MV52: N°13 - Sandman: Casa de Muñecas
Reseña: Oscar Cayul
Lugar: 13 (29 puntos, 5 votos)
Guión: Neil Gaiman
Dibujo: Michael Zulli, Chris Bachalo, Mike Dringenberg y Sam Kieth
The Sandman #09-16
Hay historias que los hombres se pasan de generación en generación, sin embargo las mujeres cuentan su propia versión en una lengua oculta, y esa solo la saben ella. Casa de Muñecas es el intento de Neil Gaiman de descifrar esa lengua oculta... pero su mejor intento quizás no era lograrlo, sino sólo recordarnos que estaba.
Casa de Muñecas es el segundo arco de The Sandman y es, para mí y para varios, donde de verdad parte la historia que nos quiere contar el autor. Donde antes teníamos una historia oscura, con tintes fantasiosos y de terror, además del final de antología conociendo a Muerte, ahora tenemos una Casa de Muñecas que comparte algunos elementos con el arco anterior: Sueño re-armando su castillo, un número particularmente perturbante, un “villano” curioso y acompañado de momentos terroríficos, etc. Pero donde Preludios y Nocturnos entregaba una luz de diferencia en tono sólo en su último episodio (y en otros momentos aislados), aquí uno siente que está leyendo algo nuevo; algo que no es terror, pero puede dar miedo; algo que no es del todo fantasía, pero te lleva a otro lugar; algo que es un cómic, pero se siente como si fuera mucho más.
Para Neil Gaiman, esta es una historia femenina, y tiendo a estar de acuerdo. Los verdaderos protagonistas, las heroínas y víctimas son en general mujeres. Los hombres de esta historia (incluyendo el que le da el titulo al cómic) tienen serias limitaciones, son apáticos o llevados por un innegable deseo propio y egoísta que las mujeres de esta historia precisamente buscan evitar. Y claro, está Deseo, la primera vez que la conocemos y que descubrimos su andrógina presencia. Para mí el Deseo tiene rostro de mujer, pero para mi novia tiene rostro de hombre, lo que habla de la excelente caracterización de esta historia.
Nuestra historia parte con Nada, nuestra primera mujer. Ella es una gobernante de un pueblo mítico, perdido en el tiempo. Su hermosura no tiene parangón en los mortales, pero quizás un Eterno sí podría enamorarla. Y así sucede: Nada se enamora del Señor de los Sueños sólo para darse cuenta que la relación de una mortal con un Eterno no puede ser, teme por la seguridad de su pueblo y huye de quien desea. Por supuesto, Morfeo entiende poco estos motivos y solo la empuja a tomar una decisión absolutista: o te quedas conmigo o el infierno será tu destino. La respuesta no la tenemos en este número... ni tampoco en el siguiente. Resulta que ya vimos a Nada en el número 4 de Sandman cuando visita el infierno y vimos a su amada por primera vez. Esta historia de amor frustrada es el marco en donde se engancha nuestro arco, pero no sabremos qué será de ellos dos hasta el también excelente arco Estación de Nieblas.
Rose es nuestra protagonista, una muchacha joven y perseguida por la idea de una familia que ya perdió, su hermano lleva tiempo viviendo lejos de ella y quiere recuperarlo. Rose es interesante, curiosa pero sobretodo sabiamente reflexiva y valiente. La conocemos viajando a conocer a una señora en Londres, que resulta ser su abuela, Unity Kincaid. Su abuela fue víctima de la enfermedad del sueño y durmió casi toda su vida, siendo violada y dando a luz en el proceso. Unity despierta cuando Sueño es liberado de su prisión y también busca conocer a su familia. Esta nueva familia motiva a Rose en busca de su hermano a través de Estados Unidos, donde encontrará gente variada, y a veces temible. Este viaje es la madurez de Rose, que siempre parece menor, a encontrarse a ella misma. Un viaje similar que hace cada uno, quizás no en la forma de viaje, para dejar de depender de las circunstancias y ser uno mismo ante ella. El encuentro de Rose con el Señor de los Sueños será precisamente eso, el peso de las circunstancias definiendo quién es ella.
Lyta Hall es una ex-superheroína, de tradición familiar. Su esposo, Hector Hall, es Sandman, defensor de los sueños de todos los niños. Sin embargo solo ayudan a un niño. Por otro lado ella está embarazada pero lleva más de dos años esperando y aún no nace. Su esposo había muerto y sin embargo ahora vive, y Bruto y Glob, los ayudantes de su esposo, no parecen tener las mejores intenciones, de hecho, parece que solo los utilizan. Lyta es silenciosa, ama a su esposo pero siente que quizás no queda tanto de él. Cuando llega el Señor de los Sueños a su vida, todo cambiará y su vida, la que dejó literalmente suspendida en el tiempo por amor a su esposo, empezará de nuevo con el dolor de que su vida era mentira, y que ahora una representación antropomórfica de una entidad más poderosa que los dioses ha reclamado como suyo parte de su vida. La historia de Lyta se entrecruza en Casa de Muñecas solo por un número, pero seguirá siendo relevante para siempre este momento, que define toda su participación futura.
El Corintio es una pesadilla. Es quizás el elemento que más permanece del primer arco en tanto horror. Lo conocemos en principio por unas cuantas páginas en donde vemos el horror de sus víctimas, o el resultado de las mutilaciones que comete. ¿Qué busca El Corintio? Lo mismo que muchos horrores vivos, sentirse los protagonistas de una propia historia enferma en donde ellos son amos y señores de sus víctimas. Ansia perturbadora, horror andante, ojos que muerden y tritura, el Corintio es una pesadilla perfecta y el solo verlo es ya una imagen que difícilmente pasará por alto. El Corintio, junto a Bruto y Glob, salieron del Sueño cuando el Señor de allí cayó prisionero.
Deseo es Etern@. Satisface por medio de su corazón sus designios y pretende manejar, manipular y mover las piezas de la historia a su propio antojo. Ha encontrado otra forma de perturbar a Sueño distinta a lo que sucedió con Nada (historia en que el corazón es también relevante). Deseo es un nuevo Eterno que conocemos, luego de Muerte. En el mismo número conocemos un poco a Desespero, pero es Deseo quien parece ser la principal impulsora, o la presencia escondida que tira de los hilos. Rose se sentirá atrapada en un juego similar por Sueño; Sueño, por su parte, se siente atrapado por un juego similar por las reglas, o quizás, por su propia reclusión, en donde la humanidad toma otro color para él.
Sueño es nuestro anterior protagonista. A su manera es también presa de las circunstancias. Estuvo preso pero ahora vuelve a estar libre y ha restituido gran parte del control de su Reino. Solo faltan algunos sueños perdidos, al parecer en la Tierra, y la aparición de un vórtice, el primero de esta era. ¿Qué es un vórtice? Resulta que es un ser humano que puede hacer caer las barreras del sueño de toda la humanidad, pudiendo así finalmente hacer colapsar la existencia de todo. El rol de Sueño es hacerse cargo de ello, así que mantiene un ojo puesto en este vórtice, y el vórtice es Rose Walker... la verdadera protagonista de nuestra historia.
Sueño es más bien el co-protagonista de esta historia, un personaje algo frío y poco empático, pero en proceso. Su accionar es constantemente discutido y descalificado por prácticamente todos los personajes mencionados, pero las que tienen razón son las voces femeninas. Rose dice cerca del final que se calle, que deje de disculparse, que haga lo que tiene que hacer y su abuela, un ser humano limitado y a punto de fallecer, le recalca lo poco que entiende de su propio mundo. Lyta Hall le enrostra su crueldad, y Sueño simplemente tiene que apurarse para una cita. Deseo tiene razón cuando remarca acerca del vórtice como un problema para su hermano mayor: "Es una mujer".
Casa de Muñecas como segundo arco contiene prácticamente todas las bondades de la serie. Tiene dos números independientes que sirven de introducción e interludio que se cuentan entre lo mejor de la serie, mostrándonos a Sueño en su faceta más inhumana y humana a la vez; cuenta con elementos de horror que apelan fuertemente a emociones humanas con las que podríamos empatizar si no fuéramos tan hipócritas; protagonistas femeninas que dan un contrapunto a la masculinización general de los cómics, entregando una narración interesante y profunda; y además, es parte de una obra más grande, es un capitulo relevante en la historia de Sueño y sus cambios de cara a esta generación.
Casa de Muñecas es sobre el deseo, es acerca de sobreponerse a la adversidad con algo más que no sea el deseo, es ir un poco más allá de lo entregado y crear algo nuevo. Los coleccionistas, asesinos seriales, son solo eso, el reflejo de la maldad humana sin maquillaje, un deseo sin alma, una fantasía que es solo una acentuación. Sueño es también un reflejo de terquedad ante la humanidad, pero va trabajándolo y lo vemos justo después de despedirse cruelmente de Lyta Hall, conocer a su cita... Sueño tiene un amigo, y le importa... es humano y él es Eterno, y su relación es de mutuo beneficio en algo más que no es solo simple deseo. Rose Walker en la búsqueda de su hermano conoce el rostro de la humanidad, pero encuentra soporte en los rechazados, como el travestido Hal, o en "la copia" de ser humano que es Gilbert, y sí, se puede decir que somos bastante más que solo un corazón que bombea sangre. El corazón es un símbolo pero no solo para el deseo... y eso a Deseo le cuesta entenderlo. Esta es una historia de mujeres que no siempre se cuenta a los hombres, pero Neil Gaiman de alguna manera parece que la escuchó y nos hizo este pequeño gran cuento para contemplarla.