sheldon. Es increíble la labor que hacen, dando un sentido de universo compartido, de historia, de realidad. Eso es, realidad. Se siente como algo que pasó. Y claro, el arte de Ross ayuda.
Su historia Superman: Identidad Secreta, con el dibujante Stuart Immonen, es probablemente de las más bellas y humanas que se han escrito del personaje (perdón que me repita en lo de humano, pero es que es así!). Acá se recalca que para alcanzar un buen cómic de superhéroes no necesitas grandes explosiones, villanos complicados y poderosos, peleas cósmicas. Solo necesitas entender bien el personaje y saber contar una historia.
Y bueno, su obra más característica es sin duda Astro City, donde están todos los elementos que les mencioné del escritor. En este hermoso universo creado con Brent Anderson y Alex Ross, nos muestra una ciudad de superhéroes, pero acá las historias las puede protagonizar el mayor héroe de los tiempos, como un padre de familia, un periodista o un empleado de hotel. Tenemos lo extraordinario y lo humano. Y gran parte de las historias solo necesitan 24 páginas para contarse. Por favor, dale una oportunidad aunque sea al número 1. Te aseguro no te vas a a arrepentir.
Tiene varios premios Eisner y Harvey, pero dejémosle eso a wikipedia. Otros de sus runs famosos fue en Avengers junto a George Perez, que lamentablemente no he tenido el gusto de leer, dentro del que está el famoso cruce de JLA/Avengers.
Actualmente pueden seguirlo en la serie de Image The Autumnlands: Tooth & Claw. Lleva sólo 4 números y está excelente, para que se den una vuelta.
N°19 - Alejandro Jodorowsky
Reseña: oconowoc
Lugar: 15 (empate con 5 votos)
Hablar de Alejandro Jodorowsky es hablar de un tipo sumamente inquieto. Nacido en Tocopilla, no paso mucho tiempo para que emigrara a México y luego Francia, su patria adoptiva.
En México creo su primer comic, “Anibal 5”, personaje que retomaría en su etapa en Francia junto al dibujante George Bess, una vez que “Jodo” ya pertenecía a la casa de Humanoides Asociados, junto con otros guionistas y dibujantes especializados en el género fantástico y de ciencia ficción, vinculados a la revista Métal Hurlant. Aquí destacan obras de distinta temática y variada calidad.
Sin dudas, la más conocida es “El Incal” que creo con Moebius. Pero el carácter inquieto de escritor lo llevo por varios caminos y colaboraciones: Manara, Bess, Arno, Jiménez serían sus compañeros en variadas obras como Los Borgia, El Lama Blanco, Alef Thau y La Casta de los Metabarones.
Su estilo es único y bebe mucho de la doctrina psicomagica que profesa. El escritor se mueve por numerosos simbolismos y sus personajes son interesantes en mucha medida por estos “extraños” actos. Alef Thau nace sin brazos ni piernas, pero a medida que crece, estas aparecen, haciéndolo un hombre completo. Este es uno de los tantos ejemplos que se pueden encontrar en su obra. Personalmente creo que utiliza estos recursos de manera muy ingeniosa, por lo que sus historias me resultan muy entretenidas de leer.
Su carácter inquieto lo ha llevado a adentrarse en otros campos artísticos. Fue mimo, actor de teatro, tarotista, chaman y por supuesto director de cine, donde su obras son consideradas de culto. El Topo, La Montaña Sagrada, Santa Sangre, etc son extensiones de los temas, narrativa y simbolismos que en los comics ya profesaba. El mayor ejemplo de esto es su adaptación del libro de Duna de Frank Herbert, que nunca llegó a realizar, pero que influyó en la creación de la saga del Incal y la Casta de lo Metabarones. Bouncer, con dibujo de François Boucq, está muy influenciado por su western esotérico El Topo, y es otro ejemplo de que “Jodo” no se estancó en un género determinado en sus historias.
¿Qué más se puede decir de Jodo? Creo que es un optimista. Sus obras siempre terminan con un final feliz y usa sus historias como vehículos sanadores. Según una entrevista, afirmo que "me dediqué al cómic porque me ha permitido hacer lo que quería" y Alejandro Jodorowsky quiso sanarnos. Nada puede salir mal con este tipo.
Supongo han leído de todos ellos... ¿no? Pues partieron. ¡No olviden comentar!