Entendiendo a la Trinidad

Cuando empecé a leer comics más que como lector casual fui a un Bibliometro y saqué entre otras cosas Trinity de Matt Wagner. Y hasta el día de hoy siento que Metro de Santiago me debe una indemnización por eso. Pero mala historia o no (horrible), fue la primera vez que me expuse a los tres grandes de DC Comics todos juntos y apretados en el mismo libro, y aunque en ese tiempo la historia me pasó volando sobre mi entendimiento, creo que al final del día le debo mucho a Matt Wagner porque me hizo buscar algo mejor que eso, me hizo tratar de entender el cómo y por qué no hay que hacer lo que él hizo. Así que gracias Matt Wagner por escribir uno de los peores comics que he leído, y gracias también por escribir Demon, esa sí es una buena historia.

Así que para el siguiente artículo quiero tratar de encontrar y mostrar un entendimiento mejor sobre la trinidad, por lo que necesito que imaginen que cada uno de los personajes de la Sagrada Trinidad de DC Comics es un personaje de una comedia romántica, que falla completamente en todas su relaciones, hasta que un personaje secundario y generalmente su mejor amigo (aunque no está limitado a eso: puede ser un conserje, una señora en la micro, lo que ustedes quieran, sean creativos) les dice “NO PUEDES LOGRAR UNA VERDADERA CONEXIÓN PORQUE ERES ____”; en mi mente Wonder Woman es Sandra Bullock, Superman es Owen Wilson, y Batman es Vince Vaughn. Y en todos los escenarios yo soy Patton Oswalt gritándoles las verdades en su cara sobre su propia vida, su propio ethos y por qué las cosas en sus historias funcionan así (en el caso de Wonder Woman soy su mejor amigo gay y trabajo con ella en una pastelería, porque las comedias románticas están llenas de prejuicios).

Wonder Woman

Wonder Woman, Diana de cariño, sufre un problema terrible en el último tiempo: es una mujer. Esto la deja desde el principio coja en cuanto a las historias que se cuentan de ella, porque a la mayoría de los escritores no les importan las mujeres en general, por lo que no se preocupan de darle un buen desarrollo. En el último tiempo se ha tomado a Diana como ‘la que mata cuando Superman y Batman no lo hacen’, argumentándolo en su ascendencia amazona; pero esto anula toda la personalidad y mundo de Wonder Woman, es una excusa estructuralista para diferenciarla de sus contrapartes masculinas en el no ser: Diana es la que mata, porque no es la que necesitamos para ser mascota de la editorial; Diana no recibe la atención que necesita, porque no es un logo que venda. Si bien Diana SÍ es una guerrera amazona, es descabellado pensar en ella como una máquina de matar que no piensa; y es aún más una ofensa para todo lo que representa el personaje.

Wonder Woman es sobre todo amor, y esto es lo que va a mover al personaje. Lo vemos de inmediato en el origen del personaje, ya sea en la época de Marston donde cura a Steve Trevor, algo que no calzaba con las costumbres amazonas, o post-COIE donde, a pesar de ser la princesa guerrera de una civilización reconocida por sus habilidades bélicas, es una emisaria de la paz.

Y en ninguna parte se ve reflejado esto como en la siguiente página:

Por si no entienden inglés, o les dio paja leer tanto texto, esa es Cheetah, quien había sido en general un dolor en el culo para Diana, jodiéndole la vida a cada oportunidad; pero ella aun así se toma el tiempo para decirle lo buena bailarina que es y cómo estaría mejor dedicándose a eso más que a la maldad y villanía. Y Cheetah le hace caso y terminan siendo amigas, y Diana detuvo a su archi-enemiga, no con golpes y violencia, sino con buenas palabras, con fe en ella. Vio lo bueno en ella y trató de explotarlo, de que lo bueno triunfara sobre cualquier mal.

Es por esto que su arma de elección es el lazo, porque no es realmente un arma. La idea es DETENER la violencia antes que ocurra, y el hecho que el poder del lazo sea hacer decir la verdad ayuda a esto; ver en realidad cuál es el problema de fondo y trabajarlo. No importa qué tan mal estén las cosas, siempre va a haber una salida que no sean los puños. Y eso, antes que la guerra al final lo que importa de Diana, como lo dijo William Moulton Marston cuando presentó el personaje: “una nueva clase de super-héroe, uno que triunfa no con puños o armas, sino con amor”.

SUPERMAN

Superman es el superhéroe por excelencia: super-fuerza, super-velocidad, super-resistencia. Y entorno a eso gira su tema, que al contrario de lo que la gente parece pensar, no es la fuerza. La gracia de Superman es su resistencia, porque Superman es sobre defensa y no ataque. Superman siempre fue presentado como “más rápido que las balas”, y la utilidad que tiene esto no es otra que evitar que esas balas lleguen a su destino, lo que evita con su propio cuerpo.

En la primera animación que recuerdo haber visto del personaje - probablemente no la primera que se hizo pero es mi primer referente -, ni 10 segundos de empezado Clark Kent detiene un tren con sus manos, y usé su nombre de civil a propósito en esa oración. La educación que Ma y Pa Kent le dan desde niño a Clark mueve todo su comportamiento hacia eso: siempre primero está el otro, siempre primero te preocupas del que está a tu lado y luego piensas en ti, AUN MÁS si tienes todos los dones que su pequeño hijo adoptivo. Y es por eso que la velocidad de Superman no es usada para matar a todos sus enemigos antes de que puedan parpadear, sino es usada para evitar que esos enemigos maten a gente, destruyan ciudades, y en una de las mejores historias del azuloso: para tratar de alimentar a todo el mundo.

Lo que me parece que más representa esto es el siguiente video, haciéndole saber al mundo todo lo que necesitan sobre el hijo de Kansas: siempre puedes contar con él.

No importa lo que le lances, Supes nunca se daña, o por lo menos no en forma permanente. Aún en la historia que la idea era matarlo, lo hizo resistiendo más de lo que se pensaba posible. Porque la mejor defensa, no es un buen ataque, si no usar todo lo que puedes para defender a otros.

BATMAN

El Caballero de la Noche es el mayor ejemplo de cómo el pasado nos marca, ya hablé de él en otros artículos, pero ahora vengo en paz... más o menos.

Lo que siento como eje principal de Batman es el escape, no importa en qué versión nos fijemos (Bill Finger, Adam West, Frank Miller, Christopher Nolan[ugh]), Batman siempre está escapando de sí mismo; es más fácil hacer algo aparte que enfrentarse a sí mismo y todos sus problemas psicológicos. Como desgraciadamente Adam West es en comparación el que duró menos, ese escape es menos concursos de surf contra el Joker y más agresión.

Como comenté la semana pasada, desde Miller que una historia normal de Batman es mucho más agresiva de lo que necesita, esto porque Wayne no se preocupa realmente de proteger a su ciudad de cualquier daño, sino de responder a los daños potenciales que puedan ocurrir. Todo para evitarse a sí mismo, Bruce Wayne evade todos sus problemas para poder liberarlos sobre sus enemigos.

Esto lo vemos tras la reciente muerte de Damian (spoiler!), cuando los problemas por fin lo alcanzan y no hay nada más que agresión a sí mismo, a sus compañeros, por varios números (o eso me contaron :v).

A fin de cuentas...

La Trinidad se supone que es la punta de lanza del universo DC, y como me gusta verlo, los tres son eso en más de un sentido, los 3 son una cadena de reacciones frente a cualquier situación que todos deberían seguir hasta cierto punto:

Ante todo sé Diana, si hay necesidad sé Clark, intenta no ser Bruce.